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8/3/24

Barcelona impone un examen de catalán para poder ser taxista en la ciudad... un 70% de ellos son extranjeros... y pasa lo que pasa: "Los conductores pakistanís desinflan las exigencias de catalán en el taxi"

 "El nivel B2 de catalán no será necesario para llevar un taxi. Eso es lo que sostiene Paktaxi, la asociación que representa a la comunidad pakistaní del amarillo y negro. "No hay nada escrito, no hay ningún pacto", asegura un portavoz a Crónica Global.

Paktaxi esgrime que ayer por la tarde, tras reunirse con el PSC en el Parlament, la formación socialista se desmarcó de la medida. Esta versión contradice el posicionamiento avanzado hace dos semanas por Élite Taxi. Su líder, Tito Álvarez, comunicó entonces un principio de acuerdo entre PSC, ERC, Junts y CUP para exigir el B2 al volante.

 En conversación con este medio, Álvarez reconoce que la acreditación del B2 no se encuentra hoy por hoy en la ley. Pero apostilla que el texto se halla en fase de enmiendas y asegura que el examen lingüístico formará parte "sí o sí" del redactado final.

Además, circunscribe la propuesta a los nuevos conductores. Aunque Élite preferiría ir más allá y aplicar la medida de forma retroactiva, el acuerdo político solo cubriría a los nuevos titulares de licencias.

Recelos también en STAC

Actualmente, la ley autonómica del taxi exige la adquisición de dos certificados lingüísticos: uno de A2 y otro de B1. "Lo más frecuente es que la mayoría de conductores se saquen el B1 de castellano y el A2 de catalán", explica Antoni Servós, portavoz de STAC, otra entidad que expresa sus reservas sobre la obligatoriedad del B2.

Servós se muestra preocupado por la calendarización de la iniciativa y reclama que sea escalonada para no poner en jaque el servicio. STAC teme que muchos conductores no pasen el listón lingüístico, máxime en un sector donde aumentan los trabajadores extracomunitarios.

Élite defiende su iniciativa

El mismo recelo cunde en Paktaxi: "Tenemos miedo de se nos exija desde el primer día"."No estamos en contra de ningún idioma, pero nos parece que el nivel actual es suficiente", añade la organización que da voz a los profesionales pakistanís. Tras estas siglas se agrupan cerca de 4.000 personas entre conductores y propietarios de licencias.

Por su parte, Tito Álvarez defiende la medida para mejorar el servicio: "Para nosotros el taxi se está deteriorando a la velocidad de la luz y es algo que nos trasmiten los usuarios todos los días". "No tenemos miedo a tomar medidas de calado siempre que sean para reforzar la profesionalidad del servicio", resume. Solo se sabrá quién se lleva el gato al agua si finalmente se aprueban los presupuestos."               (Aleix Mercader, Crónica Global, 07/03/24)

 

 "Tener conocimientos de catalán también será un requisito obligatorio para poder trabajar de taxista en Barcelona

Los aspirantes a tener el carnet que da derecho a ejercer este oficio en la ciudad tendrán que superar una prueba tipo test en la cual se evaluará su conocimiento no sólo del castellano, sino también de la lengua autonómica. Esta evaluación, por tanto, se añade a otras como los conocimientos sobre la localidad y su área metropolitana y la normativa y tarifas del taxi.

Para superar la prueba lingüística, los candidatos tendrán que responder de forma correcta más de la mitad de las preguntas que se les formulen: como mínimo seis sobre un total de diez en cada uno de los dos exámenes (el de catalán y el de castellano). Según publica El Periódico, un 70% de los aspirantes a las plazas son extranjeros.

Examen aparte, la página web del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) -ente supramunicipal presidido por el alcalde Jaume Collboni y gobernado por el PSC, con el apoyo de ERC, Junts per Catalunya y En Comú Podem- detalla el nivel mínimo de sus "requisitos lingüísticos" para poder conducir un taxi en la ciudad.

"Requisitos lingüísticos"

En el caso concreto de los extranjeros, el AMB exige que "los aspirantes de países latinoamericanos en los que se hable español deberán acreditar que disponen el nivel A2 (MECR) o superior de catalán".

Para los "aspirantes del resto de países en los que no se hable ningún idioma oficial de Cataluña deberán acreditar que disponen de los siguientes títulos: nivel A2 (MECR) de uno de los idiomas oficiales de Cataluña y nivel B1 (MERC) del otro idioma oficial de Cataluña".

"Es decir, deberán acreditar ambos idiomas, uno de ellos con nivel B1 y el otro con nivel A2, como mínimo", enfatiza en AMB.

Las próximas pruebas para obtener el carnet de taxista se celebrarán la semana que viene, del 19 al 23 de febrero. La próxima convocatoria será dentro de un mes: el plazo para inscribirse será del 18 al 20 de marzo y los exámenes, del 22 al 26 de abril.

Élite Taxi pide a la Generalitat que exija un nivel más alto: el B2

Élite Taxi lleva meses exigiendo a la Generalitat una nueva "política lingüística" a imponer en la profesión. Después de plantearlo durante las negociaciones por la ley que regule el sector en Cataluña, el sindicato pidió este mes de febrero al Govern secesionista que exija a los taxistas que acrediten que saben catalán en un nivel intermedio para poder ejercer.

Concretamente, su propuesta de la semana pasada contempla la obligación de demostrar que el chófer cuenta con un título B2 -más alto todavía que el que plantea el AMB- porque "gran parte" de ellos "ni tan solo son capaces de entender el catalán", según informó Crónica Global.

La entidad liderada por Tito Álvarez lamenta que el Govern de ERC no haya incluido al sector en sus planes de fomento del uso del catalán. Élite Taxi difundió el pasado sábado un comunicado pidiendo que el denominado "Pacto Nacional por la Lengua" que preparan los partidos con representación en el Parlament incluyan este requisito.

En este sentido, Élite Taxi establece un paralelismo al hablar de los profesores y los sanitarios, que deberán contar con los certificados C2 y C1 respectivamente para trabajar en las escuelas públicas y consolidar sus posiciones en el Instituto Catalán de la Salud (ICS).

"Mientras tanto, el taxi, considerado de interés público, cuenta con una gran parte del sector que ni tan solo es capaz de entender el catalán, como tampoco de hablarlo", decía el comunicado.

Exigencias más altas

El nivel de certificación de lengua catalana que se requiere para obtener la credencial de taxista es el B1, un "nivel básico" según la entidad de Tito Álvarez, y que no garantiza lo que llama "derecho lingüístico" de los clientes a ser atendidos en el idioma de Pompeu Fabra. Es por ello que Élite Taxi pide subir el nivel al B2 y solicita al Govern que los Presupuestos incluyan formación en catalán para taxistas."                  (Crónica Global, 17/02/24)

22/1/24

Despiden a músico sevillano por no acreditar un nivel C1 de catalán tras 27 años en la banda municipal de Barcelona... El músico explica que entiende "perfectamente el catalán" y recuerda en 2006 consiguió el nivel A2 tras realizar, voluntariamente, una formación. Sin embargo, el consistorio, dirigido entonces por Colau, le exigía un dominio superior de la lengua que no ha sido capaz de acreditar... Óscar Guardingo: es cinismo argumentar que un empleado público en Cataluña tiene que entender catalán (A1 que se saca en un par de meses), pero exigir un C1 (varios años) para dificultar que otros españoles accedan al empleo público de tu comunidad autónoma... El mérito del pujolismo y de Junts es haber construido un país donde una mayoría social prefiere un sistema sanitario con déficit de enfermeras antes que rebajar el nivel exigido de catalán a un B1

Óscar Guardingo @oguardingo

Deberían exigir el C1 de catalán a los intensitos que justifican que se despida a un musico por no tener el C1. Hacen unos errores ortográficos y gramaticales horrorosos, por no hablar del desprecio a la lengua catalana que supone pensar que un C1 te lo sacas con la chorra.

El mérito del pujolismo y de Junts es haber construido un país donde una mayoría social prefiere un sistema sanitario con déficit de enfermeras antes que rebajar el nivel exigido de catalán a un B1.

 Argumentar que un empleado público en Cataluña tiene que entender catalán (A1 que se saca en un par de meses), pero exigir un C1 (varios años) para dificultar que otros españoles accedan al empleo público de tu comunidad autónoma. El cinismo.

12:32 p. m. · 20 ene. 2024 23,6 mil Reproducciones


"Este viernes será el último día del sevillano José Joaquín Sánchez como clarinetista de la Banda Municipal de Barcelona después de 27 años. 

El músico de 53 años será despedido por el Ayuntamiento de Barcelona. La razón: no saber catalán.

Según informa el diario 'El Mundo', el clarinetista debía acreditar, al menos, un nivel C1 de catalán y, tras no lograrlo, se verá forzado a abandonar la Banda de la que ha formado parte durante más de la mitad de su vida. Se trata de una exigencia lingüística que ya denunció una enfermera gaditana en un vídeo compartido en sus redes sociales y por el que fue expedientada.

"Para muchas profesiones es desproporcionado y absurdo, pero en el caso de la música... El lenguaje musical es universal", asegura al diario citado anteriormente José Joaquín Sánchez. Además, considera que "esta utilización de la lengua es un esperpento, una aberración".

Asimismo, el músico censura que "se está empleando el catalán como un arma política de discriminación". Tras pasar casi 30 años como interino, José Joaquín Sánchez fue empujado por el Ayuntamiento de la Ciudad Condal a participar en un concurso de méritos para regularizar su plaza, en el que en 2020 la Generalitat incluyó la exigencia de "estar en posesión de los conocimientos del nivel de catalán" de, al menos, un C1.

Finalmente, forzado por la ley estatal 20/21 de estabilización del sector público, el clarinetista se presentó en 2022 y tras haber fallado en la prueba del catalán "obligatoria y eliminatoria", será despedido.

El músico explica que entiende "perfectamente el catalán" y recuerda en 2006 consiguió el nivel A2 tras realizar, voluntariamente, una formación. Sin embargo, el consistorio, dirigido entonces por Colau, le exigía un dominio superior de la lengua que no ha sido capaz de acreditar.

En Cataluña estamos viviendo una dictadura lingüística

"En Cataluña estamos viviendo una dictadura lingüística", denuncia el músico. "En lugar buscar un fomento amable del catalán, lo están usando como una herramienta de marginación", lamenta.

Además, Sánchez lo compara con "un virus que se está extendiendo a todas las capas de la sociedad: la educación, la sanidad la cultura... Estamos llegando a un grave problema dentro de un país que tiene una lengua común, que es el español", dice., lamenta el músico.
Vía judicial

La esperanza del músico está puesta en la vía judicial. José está a la espera de sentencia después de haber impugnado las bases del concurso de mérito al considerar los requerimientos lingüísticos "excluyentes y desproporcionados".

"Alegamos que se trata de un despido nulo por venir motivado exclusivamente por motivos de lengua. Se le echa del trabajo por no acreditar un requisito lingüístico que la práctica diaria ha demostrado que no era necesario para realizar sus funciones. Es una discriminación clara. Es evidente que para tocar el clarinete en la Banda Municipal no se requiere un nivel C1 de catalán", comenta Ángel Escolano, abogado del clarinetista." (Onda Cero, 19/01/24)

19/1/24

Dos experimentos evidencian discriminación laboral severa contra solicitantes de empleo “castellanos” en Cataluña durante el procés... esta discriminación fue elevada en el conjunto de Cataluña y pudo llegar a ser extraordinariamente elevada en el caso de las empresas ubicadas en las regiones de mayor apoyo a la independencia (Javier G. Polavieja, estudio presentado en la V Conferencia Anual de Sociología Experimental)

 "(...) Las dinámicas de construcción de barreras étnicas son dinámicas universales, cuyos patrones y consecuencias son bien conocidos por los estudiosos del conflicto étnico. Una vez desatadas, estas dinámicas dan lugar a procesos de polarización identitaria a menudo difíciles de embridar (sobre todo si se azuzan en sociedades con altos niveles de desafección política y baja confianza en las instituciones, como es el caso de nuestra peculiar “Dinamarca del Sur”). A pesar de los esfuerzos iniciales de las elites soberanistas por presentar el procés como un movimiento amable e inclusivo (“la revolució dels somriures”), las dinámicas endogrupo-exogrupo generan fracturas sociales que pueden llegar a ser profundas -y, en algunos casos, definitivas. Por fracturas debemos entender, no sólo conflictos en el plano simbólico-discursivo, sino, sobre todo, procesos objetivos (y, por tanto, mensurables) de exclusión o cierre social. La discriminación en el ámbito económico, especialmente en los mercados laborales, es uno de los principales mecanismos que conocemos de cierre social, pues dificulta el acceso de los miembros del exogrupo a recursos materiales escasos, como es el empleo, fuente principal de ingresos en las sociedades contemporáneas.

La existencia de discriminación en los mercados de trabajo resulta, sin embargo, particularmente difícil de contrastar empíricamente. El problema es que la mera evidencia de brechas (diferencias) observables en cualquier dimensión objetivable del logro laboral entre diferentes grupos sociales no constituye en sí misma evidencia de procesos de discriminación –pues dichas brechas podrían deberse a una distribución desigual de recursos, preferencias y/o capacidades no observables para el investigador. Por eso, para demostrar la existencia de barreas étnicas objetivas, no basta con encontrar brechas (en empleo, salarios, trayectorias laborales, etc), sino que es necesario identificar la existencia de procesos discriminatorios contra el exogrupo y esto último es metodológicamente mucho más costoso. Tal vez por esta razón –y también porque plantear la posibilidad de que exista discriminación contra poblaciones autóctonas ha sido poco menos que anatema en nuestro país–, apenas existe investigación empírica sobre esta cuestión en las ciencias sociales españolas. 

Hoy podemos empezar a rellenar esta laguna gracias a los datos aportados por dos experimentos de campo: el experimento GEMM y el experimento CAT-H, cuyos hallazgos principales he tenido ocasión de presentar en la V Conferencia Anual de Sociología Experimental, conferencia internacional celebrada recientemente en Madrid. Siguiendo las recomendaciones de nuestra principal entidad financiadora, el Consejo Europeo de Investigación, comparto a continuación dichos hallazgos con el fin de contribuir a su difusión pública.

El proyecto GEMM: una ventana única para el estudio de la discriminación laboral contra solicitantes de empleo “castellanos” en Cataluña

Entre 2016 y 2018, un equipo de investigadores de las universidades de Ámsterdam, Utrecht, Oxford, Oslo, Carlos III de Madrid y el Centro de Ciencias Sociales de Berlín (WZB), completamos el trabajo de campo del mayor estudio sobre discriminación laboral realizado en Europa, el proyecto GEMM (Growth, Equal Opportinities, Migrations and Markets). El estudio GEMM es un experimento de campo (test de correspondencia online) armonizado, diseñado para detectar discriminación en el acceso al empleo en cinco países europeos (Alemania, España, Noruega, Países Bajos y Reino Unido). En este tipo de experimentos, los investigadores enviamos currículos ficticios a vacantes laborales reales, aleatorizando aquellos “tratamientos” de interés para nosotros (en este caso, el ancestro étnico de nuestros solicitantes), mientras mantenemos idénticas el resto de características curriculares. Esto nos permite averiguar si nuestros tratamientos influyen (o no) sobre la probabilidad de que las empresas se interesen por nuestros solicitantes, así como estimar cuánto influyen –dentro de unos márgenes de error estadístico que también podemos calcular.  Los experimentos de campo son la herramienta más avanzada para el estudio de procesos de discriminación laboral. Aunque GEMM no fue diseñado expresamente para identificar discriminación entre grupos étnicos autóctonos, la coincidencia temporal entre el procés catalán y el trabajo de campo del experimento en España nos ofrece una ventana de observación única para estudiar si hubo discriminación laboral contra solicitantes de empleo “castellanos” en Cataluña entre 2016 y 2018.

¿Cómo medimos la discriminación contra los “castellanos” en Cataluña?
En su diseño original, el experimento GEMM sólo incluía un “tratamiento” para la población autóctona en cada país. En el experimento español, este tratamiento corresponde a jóvenes solicitantes de empleo nativos (descendientes de padres españoles) con nombres y apellidos “castellanos”. Como explico con más detalle en este anexo técnico, para identificar la discriminación en el empleo contra este grupo “castellano-descendiente” en Cataluña, utilizamos como grupo de referencia a solicitantes de empleo curricularmente idénticos en todas las características relevantes (incluida la nacionalidad española), pero cuyos padres nacieron en cinco países de Europa occidental (Alemania, Italia, Grecia, Países Bajos y Reino Unido). Al utilizar a este grupo de ascendencia europea como grupo de referencia (que llamamos altergrupo), capturamos exclusivamente la parte de la discriminación laboral que se debe al rechazo étnico (o discriminación negativa) contra el grupo castellano-descendiente, pero no capturamos la parte de la discriminación que se pudiera deber a la llamada homofilia étnica, que es la tendencia de los empleadores a preferir candidatos de su mismo grupo étnico (discriminación positiva). Precisamente para estudiar este segundo componente potencial de la discriminación, realizamos el experimento auxiliar CAT-H (que explico más abajo). 
¿Hubo discriminación negativa contra los “castellanos” en Cataluña?

Utilizando una submuestra de datos provenientes de unas tres mil empresas testadas a lo largo del territorio español, hemos calculado la probabilidad de respuesta positiva (muestra inequívoca de interés en el candidato) por parte de los empleadores para solicitantes españoles  de ancestro europeo o altergrupo (en adelante, “euro-descendientes”), solicitantes españoles de padres españoles y apellidos “castellanos” (en adelante, “castellano-descendientes”) y solicitantes españoles descendientes de padres del Magreb, África Subsahariana y Oriente Medio (en adelante, “África-Magreb-OM”) para ofertas de empleo en la Comunidad de Madrid, Cataluña, País Vasco-Navarra y otras comunidades catalanoparlantes (Valencia y Baleares). En el experimento GEMM, todos los solicitantes ficticios tienen experiencia laboral en Madrid, ciudad en la que residen en el momento de cursar su solicitud de empleo online. Sin embargo, cuando la oferta de empleo corresponde a una comunidad con lengua propia, señalizamos en los currículos que el candidato/a es originario/a de dicha comunidad y que conoce su lengua propia (en el caso del catalán, señalizamos dominio de la lengua, en el caso del vasco, sólo conocimiento). Incluimos en el análisis a los descendientes de África-Magreb-OM porque sabemos, por trabajos previos, que este colectivo sufre las tasas más altas de discriminación en España (y en Europa) y esto nos permite utilizarlos como categoría “baliza”, para calibrar mejor la intensidad de la posible discriminación contra los castellano-descendientes en Cataluña. Las probabilidades de respuesta positiva las hemos calculado utilizando un sencillo modelo de regresión que incluye controles por el tipo de vacante ofertada, por lo que deben entenderse como promedio de las seis ocupaciones analizadas en GEMM (véase anexo técnico). Pues bien, ¿qué encontramos?

(...) presentamos los resultados para la Comunidad de Madrid y Cataluña. Estas dos regiones son muy similares en niveles de PIB y estructura económica y concentran el mayor número de ofertas vacantes en el experimento GEMM español (un quinto y un cuarto del total respectivamente). El contraste en las respuestas de los empleadores en ambas regiones resulta revelador: En Madrid, los solicitantes euro-descendientes y los castellano-descendientes presentan probabilidades de respuesta positiva muy parecidas, de en torno al 27 y 29 por ciento respectivamente, una diferencia mínima que no resulta estadísticamente significativa. Es obvio que ninguno de estos dos grupos está discriminado negativamente en Madrid. Sin embargo, en Cataluña la situación es distinta, pues, si bien la tasa de respuesta positiva para los euro-descendientes es estadísticamente indistinguible de la que observamos en Madrid, la tasa de respuesta para los castellano-descendientes baja casi diez puntos porcentuales, hasta el 20 por ciento. Esta sí es una tasa significativamente menor en términos estadísticos que la que observamos para los euro-descendientes en Cataluña. En los estudios de discriminación laboral utilizamos el llamado Ratio de Rellamada (CBR, en sus siglas en inglés) como medida estándar de discriminación. Si usamos a los euro-descendientes como grupo de referencia (altergrupo) y dividimos su tasa media de respuesta positiva por la de los castellano-descendientes, obtenemos un CBR de 1.43 en Cataluña. Esto significa que, para obtener una respuesta positiva por parte de los empleadores catalanes, un solicitante castellano-descendiente, que buscara empleo desde Madrid entre 2016 y 2018, habría tenido que enviar un cuarenta por ciento más de solicitudes que un solicitante idéntico (que también buscara empleo desde Madrid) pero descendiente de padres europeos.

 Esta tasa de discriminación (que no incluye el posible efecto de la homofilia étnica en Cataluña) estaría prácticamente en la media de las estimaciones de discriminación observadas para los Afroamericanos en EE.UU. cuando se los compara con candidatos anglo-descendientes curricularmente idénticos (CBR=1.45). En Cataluña, los niveles de discriminación contra los castellano-descendientes no llegan a ser tan severos como los que observamos contra los descendientes de África-Magreb-OM, quienes tendrían que mandar el doble de solicitudes que los euro-descendientes para obtener una respuesta positiva. Nótese, sin embargo, que los niveles de discriminación contra los “castellanos” en Cataluña son muy similares a los que observamos contra los descendientes de África-Magreb-OM en Madrid (CBR= 1.43 vs CBR=1.46, diferencia que no llega a ser estadísticamente significativa). En conclusión, estos hallazgos sugieren que, entre 2016 y 2018, en Cataluña hubo discriminación significativa contra los solicitantes de empleo con apellidos castellanos y residencia postal en Madrid, a pesar de que en sus solicitudes se indicara procedencia catalana y dominio del catalán

Es importante destacar que este tipo de discriminación parece darse exclusivamente en Cataluña, pues, al igual que ocurre en la Comunidad de Madrid, tanto en el País Vasco-Navarra como en Valencia-Baleares, los castellano-descendientes obtienen tasas de respuesta positiva estadísticamente indiferenciables de la de los euro-descendientes (excluimos Galicia de este análisis por carecer de suficiente número de ofertas vacantes en esta comunidad). Más allá de Cataluña no encontramos, por tanto, evidencia significativa de discriminación negativa contra los castellanos-descendientes (... ). 

¿Hubo (además) homofilia étnica en Cataluña?El experimento CAT-H

Como ya se ha explicado más arriba, el diseño original del proyecto GEMM no incluía solicitantes nativos que no tuviesen nombres y apellidos castellanos. Por eso, para estudiar la homofilia étnica en Cataluña, desde el Laboratorio de la Desigualdad y la Discriminación (D-Lab), realizamos un segundo experimento, que llamamos CAT-H (Catalan Homophily), como experimento auxiliar del estudio GEMM. Entre marzo y mayo de 2018, enviamos casi trescientos nuevos solicitantes ficticios a vacantes reales ofertadas en Cataluña, siguiendo el mismo diseño de GEMM. Estos nuevos candidatos eran idénticos a los candidatos ficticios de GEMM en todas sus características curriculares, incluidas la experiencia laboral y la residencia postal madrileñas, pero esta vez utilizamos nombres y apellidos reconociblemente catalanes. Nos interesaba saber cuál sería la respuesta media a estos candidatos en Cataluña y, más específicamente, contrastar las posibles diferencias en las respuestas entre las empresas ubicadas en las provincias mayoritariamente pro-independentistas del norte (Girona y Lleida) y aquellas ubicadas en las provincias mayoritariamente no independentistas del sur (Barcelona y Tarragona) (nota: los datos para el sur reflejan fundamentalmente el comportamiento de las empresas de Barcelona, donde se concentran el noventa por ciento de todas las ofertas de empleo de la región sur y el ochenta por ciento del total de ofertas en Cataluña). Utilizando de nuevo una regresión con controles por tipo de vacante ofertada (ocupación), podemos calcular las probabilidades media de respuesta positiva a solicitantes catalano-descendientes en estas dos zonas geográficas. ¿Qué encontramos?

Como podemos observar en la Figura 3, las probabilidades medias de respuesta positiva para los castellano-descendientes no difieren significativamente entre el norte y el sur de Cataluña, por lo que cabría concluir que el rechazo al exogrupo castellano es probablemente similar a lo largo del territorio catalán (datos GEMM, 2016-2018). Sin embargo, la tasa de respuesta positiva para los catalano-descendientes que encontramos en el experimento CAT-H sí difieren notablemente entre ambas zonas: en Barcelona-Tarragona, los solicitantes catalano-descendientes tienen una probabilidad media de respuesta positiva de en torno al 29 por ciento, mientras que en Girona-Lleida esta probabilidad se dispara por encima del 40 por ciento, lo cuál sugiere una fuerte homofilia étnica en el norte del país.

 Suponiendo que la probabilidad media de respuesta positiva a los castellano-descendientes observada en el experimento original GEMM  (realizado desde noviembre de 2016 a finales de febrero de 2018)  se hubiese mantenido inalterada en Cataluña en los meses de marzo a mayo de 2018 (suposición que no nos parece excesivamente temeraria), podríamos concluir que, en Girona-Lleida, los solicitantes de empleo con nombres castellanos y residencia en Madrid tendrían que mandar el doble de solicitudes de empleo que solicitantes con idénticos currículos (incluida la dirección postal madrileña) y nombres catalanes, a pesar de que ambos reportan idénticos niveles de competencia lingüística; mientras que en Barcelona-Tarragona “sólo” tendrían que enviar un 40 por ciento más. La discriminación medida en todo su rango (rechazo al exogrupo + homofilia étnica) podría haber alcanzado así niveles extremos en Girona-Lleida, siendo el segundo componente de la discriminación (la homofilia) lo que marca la diferencia con las provincias del sur (nota: conviene tener en cuenta, no obstante, que los márgenes de error son amplios en las provincias del norte, pues contamos con poco más de cien empresas que ofertaran vacantes en el periodo estudiado y esto reduce la precisión de nuestros estimadores). 

 A modo de conclusión

Los hallazgos presentados en este artículo permiten concluir, con una alta probabilidad estadística, que en la Cataluña del procés hubo discriminación laboral significativa contra solicitantes de empleo con nombres y apellidos castellanos (y residencia postal en Madrid), a pesar de que en sus currículos se indicaba procedencia catalana y dominio del catalán. Nuestras estimaciones sugieren que esta discriminación fue elevada en el conjunto de Cataluña y pudo llegar a ser extraordinariamente elevada en el caso de las empresas ubicadas en las regiones de mayor apoyo a la independencia. Que sepamos, estos son los primeros estimadores de discriminación laboral para poblaciones autóctonas españolas reportados desde las ciencias sociales. Aunque los experimentos de campo no nos permiten demostrar un vínculo directo entre barreras simbólicas (discursos públicos) y barreras objetivas (pues no podemos observar los procesos mentales que guían las decisiones de contratación de los empleadores), nuestros estimadores evidencian la existencia de cierre social con efectos claros –y preocupantes– sobre la igualdad de oportunidades

Esta evidencia plantea, en mi opinión, cuatro preguntas ineludibles: Primera, ¿cuáles hubieran sido nuestros estimadores de discriminación si el estudio se hubiera realizado antes del procés o si se realizara hoy? Es decir, ¿hasta qué punto son coyunturales los niveles de discriminación encontrados? Segunda, ¿pudo haber también discriminación contra solicitantes catalano-descendientes en el resto de España? Es decir, ¿podríamos haber encontrado efectos simétricos resultantes de la polarización étnica fuera de Cataluña durante el procés? ¿Y antes? ¿Y hoy? Tercera, ¿hasta qué punto nuestros hallazgos dependen de la residencia postal y la experiencia laboral madrileñas? ¿Hubiéramos encontrado niveles de discriminación similares para solicitantes castellano-descendientes nacidos en Cataluña y con residencia postal y experiencia laboral catalanas? ¿Y antes del próces? ¿Y hoy? Y, cuarta, ¿por qué no ha habido investigación empírica sobre discriminación contra minorías autóctonas en regiones con fuerte identidad nacional en España? Es decir, ¿por qué no podemos, a día de hoy, responder a ninguna de las tres preguntas anteriores? ¿Hay algún investigador serio que considere, honestamente, que estas preguntas no son relevantes?

La investigación sobre discriminación contra minorías autóctonas en regiones con fuerte identidad nacional constituye material políticamente inflamable en nuestro país. Esto ha hecho que se convierta poco menos que en un tema tabú para las ciencias sociales. Sin ponernos demasiado solemnes, convendría recordar que las ciencias sociales, que se nutren fundamentalmente de fondos públicos, tienen como deber fundamental el ayudarnos a comprender mejor el funcionamiento de nuestras sociedades. Para ello, es imprescindible poder explicar cuáles son –y cómo funcionan– los mecanismos implicados en la producción y reproducción de las desigualdades sociales, de todas las desigualdades sociales, moleste a quien moleste. Necesitamos urgentemente más investigación –y menos escurrir el bulto. "               (Javier G. Polavieja, Agenda Pública, 13/09/23)

18/9/23

Esto sí que es "represión"... Francia juzga a cuatro alcaldes por permitir el catalán en los plenos municipales... no es por comparar, pero hay diferencias

 "Francia juzgará el próximo martes a los alcaldes de los ayuntamientos de Elna, Els Banys, Portvendres y Tarerac, de la Catalunya Nord, por haber cambiado el reglamento municipal para permitir debatir en catalán en los plenos municipales. De este modo, la "represión" del Estado español denunciada por el independentismo se extiende también al Estado francés.

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, junto con el diputado en el Parlament y secretario de Organización, Pau Morales, asistirán el próximo martes al Tribunal Administrativo de Montpellier para darles apoyo, informa ERC.

El alcalde de Elna, Nicolas Garcia, que es el secretario general del Partido Comunista Francés en el Rosellón, se mostró favorable de la independencia de Catalunya en una entrevista en 2012. Afirmó que la independencia "se vería como algo positivo" en el sur de Francia y que es un proceso lógico a raíz de la evolución histórica de los hechos.

Igualmente defendió que Francia reconozca oficialmente las lenguas minoritarias, entre ellas el catalán, lo contrario de lo que defienden la mayoría de partidos franceses, también de izquierdas."  
            (e-notícies, 17/04/23)

8/5/23

Las multas lingüísticas a bares y empresas se mantienen cinco años después de que el TC las tumbara... pero ahora las empresas podrán canjear esas sanciones por clases de catalán

 "¿Puede acabar una queja o denuncia contra un camarero que atiende en castellano en multa? Con la actual normativa

 Con la actual normativa catalana sí. Cinco años después de que el Tribunal Constitucional (TC) rechazara las multas lingüísticas en el ámbito del comercio, el Govern las mantiene. El año pasado, la Agencia Catalana del Consumo, dependiente de la Consejería de Empresa de la Generalitat, impuso 68 sanciones, que comportaron el pago de 112.606 euros, frente a las 16 correspondientes a 2021, que se saldaron con 17.350.

 La pandemia supuso un punto de inflexión debido a la paralización de la actividad económica, pero este tipo de multas siguieron vigentes. Y se nutren en muchas ocasiones de denuncias de Plataforma per la Llengua, una entidad hipersubvencionada que incita a la delación de trabajadores que solo se expresan en castellano.

 Recientemente, el Govern anunció, en el marco de sus cien medidas para frenar el retroceso de la lengua catalana, que las empresas podrán canjear esas sanciones por clases de catalán.

 ¿Cómo es posible que la Generalitat se salte la sentencia del Alto Tribunal? Éste fue muy explícito en su sentencia de 2018: recogiendo la jurisprudencia existente, señaló que, en el ámbito de las relaciones entre particulares --y a diferencia de lo que ocurre en las relaciones entre los poderes públicos y los ciudadanos--, no puede imponerse el uso de una de las lenguas oficiales.

"Ni el reconocimiento de un derecho ni el establecimiento de un deber de disponibilidad lingüística de las entidades privadas, empresas o establecimientos abiertos al público, puede significar la imposición a éstas, a su titular o a su personal, la obligación de uso de cualquiera de las dos lenguas oficiales", advirtió el alto tribunal. Y añadía: no cabe imponer cualquiera de las dos lenguas oficiales de modo general, inmediato y directo y, menos aún, "establecer régimen sancionador alguno frente a un eventual incumplimiento de unas obligaciones individuales que nunca podrán ser tales".

 Era la segunda vez que el TC se pronunciaba sobre el Código de Consumo de Cataluña. Y aunque la sentencia detallaba cómo debía ser interpretada la norma, no anulaba los preceptos recurridos por el PP, entre ellos, el apartado 1 del artículo 128-1 --que prevé el derecho de los consumidores a ser atendidos oralmente y por escrito en la lengua que escojan--.

Evolución

Las sanciones por vulneración de derechos lingüísticos están vigentes y así lo demuestran las memorias anuales de la Agencia Catalana de Consumo. La ley fue aprobada por el tripartito de izquierdas, aunque apenas la aplicó pues a los pocos meses fue sustituido por el gobierno de Artur Mas, especialmente activo en esa materia sancionadora.

En 2010 impuso 235 multas lingüísticas que le reportaron ingresos por valor de 221.525 euros (un 5,7% del total recaudado por infracciones relacionadas con las normas de consumo). Al año siguiente se cursaron 226 por valor de 176.110 euros. A partir de ahí, las cifras bajan, pero se recuperan en 2019 --un año después de la sentancia del TC--, con 94 multas, es decir, 55.575 euros."     (Crónica Global, María Jesús Cañizares, 15/04/23)

28/4/23

Leo con estupor que han propuesto la Creu de Sant Jordi a título póstumo para Juan Marsé... Cuando estaba vivo sí que hubiera valido la pena, ya que así habría podido renunciar a ella y ciscarse finamente en la madre de quienes la conceden, como está mandado y como a él le hubiera gustado... como hizo la Sardà... Para qué necesita una medalla póstuma quien dejó para la posteridad la mejor respuesta jamás ofrecida a la recurrente pregunta de por qué no escribía en catalán: «Escribo en la lengua que me sale de los cojones» (Albert Soler)

 "Leo con estupor que han propuesto la Creu de Sant Jordi a título póstumo para Juan Marsé. En mi opinión, Marsé no se la merece. No se merece esta afrenta a su memoria, quiero decir. Cuando estaba vivo sí que hubiera valido la pena, ya que así habría podido renunciar a ella y ciscarse finamente en la madre de quienes la conceden, como está mandado y como a él le hubiera gustado. Pero si se la conceden una vez difunto, no podrá devolverla y estará condenado a lucirla por toda la eternidad. Menuda cruz, valga la redundancia.

Pobre Marsé, no imagino mayor humillación, un respeto con los muertos, hagan el favor. Se empieza concediendo a alguien la Creu de Sant Jordi y el paso siguiente es colgarle la Medalla d’Or de la Generalitat. De ahí a la Cruz de Hierro no hay más que un paso. En el Parnaso donde habitan los grandes, se encontraría con Borges y Sábato luciendo la Orden de las Artes y las Letras de Francia, a Henry James con la Orden del Mérito Británico, o a Faulkner con la distinción de Caballero de las Artes y las Letras de su país.

– ¿Y eso que llevas tú qué es, Marsé? -le preguntarían.

– La Creu de Sant Jordi -respondería.

Y venga risas. Y así día tras día. No, mejor dejarle tranquilo, que con el Premio Cervantes ya le da para codearse con sus colegas del más allá.

Sin embargo, temo que el Governet tenga en cuenta la petición. Si Marsé estuviera vivo, no habría peligro de que le dispensaran galardón alguno, siendo como era un botifler, un charnego y un tipo que se ciscaba en la republiqueta. Un mal catalán, en suma, que añadía, a su pecado de escribir en castellano, el de hacerlo mil veces mejor que los afines al régimen que escriben en catalán. Una vez muerto, capaces son de agraciarle con la Creu de Sant Jordi, solo por joderle. El lacismo no perdona a los desafectos, ni aun difuntos.

 La Creu de Sant Jordi es una inutilidad, pero si te la otorgan cuando has muerto, la inutilidad es doble, eso le hurta a uno la posibilidad de devolverla, a poder ser tirándola con desprecio, aquí la tenéis, colgárosla en el culo, como hizo la Sardà (lo de devolverla, no lo de colgársela ahí). Sirve para despreciarla. Bueno, y para que al morirte te paguen una esquela con dinero público, pero si te haces una póliza de Ocaso o de Santa Lucía eso también te entra, y encima añaden un ramo de flores sobre el féretro y un pianista tocando ‘El Cant dels Ocells’. Si por alguna razón (sea por estar muerto, sea por pereza) no la devuelves, es un trasto inútil que termina en el cajón de las llaves antiguas, los tornillos, los encendedores que no funcionan y un recuerdo del viaje a Lourdes.

A Marsé no le hace falta cruz alguna, no le hacía falta cuando estaba vivo, menos falta le hace estando muerto. Hizo más él por Barcelona y por Catalunya que todos los que andan repartiendo medallas de buen catalán desde que alguien que se encontraba aburrido las inventó, allá por 1981. Para qué necesita una medalla póstuma quien dejó para la posteridad la mejor respuesta jamás ofrecida a la recurrente pregunta de por qué no escribía en catalán: «Escribo en la lengua que me sale de los cojones». Aquí termina cualquier discusión lingüística, patriótica o nacional, y además la frase encierra toda una filosofía: para qué justificarse, para qué contemporizar, para qué razonar con quien no razona y para qué intentar hacerse perdonar. Esa enseñanza vale por cien Creus de Sant Jordi."         (Salvador López Arnal, blog, 25/04/23; fuente: https://www.diaridegirona.cat/)

12/4/23

"Es un linchamiento": el Sindicato Médico arropa a la enfermera del C1 de catalán Simecat censura la presión del consejero de Salud y pide recibir a sanitarios de toda España "con los brazos abiertos"... también llama a "no vulnerar el derecho constitucional a trabajar en cualquier comunidad autónoma" sin "ser discriminados por razón de lengua"... El Sindicato admite que el catalán es "recomendable" para ofrecer una mejor atención de calidad a los pacientes, "pero no puede ser una obligación de entrada que impida acceder a una plaza laboral"

 "El Sindicato Médico Catalán (Simecat) ha arropado hoy la enfermera del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona que ha perdido su trabajo tras quejarse del requisito del nivel C1 de catalán en una oferta de empleo público. La parte social ha censurado la presión a la que la sometió el consejero catalán de Salud, Manel Balcells, y ha emplazado al Departamento 

En un comunicado público, Simecat ha "censurado" las palabras del conseller Balcells sobre la joven profesional porque la plataforma "ha defendido reiteradamente" que el catalán en la sanidad "debe ser un mérito y no un requisito obligatorio" para trabajar en la región. El Sindicato recuerda que el territorio tiene "dos lenguas oficiales" y que los profesionales que vienen "ya acreditan una de entrada". Todo ello en un contexto de "déficit importante de médicos y enfermeras". 

"Silencio del Colegio de Enfermería y el de Médicos"

La agrupación recuerda que "esta cuestión ya se ha normalizado en las Islas Baleares", donde el catalán "es un mérito y no una imposición obligatoria". 

No ha ocurrido en Cataluña, donde Salud no ha renovado el contrato a la joven sanitaria por criticar el requisito del nivel C1 de catalán. Ante el "silencio de los Colegios de Enfermería y de Médicos". 

"No vulneren derechos constitucionales"

A renglón seguido, Simecat llama a "no vulnerar el derecho constitucional a trabajar en cualquier comunidad autónoma" sin "ser discriminados por razón de lengua". El Sindicato admite que el catalán es "recomendable" para ofrecer una mejor atención de calidad a los pacientes, "pero no puede ser una obligación de entrada que impida acceder a una plaza laboral". 

Frente a estos derechos, la asociación laboral detecta un "linchamiento" en el que habría participado el consejero Balcells "para quedar bien con el sector separatista". Por este motivo, la joven "se ha ido a su tierra natal por la presión social, una vez finalizado el contrato, no tenia interés en seguir en un lugar donde se le vilipendiaba, con un director de orquesta operando desde la Consejería". 

"Recibidles con los brazos abiertos"

La plataforma enfatiza que "en Cataluña necesitamos médicos y enfermeras", por lo que se impone "recibir con los brazos abiertos a cualquier profesional formado del resto de España con títulos homologables y de gran nivel formativo de reconocido prestigio internacional". "No obligarles de entrada a disponer de un C1 de catalán", opina. 

Lo contrario a esto, argumenta la misma voz, es dar "mayor relevancia a la política lingüística nacionalista que a la necesidad de profesionales sanitarios y a la salud de la ciudadanía". Es algo que estaría haciendo el Govern, detecta Simecat, y que perjudica la atracción de talento, como ocurre con las plazas del MIR, donde la región está siendo castigada año tras año. "              (Ignasi Jorro, Crónica Global, 05/04/23)

26/1/22

En los 20 años que pasó en Cataluña, nadie pidió cuentas a Messi por no pronunciar ni una palabra de catalán. Ahora ya están pidiendo cuentas a 600 enfermeras andaluzas incluso antes de que vengan... o se curan enfermedades en catalán... o muerte

Jordi Salazar @PhilJordi

 En los 20 años que pasó en Cataluña, nadie pidió cuentas a Messi por no pronunciar ni una palabra de catalán. Ahora ya están pidiendo cuentas a 600 enfermeras andaluzas incluso antes de que vengan.

12:36 a. m. · 21 nov. 2021
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"Los hospitales catalanes fichan a más de 600 enfermeras andaluzas" (La Vanguardia, 20/11/21)


Eduard Voltas @eduardvoltas

 Bienvenidos y bienvenidas, pero por favor, que @salutcat les haga pasar por un curso de capacitación lingüística y al menos nos entiendan cuándo nos atiendan. Si no es pedir demasiado. (traducción google)

 Benvinguts i benvingudes, però si us plau, que @salutcat els faci passar per un curs de capacitació lingüística i almenys ens entenguin quan ens atenguin. Si no és demanar massa.

11:31 a. m. · 20 nov. 2021
95 Retweets 54 Tweets citados 314 Me gusta

 Al parecer ayudar a curar enfermedades no se puede hacer en español (lengua que entienden todos los catalanes)... o se hace en catalán... o muerte... 

4/1/22

Una concejal de Sant Vicenç rechazó el ruego de un restaurador latinoamericano recién llegado a Cataluña de que utilizara castellano; los asistentes han enviado una carta de queja al ayuntamiento

 “Hostil”. “Falta de respeto”. “Los extranjeros no somos bienvenidos”. Así describen comerciantes de Sant Vicenç de Montalt (Barcelona) la actitud que la concejal de Promoción Económica, Comercio y Turismo y de Consumo, Laia Sorribes (ERC), tuvo con el responsable de un restaurante en una reunión celebrada recientemente en este municipio costero. 

La insistencia de la edil a hablar en catalán, a pesar de que el restaurador de origen latinoamericano --que por miedo a represalias prefiere que no aparezca su nombre, pero su inicial es J.-- acaba de llegar a Cataluña, tensó el encuentro y ha provocado las quejas de los asistentes, la mayoría catalanohablantes. Crónica Global ha intentado recabar la opinión de Sorribes, sin éxito.

 La polémica se produce en pleno recrudecimiento del debate sobre la lengua, después de que el Tribunal Supremo avale el 25% de horario lectivo en castellano en los colegios. El independentismo ha cerrado filas en favor de la inmersión.

"Es una falta de respeto"

El incidente ocurrió hace dos semanas, en una reunión celebrada en el Centro Cívico del municipio a la que asistieron una veintena de personas. El objetivo era reimpulsar la Asociación de Comerciantes de Sant Vicenç, un proyecto que se remonta a 2002 y se intentó retomar en 2019, pero debido a la pandemia quedó de nuevo en suspenso. Al encuentro acudió la concejal republicana, aunque "el ayuntamiento tiene poco que decir, pero se le invitó por deferencia". "Yo vi que uno de los asistentes, dueño del restaurante, tenía dificultades de comprensión del catalán. Muy educadamente, preguntó si podíamos hablar en castellano", explica a este medio uno de los participantes. Un comerciante se mostró reticente a cambiar al castellano, mientras que la edil manifestó que cada uno debía expresarse como más cómodo se sintiera.

“Hasta ahí bien --añade el testigo--, pero lo que nos dolió es que después dijera en dos ocasiones que esa persona ‘deberá aprender a hablar en catalán’. Yo soy catalanohablante, pero creo que fue hostil, creo que es una falta de respeto”.

Carta de queja al ayuntamiento

Tras el encuentro, uno de los participantes, también de origen foráneo, dirigió una carta al ayuntamiento en la que explica que, desde el incidente ocurrido, en el que se negó a dirigirse "en castellano" a uno de los posibles futuros miembros de la asociación, "sabiendo que él no habla todavía catalán, pues es un recién llegado", esta asociación ha perdido "unos cuantos posibles miembros".

Asegura el remitente que algunas personas se han sentido muy molestas pues "poniendo las diferencias políticas aparte, esta actitud envía un mensaje claro" a la gente como él, "extranjeros", que no son bienvenidos y que no están interesados en nuestra opinión como propietarios de negocios, "únicamente porque todavía alguien no ha aprendido catalán". Recuerda el comerciante que en Sant Vicenç hay muchos extranjeros que regentan negocios, "pagan sus impuestos" y por ende los servicios de Sorribes como concejal.

A su juicio, lo ocurrido es “una cuestión de comunicación, no de política”. En la carta se sugiere a Sorribes que visite a J. para suavizar las cosas, así como a las personas que se sintieron ofendidas. “Durante los últimos 25 años, lo que ha pasado con J., me ha pasado a mí en muchas ocasiones y mucho peor”, asegura este comerciante.

El alcalde se sensibiliza

El alcalde de Sant Vicenç, Víctor Llasera (Junts per Sant Vicenç), asegura que desconocía esa situación y según ha podido saber este medio, se ha puesto en contacto con J. para expresar su sensibilidad al respecto, ya que está casado con una mujer de origen latinoamericano.

El primer secretario de la agrupación local del PSC, Javier Sandoval, ha expresado en declaraciones a este medio su “firme rechazo a la actitud de desprecio de la concejal de ERC. Se ofendió y faltó el respeto a una persona recién llegada que lleva poco tiempo en Cataluña, que trabaja en el municipio, que aporta su grano de arena a la prosperidad de Sant Vicenç y cumple con sus deberes”.

En opinión de Sandoval, "por delante de la lengua que se utilice está la convivencia y el respeto a las personas. Una concejal debe trabajar por todos ciudadanos, sea cual sea su lengua y procedencia". "Por todo lo expuesto y exigimos a la concejal y gobierno una disculpa pública", concluye."            (M. Jesús Cañizares, Crónica Global, 04/12/21)

3/12/21

Quejas porque trabajadores de Nissan hablan castellano en TV3

 "El director del digital larepublica.cat, Joan Puig, ha expresado su malestar por el hecho de que los trabajadores de Nissan entrevistados por TV3 hayan hecho sus declaraciones en castellano durante una protesta en la Zona Franca de Barcelona.

El también exdiputado de ERC en el Congreso extiende sus quejas a la televisión pública por no haber encontrado trabajadores o representantes sindicales que se expresen en catalán.

“Buenas noches @tv3cat ¿no existen trabajadores de @Nissan que hablen catalán? ¿Y más grave entre los representantes de los sindicatos?”, ha preguntado Puig. El secretario general de UGT en Cataluña, Camil Ros, ha explicado que "en la atención a los medios lo hice en catalán… y al final preguntas en castellano… que fue donde sale el corte en castellano en el TN…".

 Estas explicaciones han terminado de encender al exdiputado, que ha pedido explicaciones al director de informativos de TV3, David Bassa, al considerarlo un hecho "muy grave".     (e-notícies, 02/12/21)

2/12/21

Vinculando la lengua catalana a posiciones políticas se obtiene un resultado paradójico. Se crea una buena fuerza de choque, pero la lengua pierde... Forjada al fuego de una visión política, puede crearse una esfera lingüística numerosa, de gran intensidad militante. Pero, a su vez, se expulsa una gran bolsa de hablantes reales o potenciales... obligar a los catalanes a elegir entre el sentimiento catalán o el español puede ser una táctica política eficaz a corto plazo, pero seguro que es una estrategia lingüísticamente suicida

 "Vinculando la lengua catalana a posiciones políticas se obtiene un resultado paradójico. Se crea una buena fuerza de choque, pero la lengua pierde. Lo que ahora vemos al por mayor, ya ocurrió a finales de los 70 con el Avui . Ese diario fue posible gracias al micromecenazgo de decenas de miles de catalanes. Decantándose por el pujolismo, perdió muchos enseguida. 

Hoy fue instrumento suficientemente eficiente... para el nacionalismo, no para la lengua. La historia de TV3 es similar. Tiene una audiencia muy fiel (acostumbrada a humoristas que ríen por debajo de la nariz hablando de “perros” adiestrados a “oler españoles”). Presume ser la primera cadena en Catalunya, pero ha perdido el objetivo inicial, que era el de fomentar el uso del catalán. 

Las cadenas en español pasan del 80%. ¿Un reducto del 13 al 16%? Útil para una idea de Cataluña, inútil para el catalán. Forjada al fuego de una visión política, puede crearse una esfera lingüística numerosa, de gran intensidad militante. Pero, a su vez, se expulsa una gran bolsa de hablantes reales o potenciales. 

Una lengua de grandes dimensiones puede permitirse el lujo de expulsar a hablantes. El inglés, como el castellano, el árabe o el chino, puede permitirse muchos vínculos negativos: el desprecio o la indiferencia por otras culturas, la prepotencia de sus hablantes que dan por hecho que todo el mundo debe entenderlos. 

Una política nada sospechosa de proximidad con el catalán, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó en un almuerzo con periodistas de La Vanguardia que entendía muy bien las susceptibilidades catalanas porque su suegra, portuguesa con tienda abierta en una ciudad del país del fado, se quejaba siempre de la impertinencia de muchos españoles: daban por hecho que debía atenderles en castellano.

 El fuerte no debe esforzarse; sus errores de empatía no le penalizan. El débil, debe ser inteligente y seductor o, por mucho que llore, pagará su debilidad. La tiranía de la audiencia en el mundo digital: éste es el nudo lingüístico Las dificultades del catalán son dos. 

1) La integración de la inmigración africana se realiza en castellano; y la latinoamericana no da el paso al catalán.

 2) Las plataformas digitales, las redes sociales e internet en general, condicionadas por el factor masivo (likes, viralidad, audiencia), están encogiendo el espacio de las lenguas de vida precaria como la catalana, pero también del italiano, el francés y otras lenguas de peso. 

Se imponen las que reúnen hablantes por cientos de millones. No digo que la fuerza del español no sea también política. Pero ahora es sobre todo consecuencia de la tiranía de la audiencia en el mundo digital. 

Si un joven de Barcelona quiere ser famoso en el TikTok, elige el castellano aunque en su casa sean indepes. El nudo está aquí. Reclama un buen estudio diagnóstico y después un plan para potenciar el catalán como lengua de prestigio.

 Plan que, por ser eficaz, debería ser unitario: obligar a los catalanes a elegir entre el sentimiento catalán o el español puede ser una táctica política eficaz a corto plazo, pero seguro que es una estrategia lingüísticamente suicida."                (Antoni Puigverd, La Vanguardia, 01/12/21; traducción DEEPL)

12/11/21

Echaron de Catalunya Ràdio al premio Cervantes... por hablar en castellano en 2007... Cristina Peri Rossi: "sé lo que significa el miedo: lo vivo aquí en Catalunya, el miedo a decir lo que uno piensa"

 "La escritora Cristina Peri Rossi (Montevideo, Uruguay, 1941), ha sido proclamada ganadora del Premio Cervantes dotado con 125.000 euros, según anunció en rueda de prensa el ministro de Cultura, Miquel Iceta.

Peri Rossi, residente en Barcelona desde los años 70, fue despedida en 2007 del programa Una nit a la Terra de Catalunya Ràdio porque no hablaba en catalán, sino en castellano.

La escritora denunció ser víctima de persecución lingüística y el caso llegó ayer al Parlament, donde el ex líder de Ciutadans, Albert Rivera, acusó al entonces presidente catalán, José Montilla, de iniciar una "limpieza lingüística" en los medios de comunicación de la Generalitat.

El que era director de Catalunya Ràdio en aquella época, Oleguer Sarsanedas, pidió posteriormente disculpas a la escritora y le ofreció volver a colaborar en la emisora, pero esta lo declinó.

Peri Rossi ha sido también profesora de literatura, traductora y periodista, siendo conferenciante habitual de universidades españolas y extranjeras. Sus numerosos artículos han aparecido en varios diarios y revistas: El País, Diario 16, La Vanguardia, El Periódico de Barcelona, El Mundo y Grandes firmas de Agencia Efe."                      (e-notícies, 11/11/21)


"Cristina Peri Rossi: sé lo que significa el miedo: lo vivo aquí en Catalunya, el miedo a decir lo que uno piensa"

"(...) Por su parte, Cristina Peri Rossi, señala que "me ha tocado vivir dos dictaduras, la argentina y la de Franco, donde el totalitarismo impedía decir lo que pensamos". "La gente tiene un instinto de libertad, pero sé lo que significa el miedo: lo vivo aquí en Catalunya, el miedo a decir lo que uno piensa", afirma.

La escritora añade que "quiero la libertad de poder pensar que lo que hago o digo tiene un coste económico". "La gente no se atreve a decir lo que piensa porque tiene miedo a la revolución", indica, además de sentenciar que "UPyD es el único partido que puede renovar la política". (...)" (e-notçicies, 08/05/2014) ... en Nacionalismodeandarporcasa, 13/05/14)


"¿Y que fue de Cristina Peri Rossi?

MANIFIESTO CONTRA LA PERSECUCIÓN LINGÜÍSTICA

La escritora Cristina Peri Rossi ha sido despedido de Catalunya Radio por hablar en castellano. Todos quienes conocemos su lucha a favor de la democracia, su participación y defensa de la cultura catalana, queremos manifestar nuestro rechazo al despido y nuestra solidaridad a la persona y escritora frente a esa discriminación.

1) "… pero a la luz de reiteradas observaciones empiezo a sospechar que entre nosotros se da un fenómeno parecido; que existe un síndrome de Barcelona en virtud del cual un contingente pequeño pero ruidoso de nuestros conciudadanos actúa de repente como si fuesen el capitán Alfred Dreyfus en la Francia de 1895. Es decir, que aseguran ser víctimas de sañuda persecución, de crueles discriminaciones, de un odio fóbico; no por ser judíos, claro, sino por ser castellanohablantes o castellanoescribientes. (…)

Más recientemente, ha hecho furor el caso de una escritora de origen latinoamericano con más de tres décadas de residencia en Cataluña pero incapaz, al parecer, de hablar catalán, a la que el exceso de celo de alguien apartó de una tertulia radiofónica." (JOAN B. CULLA I CLARÀ: Falsos Dreyfus, falsos Zola; El País, ed. Cataluña, 19/10/2007)

2) Titular de la noticia en e-noticiés: PERÒ NO PARLA CATALÀ. L'extertuliana de TV3 viu a Barcelona des del 1974.

Comentarios en e-noticies:

Nicolau (Terrassa) • Avui a les 10:07 h.

Gent que porta 30 anys en un país i no parla la llengua només té una definició: INADAPTATS. Com els blancs a Sudàfrica, margineu els locals i quan les coses es posen a lloc us queixeu. Vosaltres sou els estrangers, aquesta terra és i sempre serà CATALUNYA

jordi (st cugat) • 27-09-2007 23:00 h.

aquests sudamericans són l'hòstia. no els costaria res parlar català parlant ja castellà i la inmensa majoria es neguen en rodó. qui és l'inadaptat? després ens trobem a marroquins o xinesos que parlen català més o menys bé però sudamericans molt, molt po.

El be negre (barcelona) • 27-09-2007 18:37 h.

Lo que no entenc es com aquesta dona va ser contractada per una emisora creada especialment per oients de parla catalana. Si vol que l'escoltin en espanyol té tota Espanya i Sudamerica per treballar ja qu'es tan bona professional.

Voyage (Barcelona) • 27-09-2007 17:19 h.

Esta mujer entiende el catalán por lo cual no hace cambiar de idioma al interlocutor. Echarla por no hablar una lengua es no respetarla, es exigir un derecho para ti (el de escuchar un idioma)quitándole uno mayor a otra persona (el de hablar otro).

Franco va permetre el català a la 2 de tve als 60. Catalunya Ràdio no permetre el castellà al 2007. Anem cap enrera.

Irene (Barcelona) • 27-09-2007 16:44 h.

Vivim i treballem a Catalunya. Si aquesta senyora hagués viscut i treballat a França durant 30 anys hagués hagut d'aprendre la llengua francesa per transmetre i per comunicar. Hi ha gent que el parla en només 3 mesos: de què es queixa?

antonio (Barcelona) • 27-09-2007 14:47 h.

En un medio de comunicación catalán, se ha de hablar en catalán. Pretender también que los medios catalanes hablen en castellano, es un poco cutre, Que los medios castellanos, hablen en catalán, entonces seremos iguales. Einstein, tenía más lógica que tú.

Jaume (Barcelona) • 27-09-2007 12:01 h.

Aquesta dona com molts altres te molts més espais o pot parlar el castellà. Els imperialistes sempre tenen les mateixes raons, ja son antigues ho son tant que com a mínim tenen 300 anys.

JORDI (GIRONA) • 27-09-2007 11:44 h.

no cal que ningú s'esgarrapi la roba fent ostentació de llibertat...si no parla català és perqué no vol,o no li dóna la gana. Una falta de respecte molt lamentable envers el nostre poble.

3) “La segregación de Peri Rossi es obra de las autoridades, naturalmente. Pero la responsabilidad, ni siquiera profunda, es de todo aquel que, no siendo un segregacionista y estando en contra de la medida aplicada y del manual reeducativo, sigue esta mañana en las radios y las televisiones públicas, tomándose un vaso de agua clara.”   (Diarios. Blog de Arcadi Espada, 27-09-07)... en Nacionalismodeandarporcasa, 15/02/08)

25/10/21

Albert soler: cualquier madre se asustaría al ver que a su hija la atienden en castellano. La pobre niña venga llorar y llorar, sin que nadie sepa qué le ocurre, hasta que, sin duda, la señora explotó... ¿Cómo quiere que no llore, pobrecita, si no le habla en catalán?... ¿Como no se han de asustar a nuestros hijos, si un señor con bata blanca les urge decir treinta y tres en lugar de trenta-tres? Suelen ser niños que solo han escuchado el castellano por televisión y en boca de Mag Lari, que usa esta lengua para parecer más malo... entonces comienzan los vómitos y fiebre, que hay niños muy sensibles... Sólo hay en este mundo algo peor que un médico incapaz de curarte, y es que te cure en castellano

 "A la niña de la (dicen que) escritora Anna Punsoda la aterrorizaron en su visita al pediatra de urgencias. No es que por error la hicieran pasar a la unidad de paliativos, no. Fue mucho peor: el doctor le habló en castellano. Tal como lo oyen. 

No es extraño que la mamá se haya puesto de los nervios, uno lleva a su dulce criatura con casi 40 de fiebre y vomitando, para que lo curen, y van y lo atienden en castellano. Para ello mejor quedarse en casa y darle una copa de coñac, que según mi abuela, todo lo arreglaba.

 La tragedia de esta familia ha merecido la solidaridad en las redes de todo el lacismo, y si este sábado no sale en el FAQS la pobre madre, será porque igual el taxista que la llevaba no hablaba catalán y se lanzó del vehículo en la primera rotonda. 

Según la horripilada mamá, para los niños es una situación extrañísima que el doctor no hable catalán, y por supuesto, en el hospital lo pasan fatal. A ninguno de mis hijos, y tengo cuatro, nunca les ha pasado nada parecido, de hecho a los tres años entendían tan bien el catalán como el castellano, pero no me hagan caso, deben ser niños raros, no como la chiquillo de Anna Punsoda, que aterra si le preguntan «dónde te duele».

 Cualquier madre se asustaría, al ver que a su hija le atienden en castellano. La pobre niña venga llorar y llorar, sin que nadie supiera qué le ocurría, hasta que, sin duda, la señora explotó. 

 - ¿Cómo quiere que no llore, pobrecita, si no le habla en catalán?

 Hay niños a los que se les agrava la enfermedad si alguien se les dirige en la lengua que no toca. Suelen ser hijos de lacistas, que en su casa no han escuchado nunca una palabra en castellano, o si lo han escuchado, ha sido por televisión y en boca de Mag Lari, que usa esta lengua para parecer más malo. 

¿Como no se han de asustar a nuestros hijos, si un señor con bata blanca les urge decir treinta y tres en lugar de trenta-tres? Esto no lo soporta ni un lacista adulto. Cuando los papás lacistas llevan los    niños a tomar un helado, los tapan las tiernas oídos hasta cerciorarse de que el camarero habla un catalán impecable, que hoy, cuando menos lo esperas, es un inmigrante que no va a clases de la nuestra bellísima lengua y suelta un «aquí está tu helado de fresa, guapa».

 Entonces comienzan los vómitos y fiebre, que hay niños muy sensibles. Y no es cosa de pedir en una heladería la copa de coñac.

 Sólo hay en este mundo algo peor que un médico incapaz de curarte, y es que te cure en castellano. Vale más un medicastro en catalán que una eminencia en castellano, eso es cosa sabida. No es extraño que cada vez más catalanes se hagan socios de una mutua privada, al menos aquí uno puede elegir un mal médico en catalán, aunque sea guiándose por los apellidos."                   (Albert Soler, Diari de Girona, 22/10/21; traducción google)

4/10/21

Cataluña controlará a los profesores universitarios que impartan clases en castellano. Los centros tendrán que remitir informes semestrales a la Consejería de Universidades en los que se detalle en qué lengua se ha impartido la clase y cualquier incidencia que se haya producido

 "La Generalitat ha preparado un plan para la inmersión lingüística del catalán en las universidades. A diferencia de lo que ocurre en los colegios e institutos, donde la enseñanza es principalmente en catalán, en el ámbito académico el docente tiene libertad para impartir la clase en esta lengua o en castellano, sobre todo por la presencia de alumnos extranjeros. O así ha sido hasta ahora.

El profesor elegía, independientemente de la lengua que figurara en el plan de estudios, ya que ambas se consideran propias y oficiales, y se adaptaba así a las preferencias de los alumnos. Sin embargo, por primera vez, el Govern controlará el uso del catalán y el castellano en la docencia universitaria y, para ello, realizará un “seguimiento exhaustivo del cumplimiento de la lengua de docencia de las universidades”.

 Las universidades tendrán que remitir informes semestrales a la Consejería de Universidades, dirigida por Gemma Geis (Junts), en los que se detalle en qué lengua se ha impartido la clase y cualquier incidencia que se haya producido. De esta forma, el Govern busca que las clases se impartan en la lengua que indica el plan de docencia, sin cambios de última hora, para “garantizar los derechos lingüísticos de los alumnos y el profesorado”.

 Esta iniciativa llega después de que se produjeran varias quejas de alumnos que habían solicitado impartir las clases en catalán y las recibieron en castellano, según ha informado ABC. Y es que los últimos informes lingüísticos indican que se ha producido un retroceso en el uso del catalán en las clases de máster, donde hay una gran parte del alumnado que procede del extranjero.

 En cambio, en los grados la lengua mayoritaria sigue siendo el catalán. Así lo muestra el último Informe de Política Lingüística referido al curso 2018-2019. Además, refleja que, desde el curso 2014-2015 se han ganado 2.960 asignaturas en catalán, un 21,5% más.

Rechazo de la oposición

PP, Vox y Ciudadanos no han tardado en mostrar su rechazo a esta propuesta. Para la diputada popular Lorena Roldán, el Govern quiere “una Cataluña cada vez más aislada”. “No tuvieron bastante con espiar a los niños en los patios, ahora también van a vigilar en qué lengua imparten los profesores su asignatura en las universidades catalanas”, ha denunciado, según recoge El Mundo. (...)"           (Economía Digital, 23/09/21)