La diputada del PSC, Marta Moreta. Adrià Costa
"El grupo de Convergència (CDC) en Sant Hipòlit de Voltregà (Osona) ha
presentado una moción en la que pide que no se abone el sueldo a ningún
funcionario o trabajador público municipal “que se manifieste
públicamente y políticamente” contra la independencia de Cataluña”. La
dirección de CDC se desmarcó ayer y aseguró que no llegará a debatirse
Sant Hipòlit de Voltregà, municipio vecino a Vic, tiene una población
aproximada de 3.500 habitantes. El PSC logró en las últimas elecciones
cuatro concejales, los mismos que CDC, pero los tres ediles de Esquerra
Republicana, que se presentaron con la marca Som Voltregà, pactaron con
los socialistas e hicieron alcalde a Xavier Vilamala. Su hermano Sergi,
también socialista, es el alcalde de la vecina localidad de Les Masies
de Voltregà, con más de 3.000 habitantes.
En este último municipio entró a trabajar hace unos años Marta
Moreta, militante del PSC y licenciada en pedagogía. Como se trata de
pequeñas localidades con presupuestos reducidos, ambos ayuntamientos
acordaron que Moreta prestara servicios conjuntos como jefa de servicios
en las dos corporaciones y que el sueldo lo abonaran a medidas.
Al ser
elegida diputada en el Parlament en las pasadas elecciones autonómicas,
Moreta solicitó una excedencia y dejó de percibir cualquier retribución
de esos dos consistorios.
Pese a ello, Convergència registró el pasado 31 de diciembre una
moción por el trámite de urgencia en la que hace un duro alegato contra
Morera y los diputados del PSC, a los que se les recrimina su “expresa
negativa a dar apoyo a Artur Mas porque defiende el objetivo de que
Cataluña se convierta en un estado independiente”.
El texto de la moción también recuerda que el Ayuntamiento de Sant
Hipòlit apoyó en su día la resolución independentista del Parlament del 9
de noviembre que anuló el Tribunal Constitucional y que en los
presupuestos municipales se reserva una partida de 30.000 euros anuales
para Moreta, de la que se dice “que ha votado siempre en contra de Artur
Mas y de iniciar el camino parlamentario hacia la independencia”.
Por todo ello, la moción pide que el Ayuntamiento deje de pagar el 50%
del sueldo de Moreta, o cualquier otro porcentaje, pero no solo de ella,
sino de “ningún otro funcionario o trabajador público adscrito o que
desarrolle tareas para el Ayuntamiento de Sant Hipòlit de Voltregà, que
se manifieste públicamente o políticamente en contra del proceso de
independencia de Cataluña”, dice la moción.
“Eso es fascismo, no se le puede llamar de otra manera a la intención
de perseguir a los funcionarios por sus ideas políticas”, explicó
Moreta a EL PAÍS. La diputada del PSC explica también que el concejal
que impulsa la medida, Joan Turró, director de Ràdio Vic, “intenta desde
hace meses incendiar los plenos municipales con sus
intervenciones a favor de la independencia y en contra del PSC”, por lo
que reclama a la dirección de Convergència que adopte medidas
disciplinarias contra él.
El pasado 11 de enero se celebró el primer pleno municipal en el que
podía haberse debatido la moción, pero el edil convergente optó por
aplazar la discusión. (...)" (Pere Ríos , El País, 20/01/16)
"(...) La noticia, publicada por El País, corta la respiración. De un tajo.
Sorprende que un personaje con tales ideas totalitarias y excluyentes se atreva a presentar una moción que se inscribe en la más pura tradición de las purgas ideológicas del siglo XX, y aún más que luego pueda seguir ocupando un cargo político.
Por el bien de todos, es necesario que Turró sea una excepción. Una muestra única de intolerancia. Un espécimen extraño, vergonzoso y despreciable, ajeno al sentir de más personas.
Pero para insuflar aire a la convivencia, es de esperar que Convergència actúe con contundencia y que los adalides del procés destierren efectivamente actitudes como esta. Imprescindible para poder respirar." (Emma Riverola, El Periódico, 21/01/16)
"(...) La noticia, publicada por El País, corta la respiración. De un tajo.
Sorprende que un personaje con tales ideas totalitarias y excluyentes se atreva a presentar una moción que se inscribe en la más pura tradición de las purgas ideológicas del siglo XX, y aún más que luego pueda seguir ocupando un cargo político.
Por el bien de todos, es necesario que Turró sea una excepción. Una muestra única de intolerancia. Un espécimen extraño, vergonzoso y despreciable, ajeno al sentir de más personas.
Pero para insuflar aire a la convivencia, es de esperar que Convergència actúe con contundencia y que los adalides del procés destierren efectivamente actitudes como esta. Imprescindible para poder respirar." (Emma Riverola, El Periódico, 21/01/16)
"El nacionalismo es una ideología del siglo XIX que concluye en exclusión, discriminación y totalitarismo.
Els de Convergència a Sant Hipòlit de Voltregà ja no ho amaguen: han presentado una moción que pide no pagar el sueldo a ningún trabajador público municipal que se manifieste contra laindependència.
Resulta que allí gobierna ERC con… ¡el PSC! (...)
Ahora se filtra una moción de 31 de diciembre en que los nacionalistas,
enfurismats amb una treballadora de l’ajuntament que és del PSC i
diputada, piden que el ayuntamiento deje de pagarle el sueldo a ella por “votar siempre en contra de Artur Mas y de iniciar el camino parlamentario hacia laindependència“; y a todo “funcionario o trabajador público adscrito o que desarrolle tareas para el ayuntamiento de Sant Hipòlit de Voltregà, que se manifieste públicamente o políticamente en contra del prusés deindependència de Cataluña”.
Resulta que el concejal de CDC que impulsa la medida (Joan Turró) es también director de Ràdio Vich, emisora subvencionada per tots els joan petits de Catalunya.
Pues ya lo ven: en Catadisney se prohibirá estar libre de nacionalismo;
y si pueden lo harán los mismos medios del Règim. Aunque CDC se
desmarque de su gente en este villorrio, la idea se les escapa de vez en
cuando a todos los mandarines nacionalistas: ya lo insinuó Jordi
Sánchez, jefe de la ANC (sisplau, faci una “V” gegant al catalanitzador de cognoms), en este revelador vídeo, donde confiesa que en Catadisney el poder hará todo lo posible para “garantizar que [los catalanes libres de nacionalismo] continúen siendo por siempre más minorías”.
Dolça i totalitària Catalunya…" (Dolça Catalunya, 21/01/16)
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