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20/4/23

Joan Ferran, ex diputado del PSC: "ha habido una espiral del silencio en Catalunya"

 "El ex diputado del PSC Joan Ferran, que acaba de publicar el libro “El brazo friki del procés y del posprocés" (Edicions Hildy, 12 euros), ha manifestar en una entrevista al canal de Youtube de Xavier Rius que "va siendo hora de que pasemos cuentas después de diez años de sufrimiento, improperios, malas caras y malos humores".

Ferran ha explicado que "el libro pasa cuentas con los que se extralimitaron con su forma de hacer y decir" y ha detallado que recoge los friáis del "clímax del proceso". "Ahora estamos en un cierto momento de stand baby, de estancamiento, pero le aseguro que esto volverá", ha señalado.

El histórico dirigente socialista ha avisado que "volverá el post proceso porque de forma recurrente el independentismo va buscando como realimentar sus posiciones y a las más mínima excusa es capa de montar un pequeño sidral". Con el show de la señora Ponsatí en Barcelona ya han intentado montar manifestaciones, situaciones delicadas en el ámbito judicial...", ha expuesto.

Joan Ferran ha dicho que "no tengo ningún friki preferido" pero "a mí me preocupa muchísimo un señor como Joan Canadell que es capaz de ir a la Rambla y decir que el atentado fue un montaje del CNI". "Hay muy mala fe", ha sentenciado.

Finalmente, ha lamentado que "ha habido una etapa de silencio exagerada", "una espiral del silencio en Cataluña" y ha apostado por "repasar lo que pasó y conviene pedir a los que se equivocaron que rectifiquen y reconozcan sus fallos". "Tienen que pagar el peaje de las urnas y el del descrédito", ha concluido."                 (e-notícies, 31/03/23)

20/2/23

Un periodista argentino denuncia acoso de la Generalitat. Tacha al Govern de "xenófobos y fascistas" por querer retirarle una beca tras un artículo crítico

Bruno Bimbi @bbimbi

Hace cinco meses que me mudé a Madrid, pero la Generalitat de Cataluña sigue castigándome por aquel artículo que escribí en @ctxt_es. Ahora quieren que devuelva una beca de hace dos años. Estoy en el último semestre de la carrera en la UB y mi promedio es 9,1. Es de locos.

Lo que pasó con aquel artículo en @ctxt_es fue espantoso. Fue la primera vez en mi carrera periodística que, por la presión de un gobierno, un medio pide disculpas por un artículo mío. He escrito sobre cosas mucho más peligrosas y denunciado a gente poderosa y nunca había pasado.

Desde entonces, en la UB me bajaron notas de los exámenes promediándolos con una nota por “actitud”, me sacaron del expediente los créditos de dos materias aprobadas con matrícula de honor, me duplicaron el NIUB y me rechazaban la beca por eso, entre mil maldades más.

Cuando, en la pandemia, estuve sin trabajo y la pasé mal, la Generalitat me bloqueó por más de un año el pago de la ayuda al alquiler diciendo que faltaba un documento que tuve que presentar CUATRO veces. Dos veces me negaron la beca diciendo que no estaba matriculado en la UB.

Ahora que me fui a vivir a Madrid, inventan esto. Quieren que devuelva la beca que me pagaron en 2021 después de cuatro apelaciones presentando el certificado de matrícula una y otra vez para probar que sí estaba matriculado. Eso empezó ni bien salió el artículo en
@ctxt_es.

Ojalá que esto sirva por lo menos para que los medios (sobre todo medios que se presentan como progresistas e independientes) empiecen a proteger a sus periodistas en vez de soltarles la mano cuando desde el poder político los acosan por un artículo aprobado y editado por ellos.

Ojalá que este tipo de cosas ayuden a reflexionar también a tanta gente de izquierda (inclusive dirigentes a los que respeto mucho por otras muchas razones) que sigue defendiendo o justificando a esta banda de xenófobos y fascistas que son la versión catalana del trumpismo.

Lea recuerdo que lo primero fueron quince días de (cientos de) insultos (inclusive homofóbicos y xenófobos) y asedio moral en las redes, sumados a la intimidación de medios independentistas. Luego las “disculpas” de @ctxt_es y por fin las maniobras académicas y administrativas.

3:47 p. m. · 17 feb. 2023 desde Madrid, España·
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 "El periodista argentino Bruno Bimbi ha escrito un hilo en twitter donde denuncia acoso de la Generalitat como represalia a un artículo escrito en noviembre de 2020 en ctxt que se hizo viral y en el que acusaba de "xenofobia" a la universidad catalana.

Bimbi, que es también Doctor en Estudios del Lenguaje y activista LGTBI, se encontraba en aquel momento realizando un curso en la UB. En el citado artículo el periodista se quejaba de que los profesores se negaban a dar una sola clase en castellano a pesar de que muchos de los alumnos desconocían el catalán al ser latinoamericanos y orientales.

"El fanatismo, la xenofobia y hasta la falta de gentileza gobiernan Cataluña”, afirmaba. El artículo corrió por las redes sociales y ahora el periodista afirma que la Generalitat quiere retirarle la beca a modo de 'castigo'.

"Hace cinco meses que me mudé a Madrid, pero la Generalitat de Cataluña sigue castigándome por aquel artículo que escribí en @ctxt_es. Ahora quieren que devuelva una beca de hace dos años. Estoy en el último semestre de la carrera en la UB y mi promedio es 9,1. Es de locos", explica.

"Lo que pasó con aquel artículo fue espantoso. Fue la primera vez en mi carrera periodística que, por la presión de un gobierno, un medio pide disculpas por un artículo mío. He escrito sobre cosas mucho más peligrosas y denunciado a gente poderosa y nunca había pasado", asegura.

"Desde entonces, en la UB me bajaron notas de los exámenes promediándolos con una nota por 'actitud', me sacaron del expediente los créditos de dos materias aprobadas con matrícula de honor, me duplicaron el NIUB y me rechazaban la beca por eso, entre mil maldades más", afirma.

"Cuando, en la pandemia, estuve sin trabajo y la pasé mal, la Generalitat me bloqueó por más de un año el pago de la ayuda al alquiler diciendo que faltaba un documento que tuve que presentar cuatro veces. Dos veces me negaron la beca diciendo que no estaba matriculado en la UB", señala.

"Ahora que me fui a vivir a Madrid, inventan esto. Quieren que devuelva la beca que me pagaron en 2021 después de cuatro apelaciones presentando el certificado de matrícula una y otra vez para probar que sí estaba matriculado", añade.

"Ojalá que esto sirva por lo menos para que los medios (sobre todo medios que se presentan como progresistas e independientes) empiecen a proteger a sus periodistas en vez de soltarles la mano cuando desde el poder político los acosan por un artículo aprobado y editado por ellos", apunta.

El periodista pide que "ojalá que este tipo de cosas ayuden a reflexionar también a tanta gente de izquierda (inclusive dirigentes a los que respeto mucho por otras muchas razones) que sigue defendiendo o justificando a esta banda de xenófobos y fascistas que son la versión catalana del trumpismo".

"Les recuerdo que lo primero fueron quince días de (cientos de) insultos (inclusive homofóbicos y xenófobos) y asedio moral en las redes, sumados a la intimidación de medios independentistas. Luego las 'disculpas' de @ctxt_es y por fin las maniobras académicas y administrativas", concluye."  
           (e-notícies, 17/02/23)

26/8/22

La ANC trata de hacerse con toda asociación o colegio, para implantar allí su doctrina nacionalista... Lo que menos importa de esta inmoral estrategia es la propia asociación. El objetivo es hacerse con su dirección para implantar ideología... Un ejemplo “sangriento” de esta situación lo encontramos en las universidades catalanas, en las que se tilde de fascistas a los que se oponen a ella

 "Víctor Terradellas, implicado en los ridículos tejemanejes de los nacionalistas catalanes con Rusia, abandonaba su partido Junts, lamentándose de que los órganos de dirección hubiesen actuado sin “ningún tipo de neutralidad”…. ¿Acaso la esperaba? Los lideres de cualquier régimen político, abjuran de la neutralidad porque venden su doctrina. Los que la compran no serán en ningún caso neutros; por eso, la compraron. Sin embargo, los directivos de una asociación, civil, sanitaria, profesional, educativa o deportiva, que suele reunir a numerosas personas con objetivos, solo vinculados a la asociación, están obligados a respetar la neutralidad ideológica de los socios, pues la dirección los representa a todos. Posicionarse de parte vulnera flagrantemente la libertad de los asociados.

Ese es el sentido de la  neutralidad. Cualquier individuo que a título personal o como grupo pretenda liderar una asociación no política, debe excluir su particular ideología. La ANC, fiel servidora del nacionalismo radical, trata de hacerse con toda asociación o colegio, para implantar allí su doctrina totalitaria. Lo que menos importa de esta inmoral estrategia es la propia asociación. El objetivo es hacerse con su dirección para implantar ideología. El “ataque” de las huestes separatistas  suele dejar confusos a los socios, sobre todo si son contrarios a la ideología que se intenta imponer. Un ejemplo “sangriento” de esta situación lo encontramos en las universidades catalanas, tomadas prácticamente por rectores oportunistas, que nunca hubieran ascendido por méritos propios, pero que han encontrado en la amoral elección a dedo una manera de medrar y ascender, solo con venerar “la causa”, la sientan propia o no.

El escenario universitario ha sido siempre “el oasis de cultura, conocimiento y dialogo”, así que, con esta intromisión ideológica, el propósito constitutivo ha quedado hecho trizas. Estos rectores como buenos estómagos agradecidos, no solamente animan las consignas involucionistas, si no que permiten que se tilde de fascistas a los que se oponen a ella. Ante el constante acoso y humillación sufridos, en progresivo goteo, muchos profesores brillantes ya se han ido marchando de Cataluña, y muchos otros se lo están pensando. Los lectores o doctorandos extranjeros ya ni aparecen, pues ha corrido la voz de lo que aquí les espera. Las pancartas de rechazo contra cualquiera que les cuestione surgen a la más mínima reivindicación, llegando al ataque físico que los rectores ignoran, mirando a otro lado. (...)

 Esta descarada invasión de la libertad de pensamiento ha propiciado que se levante un muro de resistencia contra la que es ya una clara dictadura. El objetivo central de esa resistencia es recuperar la neutralidad, perdida pues nadie y menos en el siglo XXI acata un régimen autoritario del tipo que sea. Desde aquí mi profundo respeto, reconocimiento y admiración por los denodados esfuerzos de este grupo de más de 200 profesores y catedráticos que conforman “Universitarios por la convivencia” -colectivo al que me siento orgulloso de pertenecer- cuyo objetivo vertebral es el recuperar la neutralidad y la libertad de pensamiento de la academia. Más allá de los estragos sufridos en la convivencia vecinal y familiar de la ciudadanía, algún día, estoy seguro, se llegará a reconocer también este tremendo daño infligido a la comunidad universitaria.

 Hacerse con las instituciones de un país es un ejercicio histórico de los regímenes dictatoriales. Cataluña sufre pues, desde 2012, con el interesado abrazo de Más a la independencia, lo que denominaré como “invasiones bárbaras”estrategia política involucionista consistente, en apropiarse del gobierno de una institución para imponer un régimen ideológico totalitario, estrategia jaleada y subvencionada por el post gobierno golpista. Todo lo contrario, pues, de la neutralidad de representación. Los invasores no tienen el más mínimo proyecto ni interés por la institución, y como peña sectaria, cuasi religiosa que sigue las instrucciones del gurú de turno, la “asaltan a saco”, a toque de corneta. Se trata de una aún más perversa versión del mayor engaño catalán: “derecho a decidir sí, pero lo que yo te diga”.

Compartiendo gobierno en mi colegio profesional durante ocho años, mantuve una estricta neutralidad -que al salir yo del gobierno, no tardó en perderse- descartando de plano, el referéndum asociativo que fanáticos colegiados nos planteaban, con la pretensión de poder constatar el grado de división del colectivo. Afrontamos en 2018 una candidatura que ya solo por su lema instaba a la parcialidad: “psicólogos por la república”. Hoy, afortunadamente, aunque la ANC sigue manteniendo su sectorial de colegios profesionales “a invadir”, se trata de un movimiento decadente.

 Otro ejemplo de vergonzosa invasión, lo sufre la Cámara de Comercio, entidad de gran arraigo, tomada, con malas artes, hace años, ya en el periodo electoral, utilizando la citada “sectorial de colegios” de la ANC. El juez acaba de confirmar la sentencia: las elecciones deberán repetirse. Sociedad Civil Catalana, afortunadamente, dispone también de una sectorial de colegios, pero justo para lo contrario: promover una estricta neutralidad de representación. En su reciente escuela de verano, la neutralidad ha sido su eje vertebrador. La resistencia a la oscuridad y al borreguismo que ofrece el nacionalismo, crece como la espuma en Cataluña y terminará, por mucho sacrificio que nos cueste, por librarnos de este inesperado yugo con flechas”, que no supimos ver venir. Como nos dice Ayn Rand; «Cuando repares que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un sacrificio personal, entonces podrás afirmar sin temor a equivocarte que tu sociedad está condenada»."            (Ricard Cayuela, elTriangle, 02/08/22)

27/7/22

Plataforma per la Llengua ha comparado que un profesor universitario dé las clases en castellano con el hecho de que asista borracho o sea mal educado... Lo ha hecho en un vídeo publicado en las redes para pedir a los estudiantes que denuncien a los profesores, "¿Verdad que si el profesor es mal educado o da la clase bebida te quejarás? ¡Pues también es necesario que lo hagas si se salta el plan docente e imparte la clase en otra lengua!"

 "Plataforma per la Llengua ha comparado que un profesor universitario dé las clases en castellano con el hecho de que asista borracho o sea mal educado. Lo ha hecho en un vídeo publicado en las redes para pedir a los estudiantes que denuncien a los profesores que se "salten el plan docente".

La autollamada ONG del catalán ha elaborado un vídeo (https://twitter.com/i/status/1509229051734593546)  que muestra a un grupo de estudiantes escandalizados porque ven a su profesor bebiendo alcohol en clase y siendo maleducado. Tras las quejas de los estudiantes que le amenazan con denunciar al rector, el propio maestro comienza a dar la clase en castellano y los estudiantes reflexionan que "los profes que cambian de lengua son unos imbéciles".

"¿Verdad que si el profesor es mal educado o da la clase bebida te quejarás? ¡Pues también es necesario que lo hagas si se salta el plan docente e imparte la clase en otra lengua!", expone la entidad, que ha puesto en marcha una web para que los estudiantes denuncien la vulneración de "derechos lingüísticos en la universidad".             (e-notícies, 31/03/22)

26/7/22

Hace años que en Catalunya se intimida a los periodistas y medios de comunicación que no siguen las directrices de los gobiernos nacionalistas ante el silencio de casi todos. Y, en muchos casos, claudicante. Así, ha terminado el país, con farsas como la de presentar durante cinco años a la cupera Anna Gabriel como una represaliada y una exiliada... Pero algunas formas de intimidación parecen haber cambiado. Ya no son tan sutiles. Son más bruscas, al estilo Miguel Angel Rodríguez. El abucheo del diputado y vicepresidente de JxCAT, Francesc Dalmases, a una periodista del programa de TV3 Faqs ante la presidenta del Parlament, Laura Borràs, segundo cargo institucional del país, pone de relieve el profundo deterioro de la democracia en Catalunya y la sumisión de gran parte del periodismo catalán en el poder político hegemónico

 "Intimidar o presionar a periodistas y medios de comunicación no es nuevo, ni en Catalunya, ni en las mejores democracias del mundo. Durante años, en Cataluña se ha hecho de forma sibilina, hipócrita, copiando el estilo de la instrucción secreta del Abad de Vivanco en el Decreto de Nueva Planta: «Para que se consiga el efecto sin que se note el cuidado». Como hizo el empresario convergente Max Marcó suprimiendo la suscripción al Diari de Girona del Institut d'Assistència Sanitària cuando él era su presidente como represalia por haber publicado unos presuntos casos de corrupción de gente cercana a él en Roses. 

O cuando el secretario de Comunicación de la Generalitat, David Madí, me dijo en un despacho de la Plaza Sant Jaume que "si el Diari de Girona se lleva bien, nosotros también nos llevaremos bien". O cuando el propio David Madí y Artur Mas, entonces Consejero Jefe, me intentaron perdonar la vida, en un despacho también de la Plaza Sant Jaume, después de haber sido el Diari de Girona el primero, y único, diario en publicar la trama empresarial de la familia Pujol Ferrusola, y las correspondientes concesiones de la Generalitat (año 1999). 

O cuando otro secretario de Comunicación, Josep Martí Blanch, me soltó que su gobierno hacía política y, por tanto, las subvenciones eran para hacer política. O cuando Ferran Falcó, entonces jefe de gabinete de Felip Puig en Medio Ambiente me espetó que el Diari de Girona era el único medio excluido de una campaña de publicidad porque «me da la gana». 

Hace años que en Catalunya se intimida a los periodistas y medios de comunicación que no siguen las directrices de los gobiernos nacionalistas ante el silencio de casi todos. Y, en muchos casos, claudicante. Así, ha terminado el país, con farsas como la de presentar durante cinco años a la cupera Anna Gabriel como una represaliada y una exiliada.

 Pero algunas formas de intimidación parecen haber cambiado. Ya no son tan sutiles. Son más bruscas, al estilo Miguel Angel Rodríguez. El abucheo del diputado y vicepresidente de JxCAT, Francesc Dalmases, a una periodista del programa de TV3 Faqs ante la presidenta del Parlament, Laura Borràs, segundo cargo institucional del país, pone de relieve el profundo deterioro de la democracia en Catalunya y la sumisión de gran parte del periodismo catalán en el poder político hegemónico. Es muy grave por varias razones. 

1. Existe un pacto de silencio durante diez días hasta que lo publiquen tres diarios digitales. 

 2. La presidenta del Parlamento, Laura Borràs, es testigo directo de una humillación a una periodista y no hace nada. 

3. El director del programa, Pere Mas, reconocido periodista del régimen, no sólo mira hacia otro lado, sino que le quita hierro al tema hasta que no puede negar la evidencia cuando sale publicado. Un ejemplo de sumisión al poder, lo que nunca debería hacer un periodista. 

 4. El Colegio de Periodistas y el Consejo de la Información, tan diligentes para emitir un comunicado sobre un tema que no afecta a su ámbito de actuación (el caso Farreras/Inda/Villarejo) todavía no se ha pronunciado sobre un brusco ataque a una periodista ante la segunda autoridad del país, y un diputado que además es vicepresidente de JxCAT. Bien, el Colegio de Periodistas hizo un lamentable tuit adjuntando un supuesto comunicado de condena, que, en realidad era de un caso del 17 de enero de 2019. Por supuesto, no mencionaron los nombres de Borràs, ni de Dalmases , no fuera que alguien se molestara y tomara represalias a periodistas acostumbrados a vivir muy bien alabando al gobierno. 

5. ¿No tiene nada que decir la consejera de Igualdad y Feminismos de la Generalitat, Tània Verge, sobre el hecho de que un matón (me gusta más la definición castellana de matón) intimide a una periodista abusante de su superioridad? 

6. Los diarios convencionales han pasado de puntillas sobre el tema. 

El caso Dalmases/Laura Borràs es el vivo retrato de una Catalunya decadente donde se cumple más que en ningún otro sitio lo que dijo Ryszard Kapuscinski: «Cuando se descubrió que la información era un negocio, la verdad dejó de ser importante »."               (Jordi Xargayó, Diari de Girona, 23/07/22)

15/6/22

Albert Soler: Al parecer, quedan todavía ayuntamientos que nombran 'personas non gratas'... El domingo estuve de paella con mi amigo Martí, el dueño de un cámping de L’Escala al que los 'lacistas' sometieron a escraches... Además, quisieron nombrarlo 'persona non grata' en el municipio donde nació, donde trabaja y donde crea empleos. Martí confiesa que eso le dolió, cosa que a mí me sorprende, porque ninguna medalla tiene más valor que ser nombrado 'persona non grata' por el lacismo. Yo lo intento con ganas y no hay manera... Nunca he tenido tarjeta, pero esta vez las imprimiría a miles, para presentarla en todo sitio al que tuviera que acudir: «Albert Soler. 'Persona non grata'». Con una tarjeta de visita así, se te abren todas las puertas... un ayuntamiento, con todo el pleno municipal decidiendo nombrarte no grato mientras uno sigue las votaciones desde la primera fila, rodeado de la familia, emocionado ante tan gran honor, al borde de las lágrimas... Nombrar a alguien 'persona non grata' no tiene otro valor que el de ofrecer diversión gratuita al galardonado. Martí se lo debería repensar

 "El domingo estuve de paella con mi amigo Martí, el dueño de un cámping de L’Escala al que los 'lacistas' sometieron a escraches cuando el 'procés' todavía coleaba, el pobre (el 'procés', no Martí). Además, quisieron nombrarlo 'persona non grata' en el municipio donde nació, donde trabaja y donde crea empleos. Martí confiesa que eso le dolió, cosa que a mí me sorprende, porque ninguna medalla tiene más valor que ser nombrado 'persona non grata' por el lacismo. Yo lo intento con ganas y no hay manera, en cambio Martí, que tuvo en su mano tamaño honor, lo evitó in extremis. Dios da pan a quien no tiene dientes.

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Cierto es que el caso de Martí es distinto al mío, porque él ama a su pueblo, que es el de sus padres y abuelos. En cambio, para alguien a quien le importa un bledo su ciudad, su región, su país y el mundo entero, ser designado 'persona non grata', de donde sea da igual, vale por toda una vida. Nunca he tenido tarjeta, pero esta vez las imprimiría a miles, para presentarla en todo sitio al que tuviera que acudir: «Albert Soler. 'Persona non grata'». Con una tarjeta de visita así, se te abren todas las puertas. Sí que hay personas individuales a las que no soy grato, y espero conseguir que haya muchas más, pero son pobres diablos que a nadie importan. No son lo mismo que un ayuntamiento, con todo el pleno municipal decidiendo nombrarte no grato mientras uno sigue las votaciones desde la primera fila, rodeado de la familia, emocionado ante tan gran honor, al borde de las lágrimas.

Al parecer, quedan todavía ayuntamientos que nombran 'personas non gratas', supongo que de la misma manera que mantienen el derecho de pernada o los azotes en público. Pero mientras a estas dos últimas costumbres uno les imagina cierta utilidad, no acierto a comprender de qué sirve declarar no grato a alguien. Un no grato mantiene todos sus derechos, no es expulsado de la ciudad, sigue trabajando como siempre y no sufre ningún aumento en tributos e impuestos. En cambio, las risas que debe de proporcionar tal título honorífico, alegran las cenas familiares y de amigos. Nombrar a alguien 'persona non grata' no tiene otro valor que el de ofrecer diversión gratuita al galardonado. Martí se lo debería repensar y solicitar que le revisen la concesión de ese honor. Lo que nos vamos a reír."               (Albert Soler , El Periódico, 14/06/22)

27/1/22

En Cataluña hay un concierto público-privado para socavar los derechos fundamentales de lo que se entiende como “minorías sobrantes”... por eso la carpa de la asociación constitucionalista S’ha Acabat! (que reivindica el pluralismo, el bilingüismo y la convivencia entre catalanes y entre Cataluña y el resto de España), ha sufrido un ataque de radicales independentistas en la Universidad Autónoma de Barcelona... el independentismo catalán pasa por alto el frecuente desdén hacia los que tienen opiniones distintas y la estigmatización de quienes reclaman que se les escuche

 "Esta semana, la carpa de la asociación constitucionalista S’ha Acabat! ha sufrido un ataque de radicales independentistas en la Universidad Autónoma de Barcelona. La seguridad privada no logró contener a los asaltantes. Los Mossos no acudieron a la llamada porque las autoridades no quieren que entren en la Universidad. Después de asaltar y derribar la carpa, los activistas cantaban “Pim-pam-pum, que no en quedi ni un”. En el Parlament la CUP aplaudió el valeroso acto de resistencia antifascista. Se refería al de los que impidieron que otras personas defendieran pacíficamente sus ideas.

Vemos instintos totalitarios en todas partes salvo cuando los tenemos delante. A veces definirse como antifascista sirve para comportarte como un fascista con aquellos a los que llamas fascista. S’ha Acabat! reivindica en su página web el pluralismo, el bilingüismo y la convivencia entre catalanes y entre Cataluña y el resto de España. La acusación —que aunque fuera cierta no justificaría una agresión— es delirante, pero quizá resulta más deprimente el comunicado de la universidad que lamenta la situación de tensión y la instrumentalización política (la declaración de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas no es mucho mejor).

Como ha señalado el historiador Joaquim Coll, la declaración no dice nada de quien insulta, boicotea, coacciona y agrede: debe de ser un poco como el volcán de La Palma, que no es culpa de nadie. La equidistancia entre la víctima y el agresor no es neutralidad: Coll se preguntaba si sería cobardía o complicidad, y quizá sea una mezcla de las dos. Por desgracia, no es un episodio aislado.

El profesor de Derecho Constitucional Josu de Miguel escribía que en Cataluña hay un concierto público-privado para socavar los derechos fundamentales de lo que se entiende como “minorías sobrantes”. Da igual que sean pocos y que hablen en voz baja: parece que quienes defienden esos derechos siempre resultan un poco demasiado estridentes. La atribución dadaísta de “principio democrático” al independentismo catalán pasa por alto el frecuente desdén hacia los que tienen opiniones distintas y la estigmatización de quienes reclaman que se les escuche. Muchos celebran, con razón, que el clima haya mejorado en Cataluña. Que la mejoría sea real exige aceptar la pluralidad interna en la comunidad y no tolerar o minimizar actos antidemocráticos.              (Daniel Gascón, El País, 09/10/21)

14/1/22

Caza de brujas lingüística: Recurso contra el acuerdo de Govern que permite perseguir por "la vía política, penal, administrativa o de otra naturaleza" a las personas que ataquen "injustamente" la inmersión

 "Las entidades Hablamos Español y Convivencia Cívica han interpuesto un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) para que se declare nulo el acuerdo del Govern que ofrece asistencia jurídica a los profesores y directores que decidan incumplir la sentencia sobre el 25% de castellano.

El Ejecutivo también acordó el pasado 4 de enero "exigir responsabilidades por la vía correspondiente, ya sea política, penal, administrativa o de otra naturaleza, a todas aquellas personas o entidades que ataquen injustamente a personas o colectivos por la defensa y el uso del catalán o por el ejercicio de sus funciones".

Las dos asociaciones defienden que el acuerdo es nulo de pleno derecho porque "se dicta para incumplir una sentencia firme (se proporciona asistencia jurídica gratuita a los profesores y directores que incumplan la sentencia del TSJC en materia de lengua en la enseñanza) y se acuerda destinar dinero público para fines particulares".

Ambas entidades consideran "gravísimo" que se utilice la Generalitat y "sus recursos" para "amenazar a las entidades que defendemos los derechos de los castellanohablantes con acciones de todo tipo (penales, administrativas 'y otras') y para pagar la defensa de aquellos que decidan incumplir sentencias firmes, siendo esto un grave ataque contra el Estado de Derecho".

Finalmente, Hablamos Español y Convivencia Cívica se muestran confiados de que la denuncia llegue a buen término y recuerdan que "existe jurisprudencia al respecto en relación a pronunciamientos sobre el proceso realizados por el Colegio de Abogados y la Universidad de Barcelona".            (e-notícies, 10/01/22)

22/12/21

Una familia que consiguió el 25% de castellano en un colegio de Lleida: “Acabé cambiando a los niños de centro”... el nuevo colegio proporcionará atención psicológica a los menores que están afectados por la presión social... la familia acabó renunciando a la aplicación de la sentencia, cerrando un negocio y enviando a sus hijos a estudiar a 30 kilómetros tras sufrir la presión vecinal e institucional. Han pasado seis años desde entonces

 "El acoso que denuncia la familia de Canet de Mar (Barcelona) por reclamar más horas lectivas en castellano tiene precedentes. En 2015 se produjo un caso idéntico en Balaguer (Lleida) y, en aquella ocasión, la familia acabó renunciando a la aplicación de la sentencia, cerrando un negocio y enviando a sus hijos a estudiar a 30 kilómetros tras sufrir la presión vecinal e institucional. Han pasado seis años desde entonces, los menores siguen estudiando lejos de su casa y los padres han renunciado a pedir más enseñanza en castellano para ellos.

Ana Belén Moreno fue la madre que llevó la educación de sus hijos ante los tribunales. “En el parvulario vi que todo era en catalán. Me dijeron que tenía que esperarme a primero y ya vería cómo adquirían el nivel. Me habían tomado el pelo. El libro de castellano era ridículo. Siempre digo lo mismo: era como quien va el primer día de clase a estudiar chino. Busqué alternativas pero no había, y por eso acabé recurriendo a la justicia”, recuerda Moreno.

A principios de septiembre de 2015 se conoció la noticia. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ordenaba que el aula de P5 (infantil) y la de segundo de primaria —en las que estudiaban los hijos de Moreno— del colegio Gaspar de Portolà de Balaguer impartieran el 25% de clases en castellano. “Faltaba una semana para que empezaran las clases y ya me llegaban mensajes de que había amiguitos de mis hijos a los que sus familias les habían prohibido jugar con mis niños. Yo tenía un bar con un chiquiparc, el Petit Mon se llamaba. Empezaron a anularme cumpleaños contratados semanas antes”, prosigue Moreno. Rememora aquellos días como una caída hacia el ostracismo: “Era el año 2015, con todo aquel caldo de cultivo independentista, y vi que mis hijos se quedaban solos y sin amigos”.

Se convocaron manifestaciones en la puerta de la escuela. “Nos señalaron. El delegado de educación de la Generalitat en Lleida estuvo presionándome cinco horas en mi negocio, contándome las virtudes de la inmersión lingüística catalana. Llegué a temer por la integridad de mis hijos y decidí renunciar a la aplicación de la sentencia y enviarles a Lleida a estudiar en otro colegio”, recuerda la mujer.

Al final, ella tuvo que cerrar el negocio, al que ya no iba nadie. “Hoy sé que es una utopía estudiar castellano en Cataluña. Puedo estudiar en el Liceo francés pero no en castellano. La familia de Canet se enfrenta a una lucha contra gigantes, a presiones y a pasarlo mal solo por reivindicar el derecho de sus hijos”, concluye."                  (Alfonso L. Congostrina, El País, 11/12/21)

"La familia de Balaguer que pidió clases en castellano cambia de centro. La madre asegura que el nuevo colegio proporcionará atención psicológica a los menores que están afectados por la presión social.

 La familia del Balaguer (Lleida) a la que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) otorgó un 25% de clases en castellano para sus dos hijos ha anunciado esta mañana que cambian de centro escolar.

El pasado jueves, la familia renunció a la aplicación de la sentencia debido “a las presiones" que recibieron de los vecinos del municipio, aseguró entonces la madre. Ayer, los dos niños no empezaron el curso junto con el resto de sus compañeros de la escuela Gaspar de Portolà. Su progenitora se excusó asegurando que no quiere exponerlos a la presión social ni de los medios de comunicación que había en las puertas del centro. Al final se desconvocaron las protestas programadas delante del colegio y no se repitieron las imágenes del pasado 7 de septiembre cuando medio millar de personas se manifestaron defendiendo el modelo de escuela en catalán.

La madre de los menores ha confirmado esta mañana que ha cambiado de centro aunque no ha querido dar pistas de dónde irán los menores. La familia intenta así preservar la identidad de sus hijos. “No quiero que estén en el Gaspar de Portolà, creo que el colegio ha revelado los datos de mi familia y ha vulnerado los derechos de mis hijos”, denuncia.

La madre ha asegurado que el nuevo centro – del que no ha querido decir si será público, concertado o privado- proporcionará soporte psicológico a sus dos hijos, que comenzarán P5 y segundo de primaria, durante el periodo de adaptación. Un soporte que considera indispensable después de la “presión a la que se han visto expuestos estas semanas”.

Se trata de la segunda familia que abandona la escuela después de haber conseguido una sentencia del TSJC que obliga a los centros a ampliar el número de horas lectivas en castellano. El alto tribunal catalán también obligaba a la Escola Pia Santa Anna de Mataró (Maresme) a dar un 25% de clases en castellano pero ayer anunciaron que los dos hermanos de la familia demandante, al igual que la familia de Balaguer, ha cambiado de centro."                 (Alfonso L. Congostrina, El País, 15/09/21)

15/12/21

Gregorio Morán: El surrealismo social alcanza en Cataluña niveles supremos... Una familia en Canet de Mar exige que se cumpla la ley y que a su niño de cinco años se le enseñen también en castellano. Se desata la tromba. Alguien se ha atrevido a exigir lo evidente... Le llueven los denuestos institucionales y hay quien manifiesta su intención de apedrearlos, imagino que porque no puede incinerarlos y enviarlos directamente al exilio... La inmersión lingüística en Cataluña se explicó como una fórmula que compensaba los años de limitaciones y represión que padeció durante la dictadura. El tiempo y el poder fueron implantando otro discurso... Los hijos de quienes alegaban con toda razón poder manejarse en su lengua materna decretaron que ese mismo derecho se les debía negar a los demás. La práctica reciente de informar sobre los usos lingüísticos de los ciudadanos, desde las guarderías a las ocho universidades de Cataluña, se mueve entre la inquisición y la xenofobia independentista... Imagino, sin demasiado esfuerzo, las minuciosas investigaciones sobre ese matrimonio de osados para descubrir sus inclinaciones políticas, sociales, sexuales y hasta bancarias. Nada debe quedar sin rastrear. No dudo del aislamiento social, de la enemiga de otros padres heridos en su honor de patriotas lingüísticos

 "El surrealismo del mundo artístico es hoy una evidencia social. La realidad está preñada de sucesos surrealistas. En Cataluña alcanza niveles supremos. Una familia de Canet de Mar, un pueblo de la provincia de Barcelona, se ha convertido en referente de un happening social y político

 Otra familia, en la capital, ha perecido de la manera más cruel e ignominiosa dentro de la que fuera sucursal bancaria y ahora un local vacío con cuatro muertos y silencios ominosos. ¿Qué tienen los dos sucesos de surrealistas? Lo que reflejan de nuestra sociedad supuestamente alimentada por una información abierta que reciben personas civilizadas.

 La inmersión lingüística en Cataluña se explicó como una fórmula que compensaba los años de limitaciones y represión que padeció durante la dictadura. El tiempo y el poder fueron implantando otro discurso. No se trataba ya de normalizar nada sino de erradicar una lengua para otorgar el único derecho a otra. Los hijos de quienes alegaban con toda razón poder manejarse en su lengua materna decretaron que ese mismo derecho se les debía negar a los demás. 

La práctica reciente de informar sobre los usos lingüísticos de los ciudadanos, desde las guarderías a las ocho universidades de Cataluña, se mueve entre la inquisición y la xenofobia independentista.

 En ese marco, que contado por lo menudo daría para mucho porque nunca se opera con intereses simples sino compuestos y hay que sumar fondos muy diversos, lo evidente es que una familia en Canet de Mar exige que se cumpla la ley y que a su niño de cinco años se le enseñen también en castellano. Ahí se desata la tromba. Alguien se ha atrevido a exigir lo evidente. 

 Le llueven los denuestos institucionales y hay quien manifiesta su intención de apedrearlos, imagino que porque no puede incinerarlos y enviarlos directamente al exilio. La derecha catalanista y la izquierda servil, mayoritarias en los medios, se niegan a cumplir la ley que les demanda para que al menos un 25% se haga en castellano. Y se rompe el cuadro.

 Imagino, sin demasiado esfuerzo, las minuciosas investigaciones sobre ese matrimonio de osados para descubrir sus inclinaciones políticas, sociales, sexuales y hasta bancarias. Nada debe quedar sin rastrear. No dudo del aislamiento social, de la enemiga de otros padres heridos en su honor de patriotas lingüísticos.

 Se puede ser LGTBI y perdonarle la vida con indiferencia, pero tocar el meollo de estos xenófobos empoderados está fuera de toda duda. Todos deben hablar en catalán con sus hijos o al menos hacer como si así fuera, de ahí la importancia de averiguar si los chavales incumplen la norma en el patio o los profesores en su didáctica. En eso consiste el rasgo surrealista. Es el mundo al revés. Descubrimos que los deberes nos competen por igual pero los derechos no.

¡Y luego dirán que hay poca demanda de una enseñanza bilingüe! El matrimonio de Canet de Mar muestra la falacia del argumento. “Son casos aislados”. Recuerdo cuando se aplicaba este término a los disidentes tanto del franquismo como del comunismo. Eran singularidades a las que se escudriñaba desde sus ancestros hasta las pejiguerías de la vida cotidiana. Gracias a eso sobrevivía el sistema, porque tenía el poder de castigar y los fondos para beneficiar los silencios. Había complicidad, pero sobre todo había temor al aislamiento y miedo a las consecuencias.

La izquierda es reaccionaria cuando se pregunta con desparpajo retórico cómo combatir a la extrema derecha y jalea el deterioro de la sociedad democrática de la que se está beneficiando. Antaño todas las carencias del socialismo real, como se llamaba a aquellas dictaduras, las provocaba el imperialismo, última fase del capitalismo ¡ay! Y así medraban y sobrevivían en su aura de mediocridad. Tal que ahora, que cruzan del independentismo a los lobbys …porque el peligro lo representa la extrema derecha. Si el matrimonio de Canet de Mar se inclinara por Vox, por los Testigos de Jehová o fueran unos descerebrados negacionistas, ¿eso cambiaría en algo el peso de la evidencia?

 Cantidad de inclinaciones artísticas, como el surrealismo, se han revertido en querencias sociales. Como vivimos tiempos de mucho pasado e incierto presente han aparecido los anticuarios de la ideología. Usted puede contemplar en el terreno ideológico piezas museables en tenderetes que se sostienen gracias a la ayuda institucional, dinero público. Pero los dueños están hechos a todo, sea mercancía falsa, robada o peritada. Lo único que evitan es lo de quedarse sin clientela; eso amenazaría con la ruina. Cuidar el desván de las antigüedades es tan importante como mantener los emolumentos. El apoyo al discurso oficial catalanista de las cúpulas sindicales de UGT y CCOO es tan simple y humillante como eso.

La muerte por inhalación de humo de un matrimonio y sus dos hijos en un local ocupado del centro de Barcelona podría parecer un rasgo más de un mundo que se ha convertido en habitual. Pero en los detalles se esconde el surrealismo. A una pareja de emigrantes sin oficio ni papeles con dos niños en la edad más tierna los matan en un chamizo de fachada elegante. Un incendio con toda probabilidad provocado después de un enfrentamiento entre dos supuestos tenedores del local que cobraban varios cientos de euros por el alquiler. Lo afirma la policía que habló con ellos.

 Pero repasemos los datos y nos asombrará la cantidad de elementos que están omitidos. Los niños muertos, a los que ninguna institución que no fuera la piedad vecinal daba alimento. El matrimonio que sobrevivía desde hace tiempo y no sabemos cómo, ni siquiera su procedencia. Donde la desgracia se vuelve tenebrosa es cuando aparecen los dos supuestos encargados de cobrar la ocupación. O sea que alquilaban un local que no era suyo y que tampoco era vivienda, y hasta la Policía que investigó la tragedia dialogó con ellos. Vamos, como si se tratara de charlar con el jefe de escalera.

Nuestra mirada se quedó en los niños, una atrocidad a la que las buenas gentes respondieron con velas, muñecos y otros votos más que merecidos. ¿Y lo demás qué? Nada de cómo los muertos se convirtieron en residentes marginales, ni de los dos alquiladores del local ocupado que departieron con la Policía. Si existe una mafia dedicada a cobrar casas vacías quizá lo sepamos cuando se levante el secreto sumarial. Pero quizá no y quedará como otra variante criminal del surrealismo social. Hay tantas …y nosotros tan crédulos. El periodismo en la época de las redes espera a que se filtren los sumarios. Nadie pregunta, mientras contempla el espectáculo."             (Gregorio Morán, Vox Populi, 11/12/21)

Los padres que pidieron clases en castellano en Canet de Mar: “Hay que dejar de tragar y ser valientes para reclamar nuestros derechos”... La familia pide “vencer esta espiral de silencio” y no apoya ninguna “movilización”... “Sentir el odio, la intimidación, las amenazas, el señalamiento en la propia piel es muy duro. Hemos tenido ganas de llorar muchas veces. Os agradecemos los gestos, pero os queremos pedir un poquito más. Lo que nos decís en privado, hacerlo en público también"

 "La familia de Canet de Mar (Barcelona) que solicitó que su hija, una alumna de cinco años de Educación Infantil, recibiese las clases no solo en catalán sino también en castellano y fue objeto de amenazas en redes sociales ha publicado una carta en la que explica su punto de vista: “Hay que dejar de tragar y tragar, y tenemos que ser capaces de ser valientes para decir lo que uno piensa, levantarse para hacerlo y reclamar democráticamente nuestros derechos”.

 La misiva, distribuida por la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), continúa: “Sentir el odio, la intimidación, las amenazas, el señalamiento en la propia piel es muy duro. Hemos tenido ganas de llorar muchas veces. Os agradecemos los gestos, pero os queremos pedir un poquito más. Lo que nos decís en privado, hacerlo en público también. Nadie quiere ser héroe (desde luego nosotros tampoco), ¡queremos ser padres!, pero para que nuestra sociedad sea libre debemos vencer esta espiral de silencio que nosotros mismos creamos”.

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña atendió la petición de los padres para que la menor pudiera recibir parte de su educación en castellano en el colegio de Canet de Mar (Barcelona, 15.000 habitantes) en el que está escolarizada. La familia pedía el 50% de clases en esta lengua, pero el tribunal lo limitó al 25% en las medidas cautelares decretadas a la espera de dictar sentencia, en línea con otra en la que ya se decantó el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en 2020.

“En estos momentos, nuestra familia no apoya ninguna movilización que se convoque relacionada con su caso”, indica la carta abierta, tras las protestas de las familias que defienden el modelo de inmersión lingüística en catalán. La familia carga en el escrito contra las autoridades de Cataluña: “El Govern ha considerado ahora que era el momento de interrumpir la “calma tensa” después del procés, agitar las banderas, convocar manifestaciones de protesta y señalarnos como culpables de querer acabar con el catalán”. 

El escrito continúa en catalán para preguntar al consejero autonómico de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, por qué no recurrió la decisión del Tribunal Superior de Justicia en octubre pero sí se ha sumado a las protestas en Canet: “¿Por qué ha venido a la escuela de Canet a protestar por la aplicación de la interlocutoria y lo hace ahora y no en los casos de otros padres? ¿Quiere calentar el ambiente para las protestas? No podemos darle las gracias por avivar sentimientos de odio entre la población porque nuestra familia está sufriendo”.

Como en anteriores ocasiones en las que alguna familia ha pedido este cambio en la política lingüística de los centros escolares, el debate rápidamente generó una fuerte polémica y pasó del entorno escolar a las redes sociales, partidos políticos, asociaciones, y medios de comunicación, con mensajes muy duros contra la familia. Una cuenta de Twitter llamó a dar “caña” para combatir los efectos de la sentencia. Y el hostigamiento y el acoso acabó por hacerse viral. Todo ello en un momento político de tensión por la cuestión lingüística en Cataluña en la que, esta vez, el debate se centra en una niña de corta edad.

El de Canet no es el primer caso polémico. En 2015, por ejemplo, Ana Moreno logró una sentencia favorable a que su hijo recibiese el 25% de las clases en castellano, pero, según su testimonio, la presión social le obligó a cambiar al menor de colegio. A diferencia de lo ocurrido en anteriores ocasiones, esta vez el Govern entró de lleno. El consejero de Educación acudió el jueves al colegio “para dar apoyo al profesorado y las familias”, dice una portavoz de este departamento, pero no contactó con la familia de la niña.

Si no puede ver la carta, pulse aquí.  "                     (El País, 13/12/21)

14/12/21

Editorial de La Vanguardia: Canet, un motivo para la reflexión... Invitar a acosar a un niño de cinco años es un despropósito descorazonador... desde luego, ver a Santiago Espot comparando a la familia de Canet con los "terroristas de Hamás". "Hay españoles que anteponen su odio contra el catalán antes que proteger a sus hijos de ser señalados. Son como los de Hamás: utilizan a sus hijos como escudos"... es muy, muy descorazonador

 "La escuela Turó del Drac de Canet de Mar, un centro que, como todos los de su naturaleza, debe centrarse siempre en su misión educativa, se halla ahora en el epicentro del conflicto lingüístico catalán. En particular, después de que los padres de un alumno de P5 –un niño de cinco años– reclamaran un 50% de horas de educación en castellano, y de que el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya dictase, como medida cautelar, que se impartiera un 25% del horario escolar en esa lengua (concretamente, las clases de artes visuales, plástica y psicomotricidad).

La respuesta a dicha medida judicial, avalada por el Tribunal Supremo, ha sido diversa. Ayer se manifestaron ante la escuela partidarios de la inmersión lingüística. El conseller de Educació de la Generalitat, Josep Gonzàlez-Cambray, se desplazó el jueves a Canet para expresar su apoyo a la dirección del centro (pero no consideró necesario ponerse en contacto con la familia que había cursado la reclamación). Entretanto, en las redes sociales se colgaron algunas propuestas lamentables. Entre ellas las de un integrante de las listas electorales de Junts el 14-F que animaba a dejar al hijo de los reclamantes solo en clase. O las de otros desnortados partidarios de la inmersión que animaban a apedrear la casa del niño y de sus padres o a practicar con ellos el apartheid . Entretanto, desde la derecha españolista se han anunciado querellas para inhabilitar a Cambray.

Invitar a acosar a un niño de cinco años es un despropósito descorazonador

No puede decirse, por fortuna, que opiniones de las redes como las mencionadas sean mayoritarias. Pero tampoco puede decirse que sean totalmente marginales. Ni que hayan sido rebatidas por las autoridades catalanas con la contundencia que requiere el caso. Eso es algo que se ha echado en falta. Porque es inadmisible que alguien, por irrelevante que sea, anime en público acosar a un niño de cinco años y hacerle la vida imposible. Eso es una auténtica canallada. Además de un grave error político.

Desde la promulgación en 1983 de la ley de Normalització, la inmersión lingüística ha sido en Catalunya un modelo de éxito. Así lo hemos afirmado a menudo en esta página editorial. Es más, la aceptación social de tal medida fue durante años lo suficientemente amplia como para que, en términos relativos, sufriera muy pocos ataques. Luego, el asunto se fue politizando progresivamente, hasta el punto de situar la lengua, que es ante todo vehículo de diálogo y entendimiento, en la primera línea del conflicto asociado al encaje de Catalunya en España. Otro error.

Es cierto que desde el extremo derecho del arco político español, y desde los órganos de prensa afines, se ha azuzado a la minoría que veía un problema donde la mayoría no lo veía. También lo es que el Estatut del 2006 (corregido por el Constitucional en el 2010) adjetivó como “preferente” el uso social de la lengua catalana, modificando la paridad legal con el uso del castellano, y que a partir de ahí las cosas no fueron mejor. No es menos cierto que por este camino, que lleva a las antípodas del consenso, no hallaremos más que nuevos conflictos.

El uso del catalán ha conocido mejores momentos. ¿Es eso atribuible solo a supuestos ataques externos, a fallos judiciales? ¿O tiene también parte de responsabilidad un Govern que, disponiendo de la herramienta de la inmersión lingüística, no ha sabido evitar ese declive, y que además tiene a gala incumplir los fallos judiciales sobre la lengua?

Llevar la brega política al ámbito de la lengua no será nunca una buena idea. Creerse facultado, en este marco, para pedir que se acose a un niño es un despropósito descorazonador. Lo único que se consigue con él es acreditar una pésima calidad humana y dar argumentos al rival."         (Editorial de La Vanguardia, 11/12/21)

"Un indepe compara a la familia de Canet con los "terroristas de Hamás". "Su odio está por delante de proteger a sus propios hijos".

"Conflicte lingüístic escola Canet de Mar demostra que hi ha espanyols que anteposen seu odi contra el català abans que protegir seus fills de ser assenyalats. Són con els de Hamàs: utilitzen seus fills com a escuts"

Traducción google:  "El conflicto lingüístico en la escuela Canet de Mar demuestra que hay españoles que anteponen su odio contra el catalán antes que proteger a sus hijos de ser señalados. Son como los de Hamás: utilizan a sus hijos como escudos"

 12:11 p. m. · 10 dic. 2021

 El presidente de Catalunya Acció, Santiago Espot, ha comparado a la familia de Canet de Mar que ha pedido castellano a la escuela de su hijo con "terroristas de Hamás". Según ha afirmado en Twitter, "su odio está por delante de proteger a sus propios hijos" y "utilizan a sus hijos como escudos humanos".

Santiago Espot ha publicado un vídeo ante una escuela en el barrio del Raval, Barcelona, donde explica que "aquí se habla multitud de lenguas por parte de sus alumnos", sin embargo, "en España hay una que no quiere que se hable, la lengua catalana. De esta manera evitarán que se integren en nuestro país y se conviertan en potenciales independentistas."

"Para ello utilizan sus propios hijos, como es el caso de la escuela de Canet de Mar, que permiten que una criatura de cinco años sea señalada por todos para obligar a hacer el 25% en lengua castellana", ha asegurado ."              (e-notícies, 12/12/21)

"COMUNICADO | ASEC/ASIC (10.12.2021): de apoyo a la familia de Canet de Mar que está padeciendo coacciones por haber exigido enseñanza en castellano.

 La Comisión Gestora de la Asamblea Social de la Izquierda de Cataluña (ASEC/ASIC), en fecha 10 de diciembre de 2021, decidió emitir el siguiente comunicado:

Comunicado ASEC/ASIC (10.12.2021): de apoyo a la familia de Canet de Mar que está padeciendo coacciones por haber exigido enseñanza en castellano. Ante los sucesos que están ocurriendo en la población de Canet de Mar, donde una familia está siendo objeto de señalamiento y acoso en las redes sociales, por haber solicitado que se aplique, en el colegio al que acude su hijo de cinco años de edad, la Sentencia 5201/2020, de 16 de diciembre, del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña -avalada por el Tribunal Supremo-, que establece que “en las enseñanzas comprendidas en el sistema educativo de Cataluña todos los alumnos deben recibir de manera efectiva e inmediata la enseñanza mediante la utilización vehicular normal de las dos lenguas oficiales [catalán y castellano] en los porcentajes que se determinen, que no podrán ser inferiores al 25% en uno y otro caso” de las horas lectivas, la Asamblea Social de la Izquierda de Cataluña (ASEC/ASIC) desea hacer público lo siguiente:

1) Expresar nuestra más firme condena de estos hechos, muestra de un totalitarismo que no debe tener cabida en un Estado social y democrático de derecho.

2) Mostrar a la vez nuestra más absoluta solidaridad hacia la familia que está siendo víctima de este acoso. 

3) Manifestar nuestro más total repudio hacia la actitud del gobierno catalán, que en ningún momento ha sido la de acatar la sentencia y proteger a la familia, sino la de alentar activamente la desobediencia contra aquélla. Una actitud que no solamente constituye un ataque al derecho de los alumnos castellanohablantes a recibir, al menos, el 25% de las horas lectivas en su lengua materna; sino que, también, promueve el desprecio a los Tribunales (precisamente por parte de aquellos que, como institución del Estado, deberían ser los primeros en respetarlos) y pone en un grave aprieto a los directores y resto de personal docente de los centros de enseñanza de Cataluña,  que deberán optar en el futuro entre desobedecer a la Ley o a sus superiores.

ASEC/ASIC desea dejar patente que esta campaña de acoso contra una familia no es un hecho aislado en la sociedad catalana, sino que forma parte de una dinámica más amplia, de carácter totalitario, perpetrada por una ideología, la nacional-secesionista, que apela de continuo a la “democracia”, pero que en realidad desea moldear dicha sociedad a su imagen y semejanza, por la vía de silenciar a nada menos que a la mitad (larga) de la población de Cataluña; la que no está de acuerdo con su ideario. Una dinámica totalitaria en la que se inscriben, entre otras, actuaciones como los cortes sistemáticos de la Avenida Meridiana, tolerados por el poder público autonómico y local, o el reciente ataque con pintadas a la casa del Rector de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) por haber autorizado un acto de la entidad constitucionalista S’ha Acabat!

Por último, señalar que, siempre que se produzcan hechos como los que aquí se condenan, ASEC/ASIC estará ahí para denunciarlos y mostrar públicamente su rechazo."                ( , Asamblea Social de la Izquierda de Catalunya, 10/12/21)

7/12/21

Piden hacer "apartheid" a la familia que ha solicitado clases en español... "Hacedle el vacío, el niño solo en clase el rato de castellano... Ya pueden marcharse por donde hayan venido"... Un mosso pide hacer bullying al niño que solicitó clases en castellano... y hasta un 'consultor gastronómico' pide "apedrear" la casa del niño que pide castellano en la escuela... la verdad, puestas así las cosas, no sé si no sería mejor que emigrara

 "La denuncia en las redes de 'El Turó en català!' -una cuenta de Twitter de familias de la escuela Turó del Drac de Canet de Mar (Barcelona)- a la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que dicta impartir 50% de las horas lectivas de una clase en castellano ha provocado que una usuaria de Twitter pida hacer "apartheid" a la familia que solicitó las clases en lengua castellana.

'El Turó en catalán!' ha explicado que "nuestra escuela ha sido denunciada por una familia de P5A ya raíz de ello el TSJC ha dictado que las horas lectivas en esta clase deben ser el 50% en castellano". "Se ha interpuesto un recurso y de momento, y según las medidas cautelares dictadas de obligado cumplimiento, debe hacerse el 25%", han añadido en su hilo en la red.

"Apartheid a la familia que quiere destruir nuestra escuela y nuestro modelo. No son bienvenidas dado que no aman a Catalunya. Ya pueden marcharse por donde hayan venido", ha contestado una usuaria a la publicación.

Sociedad Civil Catalana ha denunciado en su cuenta de Facebook las respuestas a causa del tono de algunas de ellas. "Esto sólo tiene un nombre: totalitarismo", ha asegurado SCC en su publicación."            (e-notícies, 04/12/21)

 "El mosso independentista, Albert Donaire, que fue a las listas de JxCat en las últimas elecciones al Parlament, ha pedido hacer bullying al niño que su familia solicitó clases en castellano.

Albert Donaire ha publicado en Twitter un mensaje en el que afirmaba que "los padres del resto de familias deberían dejar al niño de esta familia solo en clase. Los niños no vuelven a clase hasta que esto no se arregle. Y eso, en cada sitio donde pase".

 No es el único tuit que el agente de los Mossos ha hecho público respecto al tema. "Este niño debe encontrarse absolutamente solo en clase", ha asegurado. "Reaccionamos o nos matan la lengua", ha añadido en el mismo tuit. (...)"                     (e-notícies, 06/12/21)

"Jaume Fàbrega, escritor y consultor gastronómico con un blog en 'VilaWeb', ha incitado a "apedrear" la casa de la familia que ha pedido clases en castellano en el aula de su hijo. "¡Me apunto a ir a apedrear la casa de este niño!", ha publicado en su Twitter.

 "Que se vayan fuera de Catalunya. No queremos supremacistas castellanos que nos odian", ha añadido en el mensaje de su tuit, en respuesta a una publicación que protestaba porque "imponen el 25% de castellano para que la familia de un niño lo ha pedido". (...)"              (e-notícies, 05/12/21)

16/11/21

Paola Lo Cascio, politóloga y de izquierdas, sufre profusa y sistemáticamente el acoso del independentismo

 "(...) Paola Lo Cascio, historiadora y politóloga y profesora de la UB, refiriéndose a las elecciones del 14 de febrero en Cataluña y en relación con el pacto firmado por las fuerzas independentistas para no pactar con el PSC para gobernar Cataluña, dijo: “…mirado con un poco de distancia, no deja de ser muy sorprendente y atípico en el panorama de las democracias consolidadas europeas que existan cordones sanitarios no con respecto a la ultraderecha --como en muchos sitios se está haciendo, con o sin papeles de por medio-- sino contra una fuerza política de la familia socialdemócrata”. Por cierto, esta historiadora, politóloga y de izquierdas sufre profusa y sistemáticamente el acoso del independentismo.

La confianza inicial del independentismo en conseguir sus fines debido a su propia situación de privilegio --el dominio de los recursos públicos, el silencio durante décadas de gran parte de la población catalana, el dominio de los medios de comunicación, la propia capacidad de organización y de movilización, o el uso de un lenguaje sistemáticamente falacioso y confuso, más pensado para la adscripción emocional que para la reflexión sensata-- se ha vuelto agresividad ante el fracaso. 

No sólo fracaso por no haber conseguido la independencia en el tiempo propuesto, también se trata del fracaso ideológico al irse desmontando, una a una, las falacias en las que se sustentaba el argumentario independentista. Todo se iba a conseguir, mediante la unión del independentismo, en pocos meses; el movimiento era pacífico; la base independentista se iría ampliando; habría un movimiento internacional de reconocimiento, el gobierno español no se atrevería a intervenir, etc.

La realidad es que hemos visto violencia física en las calles y violencia verbal en las redes. También hemos visto que progresivamente, voces no independentistas, han empezado a hablar y el acoso, inicialmente sufrido en silencio, ya se atreve a ser denunciado en público.

Aunque el independentismo siga llamando fascistas a los que no piensan como ellos, la realidad es que la izquierda ha sido especialmente perseguida por el independentismo, como demuestran los ejemplos anteriores. Fascismo es, precisamente, la exacerbación del nacionalismo, sinónimo de intolerancia, pensamiento único, intento de homogeneización de la sociedad y aniquilación del adversario y de las minorías. Pues eso, como dice el refrán popular, “dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”.

 Obviamente, el independentismo tiene derecho a existir, precisamente porque estamos en una democracia. Pero de ningún modo es admisible que, en aras de su libertad, acosen a los que no piensan como ellos. En aras, precisamente a nuestra libertad, estos comportamientos antidemocráticos y fascistoides tienen que ser denunciados. 

Nuestra obligación, como demócratas, es precisamente, defender a aquellos que se ven perseguidos y acosados por sus ideas, siempre y cuando las defiendan con argumentos y con el respeto a los demás. Vivan nuestros conciudadanos valientes que, aún a sabiendas del peligro de ser acosados, se atreven a manifestar sus ideas en público, porque ellos representan la salvaguarda de la pluralidad y de la salud de nuestra democracia, continuamente amenazada, precisamente por acosadores que se organizan para perseguir e insultar a los que no piensan como ellos."          (Mireia Esteva , Crónica Global, 15/04/21)

9/11/21

Iván Teruel, profesor de Secundaria: «En Cataluña se quiere crear un sistema de delación a los profesores que utilicen el castellano»

 "Iván Teruel es profesor de secundaria en un instituto de la provincia de Girona, territorio profundamente independentista. Es autor del libro «¿Somos el fracaso de Catalunya?» en el que relata la deriva identitaria en Cataluña que él ha podido experimentar. Y con Iván Teruel ha hablado El Debate sobre el plan que quiere impulsar la Generalitat en todos los centros educativos para impulsar el catalán.

¿Qué le parece el plan? ¿Qué conclusiones saca de lo que ha podido leer o escuchar sobre él?
—Recibí información de alguien que había estado en la reunión con el consejero y esa acción de control de uso lingüístico de los chavales no se circunscribe sólo a los colegios o institutos, sino que también van a indagar en campamentos y casales de verano y en actividades extraescolares, deportivas, etc. La información que recibí fue bastante inquietante. Y se quiere instalar una especie de sistema de delación para denunciar a los profesores que utilicen el castellano no sólo en clase, sino también a los que se dirigen a los alumnos o a otros compañeros profesores en castellano
 
¿No le parece que esto va más allá de lo que le debe corresponder al ámbito escolar? Estamos hablando de la intimidad de las personas.
—Me cuentan de esta reunión, de gente que asistió, que incluso los directores de los centros le preguntaron al conseller sobre la constitucionalidad de algunas de las medidas que quería tomar, como controlar la lengua de uso en el recreo. Y el conseller les dijo que no se preocuparan, que los iba a defender hasta las últimas consecuencias y que se iba a poner siempre de parte de las direcciones de los centros.
 
¿Y qué papel juegan los profesores? ¿Además de dar clases tienen que dedicarse a controlar la lengua en la que hablan los alumnos?
—No es algo que sea estrictamente nuevo. Mi mujer, que fue a una escuela concertada de Figueras, me dijo que en los años 80-90, a principio de cada curso les pasaban un impreso en el que tenían que contestar qué lengua utilizaban en casa. Vamos, que ese control ya se ha llevado a cabo en anteriores ocasiones. Es un celo un poco obsesivo, no sólo por controlar la lengua de uso en clase, sino en aquellos ámbitos que exceden el radio de acción de la escuela.
 
La Generalitat se ha basado en un informe que se ha realizado a partir de preguntas a estudiantes de cuarto de ESO que demostraría que se usa menos el catalán en clase: entre alumnos, entre profesores, y también en la interacción docente-alumno. ¿Es este la realidad que ve usted en su instituto, en su día a día?
—Son realidades muy diferentes la de los profesores y la de los alumnos, y también hay que distinguir entre la provincia de Girona, que es la que yo conozco, y lo que ocurrirá en centros de Barcelona, donde la realidad es ligeramente diferente. 
Cuando escuché que el conseller había dicho que más de la mitad de los profesores usaban el castellano en sus clases, no sé, me sorprendí. No sé cómo han hecho las encuestas, no sé si han considerado o han incluido en ese porcentaje a aquellos profesores que alguna vez se han dirigido a los alumnos en castellano cuando éstos le han hablado en esta lengua. Porque ya me conozco este tipo de encuestas.
 
La realidad que conozco es que un 90 % o más de los docentes, al menos en los centros en los que ha estado, se expresa exclusivamente en catalán con los alumnos y con los profesores. Por ejemplo, una cosa que vengo observando desde hace años, es que, en el claustro inicial de curso, todos mis compañeros, aunque sean castellanohablantes, se presentan en catalán. He escuchado a pocos compañeros que se dirijan a los alumnos en castellano. En cambio, sí me han contado alumnos que les reconvienen cuando hablan en castellano, por ejemplo, en una clase que no es de lengua española. Según la realidad que conozco, los datos de esa encuesta no concuerdan con lo que yo experimento a diario, pero ni de lejos.
 
Quizás todo forma parte de esta campaña de supuesta «emergencia lingüística» en la que se encuentra el catalán y de la que hablan constantemente algunas entidades como Plataforma per la Llengua, e incluso el propio Gobierno catalán.
—Al final, el aumento es el de siempre. También es el que se usó para implantar la inmersión lingüística, el de la normalización. Es decir, que el uso del catalán se convirtiera en «normal» dentro de la esfera pública, y eso ya se ha conseguido. La lengua vehicular de la educación es el catalán exclusivamente. 
Hay más hablantes del catalán que nunca. Pero el nacionalismo es experto en defender una cosa y su contraria. Por un lado, se quejan de que el catalán no sea lengua oficial, por ejemplo, en el Parlamento Europeo, cuando tienen más hablantes que algunas lenguas nórdicas, y ponen el ejemplo del danés. Pero en cambio, dicen que el catalán está en peligro de extinción. 
Una lengua que tiene esa protección institucional que tiene 8-9 millones de hablantes en ningún caso está en peligro de extinción. Hay estudios que cifran la horquilla de hablantes que aseguran la supervivencia de una lengua en unos 300.000 hablantes. Fíjate si hay margen. Este argumento siempre se ha utilizado para justificar todas las medidas que se adoptan en materia lingüística en Cataluña y que perjudican los derechos de los castellanohablantes. Es una forma de justificar. Dicen que el catalán está en peligro, y el castellano, no. Y la extracción de lo que sería la salud de una lengua, pasa por delante de los derechos lingüísticos de los individuos, de los alumnos, en este caso.
 
Si hay este supuesto retroceso del uso del catalán, ¿a qué se debe? ¿Se ha convertido el catalán en una lengua de imposición y eso la hace menos atractiva?
—Tengo la sensación, por lo que veo en mi entorno, por lo que veo en los chavales y también por lo que me cuenta gente que trabaja en el mundo de la educación porque son monitores, que hasta los más pequeños, niños de 6-7 años, han expresado su hartazgo por la obsesión que perciben por parte de los docentes para que hablen en catalán en todos los lugares y circunstancias. Me dicen que los chavales a veces expresan algo así como «bueno, ya está bien, todo el día catalán». 
Evidentemente en esas edades, y también en la adolescencia, cuando una cosa se intenta imponer por la fuerza es posible que genere rechazo. Y he creído percibir, aunque es algo subjetivo, que esa obsesión por la lengua empieza a generar un cierto hartazgo en el mejor de los casos, y un rechazo frontal en el peor de ellos. "          (Yolanda Canales, El Debate, 08/11/21)

29/6/21

Albert Soler: Señoritas de Arrán, me permito presentar mi candidatura a su concurso de 'Botifler del Año'... No quisiera parecer presuntuoso, pero algún valor deben tener tantos años de reírme del proceso, los lacistas, los presos, los exiliados y de los dos millones que se lo creen...

 "Señoritas de Arrán, y noten (guiño) que las trato como a las mujercitas que afirman ser, sin hacer caso de bigotes, barbas o pelo en el pecho, que pueden ser debidos a desajustes hormonales y no a maligna masculinidad: 

Les escribo esta carta en enterarme que este sábado, en Sant Cugat, celebran la gala donde se elegirá el botifler del Año (traidor del año). 

Seguro que son muchas las peticiones que están recibiendo de gente que se cree merecedora de tal galardón, no en vano, ser botifler es hoy, en Cataluña, el honor más alto al que se puede aspirar. Espero no abusar de su generosidad si me permito presentar mi candidatura. 

No quisiera parecer presuntuoso, pero algún valor deben tener tantos años de reírme del proceso, los lacistas, los presos, los exiliados y de los dos millones que se lo creen.

 Nobleza obliga, debo reconocer que hay otros -grandes periodistas entre ellos- con tantos o más méritos que yo. Pero yo reivindico mis dieciséis, o treinta y dos, ni lo sé, apellidos catalanes. No hagan caso de los que pretenden optar a tal premio y calzan apellidos no catalanes. Estos pueden optar si acaso al título de Ñordo del Año, que no es poco, ya me gustaría a mí. Pero no al de botifler. Por eso hay que tener sangre vieja catalana. Como yo, si me disculpan la insistencia.

 Antes, en Cataluña, ser un botifler era un insulto, por eso les agradezco, señoritas, que hayan ustedes cambiado las cosas. Hoy, un botifler es alguien que piensa por sí mismo, lo contrario de un lacista. 

Uno sólo tiene que hacer un listado de catalanes patriotas: la Rahola, Toni Albà, Cotarelo, Toni Soler o la Paluzie. En el otro lado, los que alguna vez les han llamado botiflers: Serrat, Marsé, la Caballé, Boadella,  Cercas y un largo etcétera. Se debería ir de vino hasta arriba de todo para dudar qué equipo apuntarse. No voy a negar que en algunos momentos he flaqueado. 

Viendo los catalanes oprimidos -entre los cuales, muchas de ustedes y sus familias-, con segunda residencia, sin problemas económicos, piscina privada, viajes y ropa de marca, algún día he tenido ganas de que alguien me oprime. 

Pero uno se hace mayor y termina valorando más el hecho de ser reconocido que las cosas materiales. Imagino el diploma de botifler del Año, colgado en el recibidor de casa, a la vista de las visitas, y no puedo evitar emocionarme. 

 Ya sé que últimamente Junqueras, Jordi Sànchez y otros, están haciendo méritos -sin duda ha llegado a sus oídos la concesión de este premio-, pero estos son recién llegados al botiflerismo, estoy seguro que ustedes tendrán en cuenta el historial de los candidatos.

Un servidor, no es por presumir, no ha dejado de hacer méritos. Aquí donde me ven, me han reconvenido más de una vez por no levantarme cuando tocan Los Segadores -ni siquiera me sé la letra, lo digo por si puntúa- me importan un pimiento los presos y los indultos, me cago en la Republiqueta, leo libros en castellano, me he hecho fotos con legionarios, voy al bar Cuéllar, no miro TV3 y respondo en castellano cuando así se me dirigen. 

Ah, y un día insulté desde el coche a los lacistas que cortaban una carretera (reconozco que llevaba unas cervezas de más, tal vez esto no suma puntos)."              (Albert Soler, Diari de Girona, 18/06/21)