" (...) Efectivamente, en Puerto Rico, en 2012, se hizo un referéndum con dos
preguntas, a efectos de conocer si los puertorriqueños deseaban seguir
manteniéndose como Estado asociado de Estados Unidos, primera pregunta;
o, por el contrario, optaban, segunda pregunta, por una de las tres
posibilidades siguientes: convertirse en el 51 Estado americano, pasar a
ser un Estado independiente, o, por último, mejorar la situación actual
manteniendo la soberanía de Puerto Rico y, al mismo tiempo, seguir
asociados con Estados Unidos, de igual a igual.
Pues bien, el resultado
fue meridiano en lo que se refiere a la primera pregunta, pues el 54% de
los votantes se inclinó por el no, esto es, rechazaban la situación
actual, mientras que el 46% quería mantenerse tal y como están ahora.
Ahora bien, en la segunda pregunta, la primera opción obtenía un 61,4%,
eligiendo integrarse en los Estados Unidos; la segunda opción consiguió
únicamente un 5,5%; mientras que la tercera supuso un 33,4%.
La
consecuencia es que tras ese confuso resultado, no se sabe todavía qué
es lo que quiere realmente la mayoría de puertorriqueños, porque casi la
totalidad de los electores no entendieron la pregunta.
Pues bien, la gran aportación de los nacionalistas catalanes ha sido también plantear dos preguntas confusas, en las que lo único que queda claro es que ellos distinguen dos categorías de Estado: el Estado dependiente y el Estado independiente.
Esta distinción es realmente soberbia y rompe así
con la doctrina clásica del Derecho Constitucional y la Ciencia
Política. En efecto, cuando se utiliza simplemente la palabra Estado,
procedente del italiano lo stato, que ya utilizó Maquiavelo en su
clásica obra El Príncipe, lo que se quiere afirmar es que todo Estado es
soberano e independiente, es decir, que en el orden interno tiene la
potestad de imponer sus decisiones a los gobernados y que en el orden
internacional no está sometido a ninguna otra autoridad.
Por tanto, hablar de Estado independiente es un pleonasmo, pues no hay Estado que no sea independiente. Ahora bien, cuando la palabra Estado va acompañada de algún calificativo, como Estado federado o como Estado asociado, lo que se está afirmando es que ese Estado no es independiente, porque forma parte de una federación o alianza, que impide su total independencia, como ocurre con la Unión Europea.
En cualquier caso, como
la pregunta que plantean los nacionalistas catalanes consiste en saber
si se quiere que Cataluña sea un Estado a secas, para preguntar después,
en caso afirmativo, si se desea que ese Estado sea también
independiente, no hay más remedio que concluir, según lo que piensan
estos iluminados, que hay dos clases de Estado: el dependiente y el
independiente.
Pues bien, si por casualidad se lleva a cabo la consulta,
lo que es mucho suponer, habría que preguntarse qué pasaría si ganasen
en la primera pregunta los síes y los noes en la segunda. En otras
palabras, los catalanes optarían así por un Estado dependiente y
rechazarían el Estado independiente. Así las cosas, lo que falta por
saber entonces es de quién dependería ese Estado, pues en puridad no
sería Estado, ya que no sería independiente ni soberano.
Llegados a este punto habría que preguntarse si los ciudadanos catalanes, a la vista del proceder de sus gobernantes en los últimos meses, son conscientes de que están en manos de unos individuos peligrosos. Es más, no solo se demuestra este desvarío en las dos preguntas que he analizado, sino que además quieren establecer un sistema de cómputo de votos que es un primor de claridad y democracia.
Ciertamente, según ha
señalado Marta Rovira, secretaria general de ERC, el pacto que se ha
establecido entre su partido, CiU, ICV-EUiA y la CUP, certifica que solo
sería necesaria una mayoría simple a favor del sí, en cada una de las
dos preguntas que se plantean, para que se obtuviese la independencia.
Según ella, con un 26% del total de participantes en la consulta que
votasen a favor de la opción independentista de forma explícita,
Cataluña lograría su independencia plena, es decir, con esta minoría se
acabaría con el Estado más antiguo de Europa.
Su confusión es de tal
calibre que durante la conferencia de prensa que celebró el pasado
viernes, llegó a decir que la propuesta «era una mala pregunta»,
rectificando enseguida su lapsus freudiano.(...)" (EL MUNDO 18/12/13, JORGE DE ESTEBAN, en Fundación para la Libertad)
1 comentario:
Estimados Compañero,
Después de la aprobación del 23 de junio de 2014 por consenso de la resolución número 33 del Comité de Descolonización de la Organización de Naciones Unidas (ONU) pidiéndole al gobierno de Estados Unidos que descolonice inmediatamente a Puerto Rico, debemos trabajar juntos para obligar a Estados Unidos a cumplirla.
Los hechos de que el gobierno de Estados Unidos ha mantenido a Puerto Rico como su colonia por 116 años, ha tenido encarcelado por 33 años a Oscar López Rivera por luchar por la descolonización de Puerto Rico, y ha ignorado 33 resoluciones de la ONU, confirman que el gobierno de Estados Unidos nunca querrá descolonizar a Puerto Rico. ¡Necesitamos un tsunami de gente para obligar al gobierno de Estados Unidos a cumplir con las 33 resoluciones!
Debemos protestar pacíficamente y permanentemente por lo menos 3 veces anualmente hasta lograrlo.
La primera será una marcha en Puerto Rico en el día que celebramos la abolición de la esclavitud, 22 de marzo, hasta llegar al Tribunal de Estados Unidos. La segunda será una marcha en Puerto Rico el día antes de la vista anual sobre la descolonización de Puerto Rico en la ONU. La tercera será una protesta en la ONU en el mismo día de la vista anual sobre la descolonización de Puerto Rico.
Estas protestas son indispensable porque, los que tienen colonias no creen en la justicia para todos.
Un abrazo fraternal,
José M López Sierra
Jlop28vislophis@gmail.com
Comité Timón del Pueblo
Compañeros Unidos para la Descolonización de Puerto Rico
www.TodosUnidosDescolonizarPR.blogspot.com
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