‘Sólo con una alta participación impedirá que Mas consiga la mayoría
absoluta para separar Cataluña del resto de España y de la Unión
Europea. Por este motivo, por ejemplo, Mas se ha negado a conceder
entrevistas a medios escritos nacionales, para no incentivar la
movilización al voto, que en la cita de las generales es
mayoritariamente contrario a la separación’ (...)
... debemos explicar lo mucho que nos jugamos el 25N, las consecuencias y costes de la separación, y a la vez lo que somos capaces de construir todos juntos entre catalanes y el resto de españoles.
Esta separación implicaría cinco crisis para Cataluña.
Una crisis social y afectiva,
por lo que significa convertirnos en extranjeros con respecto al resto
de españoles dadas las enormes relaciones familiares y de amistad que
existen entre una amplísima mayoría de catalanes y el resto de
españoles.
La segunda, una crisis comercial, por el
efecto frontera que ocasionaría poner muros entre Cataluña, Aragón y la
Comunidad Valenciana, lo que generaría que el superávit comercial de
22.000 millones de euros entre lo que se vende y se compra con el resto
de España dejara de existir.
Nunca, ninguna frontera ha hecho aumentar
las relaciones comerciales entre territorios y una frontera con el resto
de España no sería una excepción.
La tercera crisis sería debida al pago de las actuales pensiones.
Cataluña tiene déficit de cotizaciones sociales para pagar a los
pensionistas catalanes desde el año 2009, dado el elevado envejecimiento
de nuestra sociedad, lo que ha llevado, por ejemplo, a que en este
último año se haya necesitado 1.900 millones de euros de cotizaciones
sociales del resto de España para pagar a los pensionistas de Cataluña.
La cuarta crisis: salida de empresas que facturan en el
conjunto de España y que tienen la sede en Barcelona, con sus
respectivos puestos de trabajo.
Y, por último, la crisis de deuda por los gastos añadidos
del nuevo Estado (Ejército, servicios secretos, cuerpo diplomático,
agencia tributaria, tesorería de la seguridad social…) y por dejar de
forma parte de determinadas instituciones de crédito oficial como el
ICO, el BEI o el BCE. (...)
A nivel cultural, a nivel deportivo, a nivel empresarial, a nivel de
peso político en instituciones europeas y mundiales por ser la cuarta
potencia en tamaño demográfico de la zona euro y la segunda en
territorio, son la muestra más clara de que juntos sumamos mucho más que separados.
Por ello, el 25 de noviembre, sólo con una alta participación
impedirá que Mas consiga la mayoría absoluta para separar Cataluña del
resto de España y de la Unión Europea. Por este motivo, por ejemplo, Mas
se ha negado a conceder entrevistas a medios escritos nacionales, para no incentivar la movilización al voto, que en la cita de las generales es mayoritariamente contrario a la separación." (lavozdebarcelona.com, 15/11/2012)
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