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27/7/22

Plataforma per la Llengua ha comparado que un profesor universitario dé las clases en castellano con el hecho de que asista borracho o sea mal educado... Lo ha hecho en un vídeo publicado en las redes para pedir a los estudiantes que denuncien a los profesores, "¿Verdad que si el profesor es mal educado o da la clase bebida te quejarás? ¡Pues también es necesario que lo hagas si se salta el plan docente e imparte la clase en otra lengua!"

 "Plataforma per la Llengua ha comparado que un profesor universitario dé las clases en castellano con el hecho de que asista borracho o sea mal educado. Lo ha hecho en un vídeo publicado en las redes para pedir a los estudiantes que denuncien a los profesores que se "salten el plan docente".

La autollamada ONG del catalán ha elaborado un vídeo (https://twitter.com/i/status/1509229051734593546)  que muestra a un grupo de estudiantes escandalizados porque ven a su profesor bebiendo alcohol en clase y siendo maleducado. Tras las quejas de los estudiantes que le amenazan con denunciar al rector, el propio maestro comienza a dar la clase en castellano y los estudiantes reflexionan que "los profes que cambian de lengua son unos imbéciles".

"¿Verdad que si el profesor es mal educado o da la clase bebida te quejarás? ¡Pues también es necesario que lo hagas si se salta el plan docente e imparte la clase en otra lengua!", expone la entidad, que ha puesto en marcha una web para que los estudiantes denuncien la vulneración de "derechos lingüísticos en la universidad".             (e-notícies, 31/03/22)

3/5/22

Llaman a los Mossos porque no tienen la carta en catalán... La Generalitat sancionará a dos restaurantes denunciados por Plataforma per la Llengua

 "Plataforma por la Llengua, en un comunicado, explica que "decenas de voluntarios colapsan dos restaurantes de las cadenas Five Guys y Surf House que no tienen la carta en catalán".

La entidad publica el vídeo de la acción, "que logró reunir 55 denuncias de los participantes", con llamada a los Mossos incluida, que tuvieron que intervenir. Los restaurantes serán sancionados.

 La entidad denuncia "la vulneración de los derechos lingüísticos de los catalanohablantes en un restaurante de la cadena Five Guys en la plaza de Catalunya de Barcelona y en un restaurante de la cadena Surf House en la calle de Amigó de la misma ciudad".

"Estas denuncias han propiciado que la Agència Catalana del Consum haya iniciado el proceso de denuncia administrativa contra ambos establecimientos", celebran.

También informan que “los consumidores tuvieron que recurrir a las hojas de reclamación que ellos mismos habían impreso previamente por si el restaurante no se las facilitaba, pero el establecimiento siguió negándose a admitir las denuncias”.

“No fue hasta que los Mossos d'Esquadra se presentaron en el local, a instancias del propio establecimiento, que el restaurante acabó admitiéndolas. La policía levantó acta de los hechos, que son motivo de sanción según el Código de Consumo de Catalunya, que obliga a facilitar y admitir las hojas de reclamación”, indican.

"La Agencia Catalana de Consumo, que, tras el procedimiento de inspección, ya ha iniciado la denuncia administrativa contra ambos establecimientos", añaden."
                     (e-notícies, 05/04/22)

9/11/21

Iván Teruel, profesor de Secundaria: «En Cataluña se quiere crear un sistema de delación a los profesores que utilicen el castellano»

 "Iván Teruel es profesor de secundaria en un instituto de la provincia de Girona, territorio profundamente independentista. Es autor del libro «¿Somos el fracaso de Catalunya?» en el que relata la deriva identitaria en Cataluña que él ha podido experimentar. Y con Iván Teruel ha hablado El Debate sobre el plan que quiere impulsar la Generalitat en todos los centros educativos para impulsar el catalán.

¿Qué le parece el plan? ¿Qué conclusiones saca de lo que ha podido leer o escuchar sobre él?
—Recibí información de alguien que había estado en la reunión con el consejero y esa acción de control de uso lingüístico de los chavales no se circunscribe sólo a los colegios o institutos, sino que también van a indagar en campamentos y casales de verano y en actividades extraescolares, deportivas, etc. La información que recibí fue bastante inquietante. Y se quiere instalar una especie de sistema de delación para denunciar a los profesores que utilicen el castellano no sólo en clase, sino también a los que se dirigen a los alumnos o a otros compañeros profesores en castellano
 
¿No le parece que esto va más allá de lo que le debe corresponder al ámbito escolar? Estamos hablando de la intimidad de las personas.
—Me cuentan de esta reunión, de gente que asistió, que incluso los directores de los centros le preguntaron al conseller sobre la constitucionalidad de algunas de las medidas que quería tomar, como controlar la lengua de uso en el recreo. Y el conseller les dijo que no se preocuparan, que los iba a defender hasta las últimas consecuencias y que se iba a poner siempre de parte de las direcciones de los centros.
 
¿Y qué papel juegan los profesores? ¿Además de dar clases tienen que dedicarse a controlar la lengua en la que hablan los alumnos?
—No es algo que sea estrictamente nuevo. Mi mujer, que fue a una escuela concertada de Figueras, me dijo que en los años 80-90, a principio de cada curso les pasaban un impreso en el que tenían que contestar qué lengua utilizaban en casa. Vamos, que ese control ya se ha llevado a cabo en anteriores ocasiones. Es un celo un poco obsesivo, no sólo por controlar la lengua de uso en clase, sino en aquellos ámbitos que exceden el radio de acción de la escuela.
 
La Generalitat se ha basado en un informe que se ha realizado a partir de preguntas a estudiantes de cuarto de ESO que demostraría que se usa menos el catalán en clase: entre alumnos, entre profesores, y también en la interacción docente-alumno. ¿Es este la realidad que ve usted en su instituto, en su día a día?
—Son realidades muy diferentes la de los profesores y la de los alumnos, y también hay que distinguir entre la provincia de Girona, que es la que yo conozco, y lo que ocurrirá en centros de Barcelona, donde la realidad es ligeramente diferente. 
Cuando escuché que el conseller había dicho que más de la mitad de los profesores usaban el castellano en sus clases, no sé, me sorprendí. No sé cómo han hecho las encuestas, no sé si han considerado o han incluido en ese porcentaje a aquellos profesores que alguna vez se han dirigido a los alumnos en castellano cuando éstos le han hablado en esta lengua. Porque ya me conozco este tipo de encuestas.
 
La realidad que conozco es que un 90 % o más de los docentes, al menos en los centros en los que ha estado, se expresa exclusivamente en catalán con los alumnos y con los profesores. Por ejemplo, una cosa que vengo observando desde hace años, es que, en el claustro inicial de curso, todos mis compañeros, aunque sean castellanohablantes, se presentan en catalán. He escuchado a pocos compañeros que se dirijan a los alumnos en castellano. En cambio, sí me han contado alumnos que les reconvienen cuando hablan en castellano, por ejemplo, en una clase que no es de lengua española. Según la realidad que conozco, los datos de esa encuesta no concuerdan con lo que yo experimento a diario, pero ni de lejos.
 
Quizás todo forma parte de esta campaña de supuesta «emergencia lingüística» en la que se encuentra el catalán y de la que hablan constantemente algunas entidades como Plataforma per la Llengua, e incluso el propio Gobierno catalán.
—Al final, el aumento es el de siempre. También es el que se usó para implantar la inmersión lingüística, el de la normalización. Es decir, que el uso del catalán se convirtiera en «normal» dentro de la esfera pública, y eso ya se ha conseguido. La lengua vehicular de la educación es el catalán exclusivamente. 
Hay más hablantes del catalán que nunca. Pero el nacionalismo es experto en defender una cosa y su contraria. Por un lado, se quejan de que el catalán no sea lengua oficial, por ejemplo, en el Parlamento Europeo, cuando tienen más hablantes que algunas lenguas nórdicas, y ponen el ejemplo del danés. Pero en cambio, dicen que el catalán está en peligro de extinción. 
Una lengua que tiene esa protección institucional que tiene 8-9 millones de hablantes en ningún caso está en peligro de extinción. Hay estudios que cifran la horquilla de hablantes que aseguran la supervivencia de una lengua en unos 300.000 hablantes. Fíjate si hay margen. Este argumento siempre se ha utilizado para justificar todas las medidas que se adoptan en materia lingüística en Cataluña y que perjudican los derechos de los castellanohablantes. Es una forma de justificar. Dicen que el catalán está en peligro, y el castellano, no. Y la extracción de lo que sería la salud de una lengua, pasa por delante de los derechos lingüísticos de los individuos, de los alumnos, en este caso.
 
Si hay este supuesto retroceso del uso del catalán, ¿a qué se debe? ¿Se ha convertido el catalán en una lengua de imposición y eso la hace menos atractiva?
—Tengo la sensación, por lo que veo en mi entorno, por lo que veo en los chavales y también por lo que me cuenta gente que trabaja en el mundo de la educación porque son monitores, que hasta los más pequeños, niños de 6-7 años, han expresado su hartazgo por la obsesión que perciben por parte de los docentes para que hablen en catalán en todos los lugares y circunstancias. Me dicen que los chavales a veces expresan algo así como «bueno, ya está bien, todo el día catalán». 
Evidentemente en esas edades, y también en la adolescencia, cuando una cosa se intenta imponer por la fuerza es posible que genere rechazo. Y he creído percibir, aunque es algo subjetivo, que esa obsesión por la lengua empieza a generar un cierto hartazgo en el mejor de los casos, y un rechazo frontal en el peor de ellos. "          (Yolanda Canales, El Debate, 08/11/21)

22/10/21

Web para denunciar a los profesores que se pasen al castellano... De Plataforma per la Llengua, FNEC y el SEPC

 "Plataforma per la Llengua, la Federació Nacional d’Estudiants de Catalunya (FNEC) y el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC) han creado una web "para facilitar las denuncias por vulneraciones lingüísticas en la universidad y para sensibilizar a los estudiantes de los derechos los catalanohablantes".

La campaña ofrece a los alumnos una web "para que hagan llegar las denuncias a través de un sencillo formulario que los pondrá en contacto con el servicio de quejas de la campaña y con el de su universidad".

"Los estudiantes deberán facilitar el nombre, un correo de contacto, la información de los estudios y el nombre de la facultad y la universidad donde estudian. Además, deberán seleccionar qué tipo de vulneración han sufrido y podrán explicar su caso concreto", explican.

"El servicio redirigirá a los estudiantes a una dirección concreta de su universidad para asegurar que sigan el procedimiento establecido por cada institución. Además, Plataforma per la Llengua se hará cargo del tratamiento de los datos para hacer un seguimiento de la evolución de las vulneraciones y analizar la situación global. Cada cuatrimestre, las organizaciones impulsoras publicarán un informe de los resultados", añaden.

Plataforma per la Llengua, FNEC y SEPC animan a los estudiantes a "presentar una reclamación cuando alguna asignatura no se imparta en la lengua que consta el plan docente, cuando haya una falta de oferta de asignaturas en catalán a los grados y los másters y cuando se vulneren los derechos lingüísticos en cualquier otro aspecto".          
      (e-notícies, 21/10/21)

3/6/19

'Tortilla de patatas'... ¡ també en castellà !





 "Que si truita o «tortilla».

 Mi deseo inconfeso, díganme sádico, es ver un día uno de estos talibanes de la lengua entrar en el bar Cuéllar y perseguir con el móvil a Antonio, el dueño, recriminándole que en la pizarra pone «Croquetas caseras »y no« Croquetas caseras ».

 Corre por las redes el vídeo de un propietario de bar que intenta leer el periódico mientras la chica que lo grava no para de importunarle y amenazarlo porque tiene anunciada «Tortilla de patatas», y hasta aquí puede llegar la paciencia del pueblo catalán. Imagino a Antonio Cuéllar en la misma situación, no leyendo el periódico, porque no le he visto parado ni un momento en su bar, pero sí perseguido por una mal educada que le graba. 

 Y crean que se me pone la piel de gallina. En el local se haría un silencio sepulcral, como el de las películas del far west cuando entra un forastero en el saloon buscando juerga y por la ventana ya vemos el enterrador tomándole medidas a ojo. Los más sensibles saldrían del bar, los creyentes susurrarían una oración, las madres intentarían llevarse los niños -inútilment, a estas edades huelen la diversión- para que no vieran nada de lo que pasaría y la mayoría buscaríamos lugar para sentarse y, caña a la mano, nos dispondríamos a disfrutar del espectáculo.

-Es usted el propietario? La estoy grabando porque tiene los letreros (sic) en castellano, ahora le denunciaré y después ...


 -Como dices? - respondería Antonio, sinceramente incrédulo que haya quien tiene tan poco afecto a la propia integridad.

A partir de ahí, todo dependerá. Si la pilla de buenas, quizás la insensata se sale con sólo cuatro gritos, que seguro contendrían «Porque me sale de los huevos!», frase que puede parecer retórica, excepto si la pronuncia el dueño del bar Cuéllar de Vila -roja. 


 Sí, ay, ese día Antonio no ha dormido bien -alguna vez se ha tenido que levantar de madrugada para atender ladrones que han entrado en el bar, y esto lo pone de especial mal humor, como han comprobado los mismos atracadores antes ser evacuados en ambulància-, para recuperar el móvil tal vez la normalizadora de la lengua requerirá una visita a urgencias, e inventarse una explicación razonable de cómo ha acabado el aparato precisamente allí, da igual que sea una tableta o que fuera una cámara de súper 8.

 Que es una manera como otra de pedir por favor que dejen la gente tranquila, al menos en su casa."                 (Albert soler, Diari de Girona, 04/06/19)


"¿Se acuerda del catalán de 80 años que se gastó 20.000€ para poder rotular su tienda en español?. Sap que la Generalitat fa “inspeccions lingüístiques” per imposar-nos el català? Quizás sí. Pero ahora va a conocer en directo el fanatismo lingüístico de los nacionalistas.  (...)

Dolça i emmordassada Catalunya…"                (Dolça Catalunya, 31/05/19)


"Paranoia con el catalán. Una catalanoparlante se queja de que la "tortilla de patatas" está también en castellano en un club social.

La aparición de un vídeo en el que una mujer le recrimina al propietario de un club social que todos los carteles del establecimiento estén en castellano ha originado polémica en twitter.

"A través de esta grabación, le advierto que todos los rótulos de su local están en castellano. A partir de este momento, tiene la obligación de ponerlos al menos en castellano y en catalán. Pero el catalán no puede faltar" le dice la señora al hombre, que la ignora mientras intenta leer el periódico.

A pesar de que el hombre evita responder a la autora del vídeo, ésta se dirige reiteradamente al propietario advirtiéndole. "¿Tiene algo que alegar?, como me ha dicho antes, ¿que estarían para el año que viene? ¿O no lo dirá en la grabación? ¿Nada que alegar?", reitera.

A continuación, la mujer sale al exterior del local y muestra los carteles que se encuentran en el escaparate, denuncia que están todos en castellano y se indigna ante un cartel donde dice "tortilla de patatas". "Tortilla de patatas, ¡también en castellano!" exclama la señora."           (e-notícies, 31/05/19)

15/1/19

El dueño de la pizzería asediada por los independentistas catalanes: Llaveria estaba "muy alterada" porque le ofrecieron la carta en castellano, aunque Bo di Napoli la tiene en los dos idiomas. "Yo le ofrecí traer la otra carta o que un camarero se la tradujese. Ella no estaba contenta y decía que por ley yo le debía atender en catalán en primer lugar y que iba a llamar a los Mossos"... "Hemos recibido más de 1.000 llamadas en 72 horas. Mis camareros tienen miedo. Me han hundido en las redes sociales con comentarios negativos. Han hecho reservas falsas tanto de mesa como de comida para llevar para bloquear mis turnos de comida. Se han apostado ante la puerta para insultar a los clientes"

"Han llegado a amenazar a mi hijo de 15 años por teléfono". Así de concluyente se muestra Dror Cohen, el dueño de la pizzería asediada por los independentistas catalanes por, supuestamente, no tener la carta en catalán. El directivo lamenta que algunos "secesionistas se estén comportando como nazis, haciéndole la vida imposible".


En conversación con este medio, Cohen ha enumerado una larga lista de actos de boicot e intimidación en apenas 3 días. "Hemos recibido más de 1.000 llamadas en 72 horas. Mis camareros tienen miedo. Me han hundido en las redes sociales con comentarios negativos. Han hecho reservas falsas tanto de mesa como de comida para llevar para bloquear mis turnos de comida. Se han apostado ante la puerta para insultar a los clientes", ha explicado a Crónica Global

Lo que ha colmado el vaso, admite, son las "amenazas a su hijo de 15 años" de quien "no sabe cómo han conseguido el teléfono".

"Me insultó por italiano y judío"


Cohen ha querido dejar claro también qué pasó el viernes en Bo di Napoli para que su establecimiento acabara siendo víctima de un boicot masivo independentista. "No fue por insultar a nadie, ni por citar a Franco o la cárcel para los independentistas. Fue por el catalán", ha explicado. 

Según él, la activista y exmiembro de la cúpula de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) Noemí Llaveria Pereiras entró en su negocio con otra persona. Al decirle Buon Giorno ella contestó: "Buon Giorno no, Bon dia". 

 Tras ello, el personal la guió a la mesa mientras el directivo avisaba a su personal de que no cayeran en la provocación. "Me alejé de la escena, pensando que estaba zanjada, pero no. De repente escuché gritos y me acerqué de nuevo, era la misma señora".

Según él, que ha lanzado hoy un comunicado público --leer aquí--, Llaveria estaba "muy alterada" porque le ofrecieron la carta en castellano, aunque Bo di Napoli la tiene en los dos idiomas. "Yo le ofrecí traer la otra carta o que un camarero se la tradujese. Ella no estaba contenta y decía que por ley yo le debía atender en catalán en primer lugar y que iba a llamar a los Mossos". 

El emprendedor, que ha invertido unos 60 millones en proyectos en Cataluña, pidió "comprensión", pues disponía del menú en catalán, pero no se lo había ofrecido en primer lugar. "Y el local estaba lleno, no era necesario montar un espectáculo". Ante la intransigencia de la señora, que se iba alterando apelando a la "ley y a una denuncia", el comerciante la invitó a abandonar el establecimiento.

 "Me espetó que éramos unos italianos de mierda y unos mafiosos. Al decirle yo que no era italiano sino israelí, pero que los italianos no son todos unos camorristas, ella me lanzó insultos antisemitas antes de hacer fotos de la fachada del local", se queja.

Denunciará


Cohen recuerda que "lleva 20 años en el negocio" y que nunca tuvo ningún problema por la lengua, pues utiliza las dos indistintamente. "El problema es una minoría radical de independentistas. Puedes ser lo que quieras, yo no me meto con la ideología de cada uno, pero no puedes actuar como hicieron los nazis", valora. Ha puesto el caso en manos de su abogado.

 Sostiene que tomará acciones legales, "pues nunca había sido víctima de una campaña de acoso de tal magnitud" que, dice, "la aguanta porque la salud financiera del negocio es buena, pero que hundiría a cualquier otro".


Según Cohen, ha invertido más de un millón de euros en la pizzería, en la que trabajan unas diez personas. Tiene las cartas en castellano, catalán, francés, inglés y más idiomas. Agrega que emplea a camareros transalpinos, pero también catalanes, filipinos o magrebíes.

 Estos trabajadores, abunda "están siendo víctimas de la campaña", igual que "sus familias". Remacha que puede aportar pruebas de todo ello en sede judicial, pues la conversación con la activista de la ANC "está grabada" y servirá para denunciar las "injurias" que le han imputado.


Acaba su entrevista con una petición de ayuda a los "catalanes y españoles que, piensen como piensen, no estén de acuerdo con estas actitudes sectarias". El directivo subraya que "necesita su apoyo", pues una "minoría radical" amenaza con hundir su proyecto empresarial."             (Ignasi Jorro, Crónica Global, 30/12/18)

10/1/19

La Generalitat abre expediente a Playmobil y Lego por no utilizar el catalán

"Las multinacionales de juguetes Playmobil y Lego no desean etiquetar sus productos en España, más concretamente en Cataluña, en catalán pese a las presiones.

La Plataforma por la Lengua ha presentado ahora una denuncia en la Agencia Catalana de Consumo para que tome las medidas necesarias para que pasen por el aro de la normativa lingüística en Cataluña.

La Generalitat, como no podía ser de otra manera, ha admitido a trámite esta denuncia, y ha iniciado un expediente de diligencias previas para investigar el caso, la plataforma separatista da por hecho el que el expediente acabará forzando a Playmobil y Lego a incluir el catalán en los juguetes que venda en Cataluña.

Las medidas de la Agencia Catalana de Consumo también contemplan multas económicas, de acuerdo con la legislación actual, Playmobil y Lego se enfrentan a una multa de entre 10.001 y 100.000 euros, en función de lo establecido en el artículo 332.3 de la Ley del Código de Consumo.  (...)"                        (El Catalán, 07/01/19)

1/2/18

Boicot a los productos de fuera de Cataluña y a las empresas que se fueron

"El mundo independentista anda revolucionado y algunos sectores comienzan a desarrollar acciones específicas contra el 'enemigo exterior', que no es otro que España. Una de las últimas iniciativas es el llamamiento a realizar boicot a productos españoles, instando a los ciudadanos a consumir productos exclusivamente fabricados y elaborados en Cataluña. También arrecia el boicot a las empresas que trasladaron su sede fuera de Cataluña después del verano pasado.

El último mensaje sobre esta cuestión propone no comprar fresas de Lepe, cuya primera campaña de recogida comienza ahora, y esperar unas semanas para poder consumir las que se cultivan en la comarca del Maresme, que se producen algo más tarde. "Hay que hacer una campaña de no comprar el fresón de Huelva, así les devolvemos su 'a por ellos oé, oé' [se refiere a los cánticos que despedían a los policías desplazados a Cataluña con motivo del referéndum]. El fresón no es como otros productos, en cinco días está en la basura. Si 2,5 millones de catalanes no compran ni uno, en una tarde se los van a comer con patatas", dice uno de los mensajes difundidos. (...)

Las campañas de boicot se ponen en marcha en círculos pequeños, aunque en contadas ocasiones se articulan a través de webs de perfil netamente independentista. Normalmente, sin embargo, las consignas son lanzadas en pequeños grupos por militantes concienciados y como iniciativa personal.

En otro de los foros se ha puesto en marcha una 'Guía del consumidor activo catalán'. Según su promotor, "yo ejerzo mi derecho a votar en cada proceso electoral y cada día 'voto' a favor o en contra de algo cuando compro, o no, cualquier producto o servicio".

 La guía "contempla muchos aspectos del empoderamiento ('empowerment') del consumidor y el consumo holístico y 'mindful'. No es un llamamiento a exclusivo, sino a inclusivo. Inclusivo para potenciar nuestro tejido productivo. Es un llamamiento a 'potenciar' el consumo de 'ciertos' productos de 'ciertas' empresas catalanas y 'ciertos' comercios catalanes".

En este foro se dan instrucciones para 'leer' las etiquetas de los productos con el objetivo de conocer dónde han sido fabricados. "¿No es preferible comprar un cava de una pequeña bodega con sede en Cataluña que el de una bodega que haya trasladado su sede fuera de Cataluña? (…) Sugiero que prioricemos aquel producto fabricado y producido en Cataluña (…)

 Sugiero que prioricemos comparar al pequeño productor o proveedor por encima de la gran multinacional (…) Sugiero no premiar a las entidades que han cambiado recientemente su sede social fuera de Cataluña. 

Una forma inmediata y fácil de actuar es cerrar cuentas bancarias tradicionales en las que se pagan comisiones para abrir cuentas en bancos online que no cobran comisiones (hay varios) (…) Sugiero no comprar cierta prensa, la que Unamuno llamaba hace 110 años 'esa cochina prensa madrileña' (…) 

Sugiero evitar visitar, mencionar o remitir a la web de esa cochina prensa madrileña (…) Sugiero que no veas la televisión que comulga con esa cochina prensa madrileña (…) Sugiero que primemos el uso del catalán en los productos o servicios. ¿No es preferible escoger el producto etiquetado en catalán? ¿No es preferible que te atiendan en catalán? (…)

 Sugiero evitar comprar lotería nacional (o participaciones de empresa, es el impuesto que pagan los que no saben casi nada de matemáticas y estadística (…) Escojamos de forma consciente dónde compramos: en qué colmado, en qué supermercado, en qué híper, en qué farmacia, en qué tienda de ropa, en qué ferretería, en qué gasolinera…", dice el impulsor. Y zanja luego: "Esta es una guía de 'resistencia', pacífica, democrática, de impacto real e inmediato".

Disimular, disimular

Aun así, algunos alertan de los peligros de iniciar un boicot contra el mercado español, ya que el mercado catalán está muy interconectado con él y ello supondría consecuencias negativas para todos. Otros, en cambio, sustituyen la llamada al boicot por la llamada a "consumir productos de proximidad", con lo que se puede camuflar el fin último. 

Así, algunos advierten que "se ha de dejar claro que se hace por ecologismo, para ahorrar en transporte y para revertir el beneficio en el entorno más próximo porque, de lo contrario, parecería un boicot".
Por las redes, circulan listas de pastas de dientes, anteponiendo una fabricada en Cataluña a otra muy conocida fabricada en Madrid, por ejemplo.

 Lo mismo cabe decir para lavavajillas, jabones, espumas de afeitar y geles, colutorios, cafés, leches (de las que se recomiendas 3 marcas en detrimento del resto que hay en el mercado o de las marcas blancas), cervezas, vinos (hay una docena de denominaciones de origen en Cataluña) y pizzas. Evidentemente, en las comunicaciones detallan exactamente las marcas que no se han de comprar. (...)

Asimismo, se recomiendan determinadas cadenas de alimentación para que los ciudadanos compren en ellas, en detrimento de otras consideradas "españolistas". Incluso se citan a empresarios que acuden a las manifestaciones independentistas para animar a que se compren sus productos.

Una de las campañas trata de la "lista para no olvidar". En esa lista constan las empresas que trasladaron su sede fuera de Cataluña. Justifican, por ejemplo, el cerrar o dejar en mínimos las cuentas o libretas en entidades bancarias catalanas que se fueron después del verano pasado y dejarlo en BBVA. "La reflexión de mi madre fue que, aunque el BBVA sea español, al menos no había sido traidor", justifican. Paralelamente, reniegan de los seguros con Catalana de Occidente y Adeslas para estudiar ir a otra compañía. "Ya ven, la venganza puede ser un plato caliente o frío", aseguran.

El razonamiento para el daño que hace el boicot no puede ser más contundente: "El auténtico boicot es el de las cosas caras. Esas facturas de luz, gas, Internet, seguros… el cobro de la pensión, la nómina… un solo ciudadano puede pagar entre 500 a 1000 euros al año a una mutua. Lo mismo por el gas o la electricidad. Mil clientes menos pueden suponer un millón menos de facturación. Si lo hacen 50.000, pues 50 millones… Y siempre, siempre, siempre, cuando pregunten el motivo de por qué rescinden el contrato o el servicio, hay que decir 'por el cambio de sede'".

Las 'listas negras'

A estos mensajes, suman un listado de 38 empresas a las que hay que boicotear, entre las que hay bancos, aseguradoras, empresas de alimentación, de electrodomésticos, de ropa, cerveceras, de servicios, restaurantes o automovilísticas.

Para rizar el rizo, en algunos círculos, recomiendan no boicotear productos españoles, de momento, pero sí comenzar por el boicot a los 'botiflers' (traidores). Uno de los mensajes que circulan reza: "Hace tiempo que dejé de comprar Freixenet y ahora tampoco compro ningún producto de Codorníu (…) 

No hago boicot a los productos españoles (de momento), pero sí lo hago a los traidores que han cambiado la sede de las empresas. Traidores no, gracias". Hace referencia al anuncio de las dos grandes compañías de cambiar la sede social de las mismas. En el grupo, se dan recomendaciones sobre productos alternativos y uno destaca que Víctor Grífols (el empresario independentista por excelencia) acaba de comprar el 27 de octubre pasado el cava Juvé & Camps, el tercero de Cataluña, animando a comprarlo.

Tensión empresarial

La nueva oleada de intentos de boicot llega en un momento en el que dos caras conocidas han vuelto a inundar las redes sociales con sus ataques al 'españolismo'. La primera es la cocinera Ada Parellada, que denunció un boicot a su restaurante barcelonés tras haber organizado una cena solidaria en apoyo de los 'presos políticos' a principios de enero. 

En webs como TripAdvisor, Facebook o Google aparecieron comentarios críticos con la iniciativa y llamadas a no acudir al restaurante de Parellada. Según la propia restauradora, el boicot, al final, es un 'boomerang' contra sus impulsores, ya que comenzaron a lloverle reservas.

El otro famoso envuelto en polémica es Toni Albà, el cómico que da vida a Juan Carlos I en los programas de TV3. A primeros de enero, denunció ante los Mossos d’Esquadra una campaña para boicotear el restaurante Cuina de Mar, que regenta en Vilanova i la Geltrú. Recientemente, estuvo en el centro de la polémica por haber llamado "mala puta" a la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas. El próximo martes deberá declarar ante el juzgado al estar imputado por injurias a la jueza Carmen Lamela, la que encarceló a medio Gobierno catalán.

La pasada semana, hubo otro episodio de enfrentamiento que tiene como protagonista a la multinacional Zara, propiedad del gallego Amancio Ortega y nada sospechosa de ser 'españolista'. Pero al independentismo le ha sentado mal que cambiase los letreros de su céntrica tienda en el Portal de l’Àngel. Allí, las indicaciones estaban solamente en catalán e inglés, por lo que hubo quejas de clientes y se le añadió también la rotulación en castellano.

 Ante ello, la Plataforma per la Llengua, uno de los organismos mimados del Govern, denunció ante la Agencia Catalana de Consumo a la marca porque las etiquetas de sus productos "solo están en castellano, al lado de muchas otras lenguas que no son el catalán"

 Hace dos años, la entidad ya había denunciado a El Corte Inglés porque sus catálogos estaban en castellano. Esta plataforma afirma que este mes de enero superó los 15.000 socios y que "se ha consolidado como la entidad de referencia de la sociedad civil en temas de lengua". 

Este curso, la Plataforma repartió 4.000 agendas en catalán a alumnos aragoneses para fomentar el catalán en la franja que divide Aragón de Cataluña y que los independentistas reclaman como suya. Claro que eso lo hace una entidad que no contempla el castellano en su web, que solo se puede leer en catalán, occitano e inglés.  (...)"             (A. Fernández, El Confidencial, 27/01/18)

30/3/17

La delación patriótica: CatalApp una aplicación para denunciar a los que se resisten a hablar catalán en su propia tienda

"Gracias a la súper subvencionada Plataforma per la Llengua, cualquier patriota de piedra picada puede contribuir a generar mal rollo en Cataluña; para ello, le basta con descargarse la aplicación CatalApp, que en teoría es para valorar el uso del catalán en los comercios, pero en la práctica es una ventanilla para denunciar a los que se resisten a hablar catalán en su propia tienda.

Teresa Giménez Barbat ya ha llevado el temita a Europa y está a la espera de un comunicado oficial al respecto, pues la cosa le suena a caza de brujas y fomento de la delación.

La tecnología es lo que tiene. A unos se les ocurren apps para pedir comida a domicilio o bajarse canciones, y otros prefieren desarrollar un arma para soplones patrióticos financiada con el dinero de todos. 

Y encima, ni una palabra de homenaje al pionero de la delación, Santiago Espot, acusica oficial de la Cataluña pre-tecnológica, al que muchos nos imaginábamos deambulando por Barcelona con un boli y un cuaderno, apuntando las tiendas a las que pensaba denunciar por no rotular en catalán o algo igualmente grave.

 ¿Tanto les habría costado bautizar la aplicación como SantiApp o CatEspot? Yo creo que el hombre se lo merece, pues lleva muchos años envenenando el ambiente sin recibir gran cosa a cambio. No sé cómo lleva lo de la multa por repartir pitos en los campos de fútbol, pero no registro una gran solidaridad hacia él y sus cuitas. 

A diferencia del Astut o de su fiel Quico, a Espot no lo acompaña al juzgado ni su padre, y alguna vez que se ha apuntado la posibilidad de un crowdfunding para ayudarle a pagar el contundente multazo, solo se han oído silbidos y se ha visto a gente --no mucha-- mirando hacia otro lado.  (...)

Para el buen Santiago, ni cargos, ni crowdfunding ni paseíllos gloriosos al juzgado. Ni tan siquiera el reconocimiento como el pionero de CatalApp, como el visionario que inició en Cataluña la delación patriótica, como el primer soplón de la nación oprimida y opresora a la vez. Todo ese amor a la patria tan poco correspondido me resulta descorazonador, francamente.

Santiago, en verdad te digo que este país de ingratos no te merece."                    (Ramón de España, Crónica Global, 28/03/17)

17/12/12

La escuela catalana está muy concurrida. A saber, el comisario lingüístico, la profe con mala leche... y ahora, ¡un guardia civil! Pues sí

Enumerando:

El comisario lingüístico catalán:

"Un día cualquiera... el comisario lingüístico llega al colegio a una hora cómoda de la mañana. Viene desayunado, cambia unas impresiones con la dirección del centro y se aposta en el hall del instituto.  (...)

Ha de comprobar en qué lengua se relacionan los alumnos entre sí, los alumnos con los profesores y los profesores con los profesores. (...) han recurrido a la utilización de menores de edad para delatar con su firma a los profesores que dan las clases en castellano."  (Ver aquí)

La maestra fascista catalana: 

«Querida Alícia.

No sé si te acuerdas de mí, yo sí te recuerdo a ti.
Te tuve de alumna ni más ni menos que en clase de catalán, en aquellos momentos estabas en octavo de Básica y recuerdo que eras muy inteligente y una pequeña anécdota que no sé si tú con el "trabajazo" que te has buscado seguramente por lucimiento personal, no creo que por convicción hicieras lo que haces luchando por sacar poder en la tierra que te acogió con los brazos abiertos, (...)

Respeto totalmente que seas del PP, pero yo creía que serías un enlace entre Cataluña y Madrid, que defenderías a los catalanes, como catalana que eres y de Blanes, buena tierra.  Pero no, cuando has tocado de cerca la importancia de lucirte personalmente has arrinconado todo el bien que podrías haber hecho por esta tierra de buena gente que somos los catalanes.  (...)

Con la esperanza de que reacciones y actúes empleando los valores que te intentamos inculcar en la escuela (nacionalistas, se supone) cuado todavía eras una niñita con toda la vida por delante y que creo que has dejado arrinconados, te saludo, cordialmente."   (ver aquí)

En esta situación, y ante la petición de Pilar Rahola, ¿que sentido tendría un guardia civil a la puerte de las escuelas?  ¿Cual sería su función? 

Por ejemplo, ¿corregir las situaciones siguientes?:

"Cabe preguntarse: ¿Por qué hay un porcentaje de castellanoparlantes que cambia su lengua por otra de ámbito más reducido? 

 111.000 castellanoparlantes han adoptado el catalán, que dicen sentir ahora como ‘lengua de identificación’ (datos del Barómetro de la Comunicación y la Cultura de Cataluña de 2010). 

En un clima de libertad, donde ambas lenguas estuvieran prestigiadas por las instituciones, esa sustitución lingüística carecería de toda lógica’.    (ver aquí)


"Aún recuerdo mi indignación adolescente de cuando mis padres me explicaban que, aunque mi nombre era Edurne, habían sido obligados a poner Nieves en el registro porque estaba prohibido poner nombres en euskera (nací en 1960).

Por supuesto, el euskera, mi lengua materna, estaba proscrito de la escuela. Y, por supuesto también, quienes lo hablábamos o trasladábamos su acento al castellano éramos tildados de paletos, entre ellos, por bastantes de los que luego se hicieron muy nacionalistas.

Y hemos pasado de eso, de la prohibición dictatorial del uso de una segunda lengua en la escuela a la prohibición democrática de otra lengua en la escuela, en este caso, el castellano en Cataluña. ¿Qué diferencia hay entre una y otra prohibición?"  (ver aquí)

Para que los niños, hijos de trabajadores castellanohablantes (charnegos), o de inmigrantes sudamericanos, no se vean perjudicados, como lo son actualmente.

"En Cataluña, los alumnos castellanohablantes obtienen peores resultados académicos que los catalanohablantes, y esto es debido a la inmersión lingüística escolar obligatoria exclusivamente en catalán. (Fundació Jaume Bofill)"   (ver aquí)

Para que no vuelvan a producirse casos como éstos:


"El no poder comunicarse en el idioma materno (el castellano) le provocó un trauma psicológico que le impide con tres años y nueves meses, sencillamente, hablar."  (ver aquí)

"En mi calidad de profesor de ambas lenguas, y teniendo en cuenta la cercanía de la festividad de Sant Jordi, he propuesto a los alumnos de secundaria que para los Jocs Florals redacten un poema o un texto en prosa en cualquiera de los dos idiomas.

Mi sorpresa ha sido doble y mi frustración única. La primera sorpresa ha sido comprobar la alegría que la elección de idioma ha producido en algunos alumnos, que no daban crédito a que este año (¡por fin! como dijeron) pudiesen presentar a concurso escritos en castellano. (...) 


 Por último, me comunican las autoridades escolares del centro que los poemas o los textos en prosa solamente pueden presentarse en catalán. Todavía estoy consternado. Y eso que el profesor de catalán y de castellano soy yo, que no quede duda alguna."   (ver aquí)

Para lograr que la inmersión sea voluntaria, como en Canadá (Quebec).

Dice la finlandesa Enkvist:

"El ejemplo más positivo de inmersión es cuando se hace de manera voluntaria como en el modelo canadiense. 

Los factores positivos es que la inmersión es voluntaria, que la lengua del estudiante está adquirida y estable ya antes de empezar la inmersión, la lengua del estudiante es una lengua de prestigio y la lengua de inmersión se da por profesores nativos de la otra lengua con una formación en la materia. 

Aún en estas condiciones óptimas los alumnos no aprenden la nueva lengua de manera completa porque aprenden solamente un lenguaje escolar, que es lo que estudian."       (ver aquí)  

Pues mira por dónde, la ocurrencia de Pilar Rahola...  no es tan descabellada. Un guardia civil tendría su función para acabar con la discriminación por lengua de los charnegos. ¡Quién se lo iba a decir a la Guardia Civil!  Como en el franquismo, pero al revés. Defendiendo la lengua de los hijos de la mayoría de los trabajadores. Cousas veredes...

25/10/12

Un activista independentista presenta 5.000 denuncias en cinco años contra comercios por utilizar el español

"En febrero de 2010, el presidente de Catalunya Acció y ex candidato de Solidaritat a la Alcaldía de Barcelona, Santiago Espot, confesó durante una tertulia televisiva que su organización había presentado durante el año anterior cerca de 3.000 denuncias anónimas contra comercios que no rotulaban su establecimiento, al menos, en catalán.

Este domingo, El Mundo ha publicado una entrevista con Roger Seuba López, un bibliotecario de 32 años nacido en Aviá pero residente en Castellbell y Vilar (municipios barceloneses) que asegura haber colaborado con Catalunya Acció realizando alrededor de 5.000 denuncias en los últimos cinco años contra empresas de toda Cataluña por el único motivo de haber elegido el español como lengua vehicular de sus negocios.

Una red de medio centenar de informadores

La nueva estrella de la delación lingüística en Cataluña ha recorrido toda Cataluña libreta en mano anotando los datos de los establecimientos cuyos rótulos no estuvieran escritos en catalán. Desde la Costa Brava a la Costa Dorada, pasando Barcelona y por multitud de municipios del área metropolitana y del interior, Seuba dice haber efectuado caminatas de hasta diez horas diarias como si de un inspector de consumo se tratase.

Este gran inquisidor reconoce que cuenta con una red de medio centenar de colaboradores que, además de informarle de los empresarios que osan utilizar el castellano en sus tiendas, firman algunas de las denuncias que él mismo rellena.

Hijo menor de un antiguo militar del Ejército franquista, Joan, y de una maestra de escuela de pasado falangista, María Rosa, Seuba explica que todo empezó en la época en que se instaló en Barcelona para estudiar:
“Rápidamente detecté el empeoramiento de la situación lingüística: cartas de restaurantes escritas sólo en inglés y en español, funcionarios sin ningún conocimiento del catalán, etiquetaje de productos en castellano, cuerpos de seguridad que exigían al ciudadano expresarse en español, ausencia de películas en catalán en los cines… Decepcionado ante el panorama, me propuse ayudar a poner remedio a esto, así que me planté en la sede de Plataforma per la Llengua y allí aprendí el proceso de las denuncias, las sugerencias y las quejas a Consumo”.
Dos de las poblaciones en las que más empeño ha puesto para llevar a cabo “la normalización del catalán” han sido las turísticas Lloret de Mar y Salou. “Aquello era terrible. Carteles en cualquier idioma menos en catalán. Era una situación a corregir”, indica. (...)

Su últimas denuncias son de hace un año. La crisis le ha obligado a reducir el ritmo de sus inspecciones. Ahora se apoya más en las nuevas tecnologías y comprueba los rótulos de los comercios que le indican sus colaboradores a través de Google Earth para evitar “hacer un desplazamiento en balde”. “Nadie me ha patrocinado ni ayudado económicamente. Sólo las fotocopias de mis denuncias, que las hice en Plataforma per la Llengua, entidad que las tramitaba”, asegura.

Esta gente de la Generalidad no inspecciona bien”

Seuba presume de haber conseguido forzar a la multinacional Unilever para “normalizar” unas 4.000 cartas de los helados de la marca Frigo. “Es de lo que más orgulloso estoy. ¿Cómo lo hicimos? Atacando el mismo objetivo desde Cataluña, Islas Baleares y Andorra”, asegura. Por el contrario, no ha podido “del todo” con Cepsa. “En sus gasolineras han incorporado el catalán, pero en pequeño, no sea que alguien vaya a molestarse. Claro, qué van a hacer, son patrocinadores de La Roja“, concluye.

El delator asegura que la mayoría de tiendas denunciadas cambian rápidamente los carteles tras ser denunciados. Solo los que denomina “anticatalanistas” y las multinacionales son más reacios a ceder a su chantaje.

Durante la entrevista, Seuba saca su teléfono móvil y se dirige al periodista de El Mundo, en el que recibe avisos de “posibles infractores”: “Fíjate en esta foto de un bar que he denunciado. El rótulo está bien, en catalán, pero las pizarras de la acera mantienen menús en castellano. Esta gente de la Generalidad no inspecciona bien”. Seuba calcula que “harían falta” unas 15.000 denuncias más. “Nos quedamos cortos”, insiste. (...)

Entre 2004 y 2011, la Agencia Catalana de Consumo -dirigida por Alfons Conesa, ex directivo de Òmnium Cultural- ha impuesto algo más de un millar de multas a empresas que decidieron elegir el español para relacionarse con sus clientes, y ha recaudado más de un millón de euros por este motivo.

 2011, el primer año con Artur Mas al frente de la Generalidad, ha sido el que más sanciones por este motivo ha registrado.

Esta semana, el Tribunal Constitucional ha declarado nulo un precepto sancionador del Estatuto del Consumidor de Cataluña de 1993, lo que abre la puerta a recurrir las multas lingüísticas impuestas hasta el año 2010, en que se aprobó el nuevo Código de Consumo."           (lavozdebarcelona.com, 21/10/2012)

25/1/11

Entra en vigor el Código de Consumo que obliga a relacionarse en catalán... y el deber de denunciar

"Ya se puede multar a las grandes empresas que no utilicen el catalán en sus comunicaciones.

Las empresas que distribuyan productos en Cataluña tendrán que anunciarlos en catalán. Las que no lo hagan ya pueden ser sancionados por la Generalidad con multas de hasta un millón de euros. El Código de Consumo autonómico ha entrado en vigor para las grandes empresas.

El nuevo Código de Consumo autonómico establece multas de hasta 100.000 euros para los comerciantes (que pueden llegar al millón de euros para los reincidentes) que no utilice el catalán en sus comunicaciones -orales o escritas, artículo 128.1- con los clientes.

La normativa establece (en su artículo 311.5), por primera vez, el sistema de regulación y denuncia ciudadana, así como el deber de las personas a denunciar:

‘Las personas consumidoras tienen el derecho y el deber de cooperar, de forma individual o mediante las organizaciones que las representen, con las administraciones públicas encargadas de velar por el cumplimiento de la legislación vigente en materia de protección de las personas consumidoras. [...] El medio principal de cooperación es la denuncia’. (...)

En ese sentido, el Alto Tribunal ha dejado claro que esta obligación a utilizar una u otra lengua, en función del cliente -el ciudadano-, solo es aplicable a las empresas públicas por lo que el Código de Consumo no cabe en la Constitución.

Por estos motivos, el Defensor del Pueblo tiene recurrida la norma ante el Tribunal Constitucional, a instancias de Ciudadanos, Impulso Ciudadano y PP" (lavozdebarcelona.com, 24/01/2011)

25/10/10

¿Con qué derecho se multa a Ikea por no poner rótulos en castellano? ¿O a una industria francesa por etiquetar sólo en inglés?

"La Agencia Catalana de Consumo (ACC), ente que depende de la Generalitat, impuso el año pasado 94 sanciones a comercios por no etiquetar en castellano, de un total de 205 actas abiertas. En el mismo periodo, la Administración abrió expediente sancionador a 152 empresas por vulnerar la política lingüística catalana, con un montante de 148.100 euros, según los últimos datos oficiales, según informa El País.

"La regulación, en el caso del etiquetaje, es favorable al castellano. Hay cerca de 120 leyes estatales que obligan a etiquetar en español", aclara Jordi Anguera, director general de la ACC. Las normas son claras; salvo excepciones, se obliga a marcar los productos en español, como en la Ley General de Consumidores y Usuarios, actualizada 2007: "Las indicaciones obligatorias del etiquetado (...) deberán figurar, al menos, en castellano, lengua española oficial del Estado".

La Generalitat no especifica qué cantidad recibió por las 94 multas que puso el año pasado, ya que estas infracciones se clasifican como deficiencias de información, al contrario de lo que pasa con la protección del catalán, que tiene capítulo propio. Ambas sanciones son tipificadas como leves, por lo que nunca pasan de los 3.000 euros. "Las multas idiomáticas no son homologables. En el catalán miramos todos los aspectos a proteger; en el castellano, solo tenemos problemas con el etiquetaje", especifica Anguera. En el resto de aspectos relacionados con el consumo, asegura, no han debido sancionar porque "siempre está disponible en castellano".

Estas sanciones no son publicitadas, aunque el año pasado se hizo una excepción: Ikea no tenía etiquetados sus productos en castellano -tampoco en catalán- y se la multó. También es habitual encontrarse con problemas en alimentos de otros países, solo etiquetados en la lengua de origen. El auge de estos productos, asevera Anguera, provoca que en lo que llevamos de 2010 la cifra de multas ya sea similar a la del año anterior." (e-noticìes, 23/10/2010)

13/10/10

Si se debate en castellano... se insulta a la 'gente castellanoparlante'

"Rivera también ha cargado contra Montilla por proponer que uno de los debates electorales con su principal rival, Artur Mas, sea en castellano, calificándole de “cínico” y considerándolo “una broma de mal gusto” y una burla hacia los comerciantes que han recibido sanciones lingüísticas.

Para el diputado autonómico, la política lingüística de Montilla es “grotesca”, por exigir el nivel C de catalán a los profesores universitarios pero reclamar un debate en castellano “porque se siente más cómodo”.

CiU: “Un ataque a la convivencia lingüística y social”

En este sentido, el secretario general adjunto de Convergència, Felip Puig, ha rechazado la posibilidad de realizar uno de los debates en castellano señalando que, con su propuesta “Montilla, puede que sin darse cuenta, lo que hace es insultar la inteligencia de los electores catalanes y de la gente castellanoparlante“.

Según el dirigente nacionalista, la proposición de Montilla supone “un ataque a la convivencia lingüística y social” de Cataluña fraguada durante más de 25 años, hasta el punto de buscar la “fractura social del país”, en la línea de “las provocaciones” del líder de Ciudadanos, Albert Rivera." (lavozdebarcelona.com, 12/10/2010)

Comentario: ¡Pero si es que sus electores hablan castellano! Ya los ha insultado bastante con la prohibición de los toros... así que tendra que enviarles algún guiño, tipo 'yo también sigo siendo como vosotros'... cosa que entenderá, seguramente, la inteligencia de los catalanohablantes.

"Montilla insiste en el castellano para el cara a cara con Mas. CiU le pide "sentido común" y recuerda que usa el catalán en el Parlament.

Y la polémica viene esta vez acompañada del idioma, porque el PSC quiere que uno de los dos careos entre José Montilla y Artur Mas se haga en castellano, para así despertar y movilizar al electorado del cinturón rojo de Barcelona. Los convergentes, de momento, se niegan." (Público, 14/10/2010)

"Artur Mas, presidente de CiU, este lunes en Àgora de TV3, sobre la polémica de la lengua a utilizar en los debates electorales con el presidente autonómico, José Montilla:

“¿El señor Montilla y yo, en el Parlamento [autonómico] de Cataluña, en qué idioma hablamos? ¿Y el señor Montilla, cuando contesta al señor Rivera, que le pregunta en castellano, en qué idioma le contesta? Si el señor Montilla le contesta al señor Rivera en catalán, cuando este le pregunta en castellano, no sé porqué pretende hacer un debate en castellano conmigo”. (lavozdebarcelona.com, 21/10/2010)

29/6/10

Denuncian a un médico por negarse a atender en valenciano

"Por otra parte, el Síndic de Greuges de la Comunidad Valenciana, José Cholbi, se ha hecho eco de la denuncia de un ciudadano que asegura que un médico del centro de salud de San Blai de Torrent (Valencia) le exigió que hablara en castellano durante una consulta.

Según se relata en la queja, el médico abandonó la consulta ante la insistencia del paciente en usar el valenciano, exclamando que estaba “harto de gilipolleces”, y no le atendió ningún facultativo, ni la coordinadora del centro, que al parecer no estaba en el edificio. Algo que ha negado la Dirección General de Calidad y Atención al Paciente de la Consejería de Sanidad.

El Síndic recuerda que la Consejería tiene el deber legal de garantizar que, en los servicios públicos que dependen de ella, las personas que tratan con el público tienen el suficiente conocimiento de valenciano como para atender con normalidad su responsabilidad y garantizar el derecho del paciente a poder expresarse en cualquiera de las lenguas oficiales de la Comunidad. Algo que considera que “no fue respetado” en este caso." (lavozdebarcelona.com, 28/06/2010)

24/6/10

Quieren 'normalizar' al Conde de Godó... ¿Porque sólo habla catalán 'en privado'?

"Plataforma per la Llengua ha denunciado que 8TV, el canal de televisión privado del Grupo Godó que emite para toda Cataluña, ofrece el 63,5% de su programación en castellano frente al 36,5% en catalán, y ha instado a la Generalidad a tomar medidas para corregirlo y ‘normalizarlo’.

En un informe ’sobre los usos lingüísticos en los canales privados de TDT de ámbito catalán’ presentado este lunes, Plataforma per la Llengua lamenta ‘la presencia preeminente’ del castellano y ‘alerta’ de que ‘la escasa presencia del catalán’ en esta cadena ’supone una oportunidad perdida para normalizar la lengua catalana en el ámbito de los medios audiovisuales de carácter privado’.

Apelación a la potestad sancionadora del CAC

La organización indica que la Ley de Política Lingüística de 1998 establece que la televisión de concesión otorgada por la Generalidad -como es el caso- tiene que emitir un 50% de los programas de producción propia y de los otros teleservicios en catalán’, y recuerda que ‘el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) tiene potestad sancionadora sobre las infracciones de estas obligaciones’.

Así, constata ‘una falta de voluntad del Grupo Godó -propietario de La Vanguardia- para consolidar una televisión privada catalana y en catalán’ y concluye que ‘hace falta un esfuerzo conjunto entre el Gobierno de la Generalidad, el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC) y el sector audiovisual para garantizar que los telespectadores catalanes puedan disponer de una oferta significativa de medios audiovisuales en lengua catalana’.

El ‘ejemplo’ de Barça TV

El estudio también examina el canal RAC 105 TV, igualmente del Grupo Godó. En este caso advierte de que la ley ‘establece que las cadenas dedicadas a la programación musical tienen que garantizar un mínimo del 25% de canciones interpretadas en lengua catalana u occitana’, que no están cumpliendo, puesto que el catalán es ‘testimonial’ en los vídeos musicales emitidos por esta cadena.

Sin embargo, la entidad sostiene que Barça TV -el tercer caso analizado- ‘es un ejemplo en el uso del catalán en la programación’, puesto que el 100% de sus emisiones se realizan en lengua catalana.

Múltiples campañas de presión

La actividad de Plataforma per la Llengua, asociación generosamente subvencionada y premiada por la Generalidad, es continua y abarca todos los ámbitos imaginables: campañas para exigir la obligatoriedad del catalán en las universidades; campañas para que los ayuntamientos no concedan licencias a los comerciantes que no rotulen en catalán; campañas para incentivar las denuncias lingüísticas; campañas contra las aerolíneas que no utilizan el catalán en sus informaciones; promoviendo un boicot contra Telecinco por apoyar el Manifiesto por la lengua común; acuerdos para que las asociaciones subvencionadas de inmigrantes latinoamericanos adopten el catalán como lengua prioritaria; boicots contra los cines que emiten en castellano; campañas contra el etiquetado en castellano; campañas para blindar la inmersión lingüística escolar obligatoria exclusivamente en catalán; o, incluso, coacciones a empresas privadas para que introduzcan el catalán en sus páginas web." (lavozdebarcelona.com, 23/06/2010)

18/6/10

Denuncias lingüísticas contra las empresas que ‘muestren colaboracionismo’ con la 'roja'

"Catalunya Acció ha advertido ’seriamente a todos los patricinadores y proveedores oficiales de La Roja y a las empresas radicadas en territorio catalán que muestren colaboracionismo, afinidad o simpatía con España‘ que serán sometidas a una ‘estricta vigilancia’ y denunciadas si incumplen la Ley de Política Lingüística.

Así lo ha anunciado la organización presidida por Santiago Espot, que recientemente alardeó de haber presentado, durante el año 2009, 3.000 denuncias anónimas contra comercios que no rotulaban su establecimiento, al menos, en catalán.

Las amenazas de Espot han ido acompañadas de la revelación de que Catalunya Acció denunció ante la Agencia Catalana del Consumo de la Generalidad, en febrero pasado, a la empresa Adidas, patrocinadora oficial de la selección española de fútbol, por ‘vulneración flagrante’ de la Ley de Política Lingüística.

Según recoge Directe.cat, la organización nacionalista enmarca estas acciones dentro de su campaña ‘en pro de las selecciones deportivas catalanas y de la plena normalización’ del catalán, y asegura que, ‘con todos los medios legales y democráticos’ que otorga el Estatuto, vigilarán a las empresas patricinadoras de la selección, reservándose ‘el derecho y el deber patriótico’ de interponer las correspondientes denuncias." (lavozdebarcelona.com, 18/06/2010)

25/3/10

Para que se entere el ministro... de como son las multas lingüísticas... y la obligación de la delación...

"Hace un par de días el ministro de Educación manifestó su convencimiento de que “en España no se le persiga a nadie por rotular de una u otra manera”, refiriéndose a las multas lingüísticas que impone la Generalidad de Cataluña. El diputado autonómico Domingo firma una carta informando al ministro. (...)

Domingo, diputado autonómico del Grupo mixto, continúa la misiva citando la legislación vigente: ‘Desde hace doce años, la Disposición adicional quinta de la Ley 1/1998, de 7 de enero, de política lingüística, prevé la aplicación del régimen sancionador establecido en la Ley 1/1990, de 8 de enero, sobre la disciplina del mercado y defensa de los consumidores, a todas aquellas empresas y entidades que incumplan los artículos referidos a la obligatoriedad de que toda la señalización y los carteles de información general de carácter fijo y los documentos de oferta de servicios para las personas usuarias y consumidores de los establecimientos abiertos al público estén redactados, al menos, en catalán’.

Así, concluye: ‘La aprobación de dicha disposición legal ha supuesto, desde entonces, que todas las rotulaciones redactadas sólo en castellano pasen a ser consideradas ilegales, mientras que las redactadas exclusivamente en catalán son consideradas conformes a la ley’.

El diputado autonómico ha recordado a Gabilondo que fue en época de los gobiernos de CiU cuando se empezó a aplicar la normativa sancionadora mediante una primera fase de subvención a las ‘empresas que cambiaban su rotulación del castellano al catalán, quedando excluidos los empresarios que optaban por una rotulación bilingüe, en principio, perfectamente legal’. Tras la llegada del primer tripartito se ha optado ‘por la vía coercitiva’ mediante las sanciones, se afirma en la carta.

Domingo, finalmente, advierte al ministro de Educación de que ‘la futura ley del código de consumo de Cataluña, actualmente en proceso de tramitación, y que será aprobada en breve, prevé un endurecimiento de estas sanciones, el reconocimiento de unos supuestos derechos lingüísticos de los consumidores, y la obligatoriedad de la denuncia en base a la vulneración de estos derechos’." (lavozdebarcelona.com, 24/03/2010)

23/3/10

El ministro de Educación cuestiona las multas lingüísticas... pues vaya con la esperanza...

"El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, ha cuestionado las multas lingüísticas en una entrevista en el diario El Mundo. "Espero que en España no se le persiga a nadie por rotular en una u otra manera. Aspiro a vivir en un país donde el bilingüismo se entienda como la posibilidad de rotular en cualquiera de las lenguas oficiales y cooficiales".

"Pero- añade-, si hay disposiciones legales, deben cumplirse". (e-noticìes, 22/03/2010)

Nota: O sea, que una norma injusta, que lesiona derechos fundamentales de una minoría (mayoría en algunos casos), debe acatarse, y listo. Apelar a la resistencia civil en defensa del derecho a no ser discriminado (o perseguido) por lengua, sería ¿imperdonable? ¿Una lata?... pues vaya, con el ministro...