21/9/12

Tener déficit fiscal no es “un expolio, ni un robo, ni algo injusto, sino la expresión de una justicia fiscal progresiva”

"Ese principio implica que las comunidades más ricas transfieran recursos a las que lo son menos a través de los mecanismos establecidos. Eso es considerado por los teóricos del soberanismo como prueba del “expolio fiscal” de Cataluña, pero es algo que ocurre en todos los sistemas federales modernos.

 Como ha recordado recientemente José María Ruiz Soroa (El Correo, 2-9-2012), tener déficit fiscal no es “un expolio, ni un robo, ni algo injusto, sino la expresión de la justicia fiscal progresiva”.

 A nadie que paga más impuestos de lo que cuestan los servicios públicos que recibe se le ocurriría salir a la calle gritando “tengo un déficit fiscal personal”, dice Ruiz Soroa, para concluir que si las diversas comunidades tuvieran todas un saldo fiscal igual a cero “podríamos afirmar que estamos ante un Estado radicalmente injusto e insolidario que incumpliría sus funciones más básicas”.

 Cataluña contribuye a la Hacienda común en mayor medida que otras porque es más rica que ellas, o sea, porque hay en su población más contribuyentes ricos.

Lo mismo ocurre en Alemania, donde tres Länder, más la ciudad de Hamburgo, contribuyen a la financiación de los otros 12, que están por debajo de la media en ingresos per cápita. El artículo 107 de su Constitución establece que “se garantizará mediante ley que quede debidamente compensada la desigual capacidad financiera de los Länder”. 

 Pero es cierto que una ley aprobada en aplicación de ese precepto fue recurrida en 1999 por el estado de Baviera ante el Tribunal Constitucional, que resolvió prohibir decisiones que implicaran que “el orden de capacidad financiera de los Länder quede invertido después del reparto” de los fondos de compensación. 

Ese principio figuraba en el nuevo Estatut, pero el Constitucional lo echó abajo argumentando que tal medida correspondería en su caso a la jurisdicción estatal, no a la de una parte, la comunidad autónoma.

Un Land puede mejorar posiciones en el ranking, pero no desbordar a uno de los contribuyentes netos en el resultado final. Es una virguería reveladora de la mentalidad algo mezquina de quienes lo plantearon en esos términos: exigir que los Estados pobres no reciban más ingresos por habitante que los que son contribuyentes netos no tiene una justificación moral o política clara. En todo caso, tranquiliza a los catalanes saber que no son los únicos afectados por esa obsesión.

 Según datos de la Generalitat, Cataluña es la tercera comunidad en recaudación y la octava en financiación por cabeza, tras su aportación a la solidaridad. Pierde por tanto cinco puestos. Las otras dos comunidades que son contribuyentes netas, Baleares y Madrid, pierden respectivamente siete y nueve posiciones. 

El hecho de que afecte a esas otras dos comunidades podría tal vez propiciar una negociación que ya no sería solo sobre Cataluña, sino sobre la adecuación del sistema de financiación a las condiciones de la crisis. De la reunión podría salir el encargo de un informe técnico independiente que actualice datos e incluya los relativos a las balanzas comerciales entre comunidades, inseparables del debate sobre las balanzas fiscales."         ( El País, 19 SEP 2012)

No hay comentarios: