"(...) Los acusados del procés han presentado el juicio como una “causa general” contra el secesionismo. ¿Puede considerarse así?
Entiendo que lo planteen como una causa política.
Como en España lo dan todo por perdido, tienen la vista puesta en el
Tribunal Europeo. Es una estrategia de defensa totalmente legítima. En
cualquier caso, yo no lo entiendo como una causa política, aunque el
señor Junqueras tiene derecho a plantearla como tal. Es la grandeza del
Estado de derecho.
Luego, está lo de que Junqueras asegure que “ama a
España”. A mí la gente sentimental me parece muy peligrosa. No puedes
confiar en alguien que ama las cosas con esa intensidad y, al mismo
tiempo, las quiere destruir.
Por otra parte, su discurso—y el del nacionalismo en
general— es muy adolescente. “Los demás no me comprenden” o “Yo solo
quiero encajar” son argumentos propios de esa edad. Y cuando defiende
que todo fue pacífico, miente. Si violentas la ley, tan pacífico no fue.
Tampoco dijo la verdad cuando afirmó que Esquerra Republicana no ha
sufrido casos de corrupción en cuarenta años.
En los años 30 hubo corrupción en Esquerra. Además,
circulan teorías de que al mártir Companys querían liquidarlo desde sus
propias filas —los de Estat Català, que no podían con él—.
Por su parte, Quim Torra ha declarado: “Antepongo a la democracia a cualquier ley”. ¿Le parece lícita su postura?
Pues depende. La cuestión es que si antepones tu
concepción de la democracia a la ley, debes atenerte a las
consecuencias. Ese es el gran problema: no se puede plantear una
revolución hecha exclusivamente de sonrisas. Un revolución implica
consecuencias que uno debe asumir. Si pierdes en tu enfrentamiento con
el Estado, luego no vengas exigiendo explicaciones o lamentándote.
El procés
ha sido la revolución de los ociosos. El día del cerco a la Consejería
de Economía, por ejemplo, eran todos jubilados y estudiantes. Además,
una revolución tiene que ser seria; su objetivo es tomar el poder. No
puedes hacerla y después decir que ibas de farol.
(Entrevista a Jordi Bernal, colaborador en The Objetive y Jot Down, Óscar Benítez, El Catalán, 26/02/19)
No hay comentarios:
Publicar un comentario