2/6/11

La ONU reconoce el derecho de autodeterminación para amparar a aquellos territorios injustamente dominados y colonizados por metrópolis ajenas

"Pero centrémonos en el derecho de autodeterminación. Vayamos a los textos que habremos de recordar cada poco para desenmascarar tanto descaro.

Los nacionalistas suelen escudarse en la resolución 15.214/XV de 14 de diciembre de 1960 de la Naciones Unidas, que dice: ‘Todos los pueblos tienen el derecho de autodeterminación; en virtud de este derecho, determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural’.

Idéntico contenido sostiene el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de 1966. El problema es que, además de afirmar ese derecho de autodeterminación, se especifica sus límites. Pero los nacionalistas se lo callan: ‘Todo intento encaminado a romper total o parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas’. Una selección de citas muy propia de nacionalistas.

Su determinación a manejar el pasado a su antojo no tiene límites. Se suelen amparar en la resolución 2.625 de 24 de octubre de 1970 donde se vuelve a hablar de autodeterminación:

‘En virtud del principio de igualdad de derechos y libre determinación de los pueblos, consagrado en la Carta de la Naciones Unidas, todos los pueblos tienen el derecho de determinar libremente, sin ingerencias externas, su condición política y de procurar su desarrollo económico, social y cultural, y todo Estado tiene el derecho de respetar este derecho de conformidad con las disposiciones de la Carta […]. El establecimiento de un Estado soberano e independiente o la adquisición de cualquier otra condición política libremente decidida por un pueblo constituyen formas de ejercicio del derecho de libre determinación de un pueblo’.

Aparentemente, dicho párrafo no deja lugar a dudas; eso sí, a condición de que no se lean los que le siguen:

‘Ninguna de las disposiciones de los parágrafos precedentes no se entenderá en el sentido que autorice o fomente cualquier acción encaminada a romper o menoscabar, total o parcialmente, la integridad territorial de los Estados soberanos e independientes que se guían en conformidad con el principio de igualdad de derechos y de libre determinación de los pueblos antes descritos y estén, por tanto, dotados de un gobierno que represente la totalidad del pueblo perteneciente al territorio, sin distinción por motivos de raza, credo o color’.

Pero esto ya no lo citan. Así construyen la historia. Efectivamente, el derecho de autodeterminación fue incluido en las disposiciones de las Naciones Unidas porque se pretendía amparar a aquellos territorios injustamente dominados y colonizados por metrópolis ajenas.

Su objetivo era restablecer las condiciones de justicia rotas por el imperialismo; pero en ningún caso alterar la estabilidad entre Estados ya establecidos y asentados sin problemas de colonización.

La resolución 2.160/XXI de 30 de noviembre de 1966 exige a los Estados consolidados que: ‘[...] Adopten todas las medidas necesarias con el objeto de facilitar el ejercicio del derecho a la autodeterminación de los pueblos bajo dominación colonial‘. No habla del resto de Estados, sólo de los dominados colonialmente.

Incluso ya se declaró por parte de los Estados miembros en las Relaciones Amistosas de 1970 que tal derecho de audeterminación sólo se podía contemplar en tres supuestos: (1) que el territorio esté sometido a colonización; (2) que en todo caso el sujeto de ese derecho es todo el Estado y no una parte de él, y (3) que la secesión queda excluida excepto cuando se trata de la colonización de un Estado por otro. (...)

Tras la convulsión de la última guerra de los Balcanes, la Comunidad Internacional reconoció hechos consumados como consecuencia de una guerra. No parece ese el mejor camino para conseguir legalidad internacional.

Y sin embargo, también este dato es utilizado por el nacionalismo para forzar algún tipo de legitimación internacional a sus pretensiones separatistas. Parecen no darse cuenta de la gravedad de dicho fundamento bélico." (Antonio Robles: Autodeterminación e 'indignados'. lavozdebarcelona.com, 02/06/2011)

No hay comentarios: