"Los españoles son unos tíos que vinieron a jodernos"

" Pla había hablado pocos días antes con este periódico de su última polémica por unas declaraciones a un periódico asturiano ("Siempre me ha dado asco ser español") que provocaron que el ayuntamiento de Gijón suspendiese su actuación en el Teatro Jovellanos y de las protestas convocadas por grupos ultraderechistas contra su espectáculo en Madrid.

¿Qué le parecen las reacciones a sus declaraciones? 

 

Da un poco de pereza. No es que me guste generarlas; es que es mi trabajo. Cuando subes a un escenario, buscas provocar reacciones y emociones a la gente que está ahí, hablando siempre dentro del teatro.

¿Por qué dentro?

 

Me sé explicar peor fuera del escenario. Sucede que hay canciones, cosas que haces que en algún sitio pueden provocar determinada reacción porque hay cierta coincidencia o cierta sensibilidad. Pero está fuera del alcance de mis manos. No siempre lo tienes claro. Tampoco es tan terrible. Es lógico que haya gente a la que le guste como canto y otros a los que les produzca repelús la voz que tengo. Y estos últimos tendrán mil maneras de tomárselo.

¿Cómo cree usted que se vive el debate sobre la independencia en Cataluña?

 

Veo que hay una confrontación social alucinante por un tema tan estúpido como puede ser que uno diga que quiere ser catalán y otro que quiere ser castellano. Parece un chiste que la gente se pueda crispar por eso. Me encantaría que Cataluña fuese independiente, ahora bien, no voy a mover un dedo para ello. Tampoco sé si me encantaría; me la suda, no le doy ninguna importancia.

¿Y cómo ve el mismo debate en el resto de España?

 

El español es muy nacionalista. Eso es así. Fíjate ahora toda la movida con la 'Marca España'.

¿Hay una brecha insalvable?

 

En Cataluña, todos somos catalanes y los españoles son unos tíos que vinieron a jodernos. Nos han educado así. Siempre ha sido así, es inevitable, todo el mundo odia al Real Madrid, el facherío, Franco, la Guerra, los guardias civiles, la persecución al catalán, que yo me llame Alberto... Muy simpáticos los españoles [ríe]. (...)"              (El Mundo)