"La decisión del presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, de
emprender una deriva soberanista ya está favoreciendo los intereses
económicos de la ciudad de Madrid. Las grandes multinacionales, que
tradicionalmente han ubicado la sede de sus filiales ibéricas en
Cataluña, miran con desconfianza el mensaje independentista que destila
CiU y, sin abandonar Barcelona, se están planteando tener una mayor
presencia física en la Madrid, ya sea mediante el traslado de las
oficinas centrales o mediante la compra de empresas con sede en la
capital española.
Cada día son más los directivos de
multinacionales que estudian tomar medidas al respecto, y a día de hoy
ya existen dos casos concretos que ejemplifican el proceso. Uno de
ellos, es el de la multinacional francesa del sector farmacéutico
Sanofi, cuya sede central en España está en Barcelona, pero que ha
decidido apostar por reforzarse en la Comunidad de Madrid con la
apertura de una nueva sede donde trabajarán unas 80 personas.
Con estas nuevas oficinas, la farmacéutica gala dispone ahora en
Madrid de sus equipos de relaciones institucionales y regulatorio, el
departamento de responsabilidad social corporativa y parte del equipo de
investigación clínica, entre otros. Sanofi cuenta con una plantilla en España formada por unas 1.000 personas, de las que 150 ya se encuentran ubicadas en Madrid.
El segundo caso es el de Procter & Gamble (P&G), una
multinacional estadounidense cuya sede ibérica ya se encuentra ubicada
en Madrid. Sin embargo, la compañía, que hasta ahora era propietaria del
50% del capital de la firma de higiene femenina Arbora Ausonia, acaba
de comprar la otra mitad del capital a la familia catalana Carulla
(propietaria de Agrolimen). Tras la adquisición, la compañía ha
planteado a los casi 300 trabajadores que tiene en sus oficinas
centrales de Barcelona el traslado a Madrid, lo que supondría el cierre
de éstas. (...)
Otras multinacionales manifiestan extraoficialmente que ya preparan un
plan B para el caso de que la aspiración de Mas tome cuerpo. (...)
Son las patronales alemanas las que parecen más preocupadas por el
futuro de las inversiones ya comprometidas en Cataluña. En septiembre,
en el marco de una visita de la canciller Angela Merkel, un grupo de
grandes empresarios alemanes se reunió en La Moncloa con sus colegas
españoles, encabezados por el catalán Joan Rosell, presidente de la
patronal CEOE. "Aquel día nadie nos dijo nada de un problema de
separación de Cataluña", se queja uno de los asistentes a aquel
encuentro.
Con el objetivo de obtener información de primera mano, varios
miembros del Parlamento de la República Federal de Alemania (Bundestag)
se reunieron hace unas semanas con el presidente de la Generalitat para
tratar sobre el clima político actual y conocer su visión sobre el
futuro inmediato de Cataluña.
"La aparición de una nueva frontera, inicialmente, supondría un
obstáculo para nosotros, pero podríamos adaptarnos como hacemos con
Portugal", aseguran desde una multinacional radicada en Barcelona
que sigue este modelo de gestión. Lo que no está claro es si mantendría
la sede ibérica en Cataluña o acabaría por llevarla a Madrid.(...)
Esas estimaciones hablan de que entre el 45 y el 50% del PIB
industrial catalán lo generan las multinacionales implantadas en esta
Comunidad. Aunque el peso de la industria en el PIB de Cataluña (como en
el resto de España) ha caído más de 8 puntos en los últimos diez años,
al pasar del 25,2 por ciento a un 17%, por esa regla de tres las
multinacionales industriales implantadas en Cataluña aportan alrededor
del 8% del PIB total.
Sin embargo, el peso de las grandes compañías extranjeras también se
produce en el sector de los servicios, por lo que ese peso relativo
podría verse aumentado. Según algunas estimaciones, el peso global de
las multinacionales (industriales y de servicios) se situaría entre el
10 y el 15%.
En cuanto a las exportaciones, el peso de las multinacionales es
clave. Cataluña, que se caracteriza por ser la economía más abierta del
conjunto de las comunidades autónomas (un 28 por ciento de las
exportaciones españolas son de empresas catalanas), cuenta con 2.300
empresas exportadoras, pero el grueso de las mismas las realizan 100
grandes compañías, muchas de ellas foráneas.
Seat, filial de Volkswagen,
y la japonesa Nissan Motor Ibérica encabezan el ranking de las diez
primeras empresas catalanas en el que figuran Gas Natural, Abertis, Roca
Corporación Empresarial, Mango, Puig, La Seda, Grífols o Nortia." (El Economista, 17/10/2012)
"La portavoz de Empresa y Ocupación del PSC, Montserrat Capdevila, ha instado a la Generalitat a retener la sede del fabricante de productos de higiene íntima Arbora en Cataluña.
La multinacional Procter & Gamble (P&G), que se hizo recientemente con el 100% del capital, estudia llevarla a Madrid.
En declaraciones a El Confidencial, Montserrat Capdevila explica que esta situación se debe a “la falta de actuación, la ausencia de una política industrial y el fracaso de Artur Mas y del conseller de Empresa y Ocupación Francesc Xavier Mena”.
La polémica sobre la política industrial de la Generalitat se ha desatado en plena precampaña al trascender los planes de la multinacional P&G de trasladar la sede de Arbora de Barcelona a Madrid después de haber comprado el 50% del grupo al holding inversor catalán Agrolimen, que preside Artur Carulla, por 814 millones de euros.
“Empezaron con el anuncio del cierre de Yamaha y llevan así dos años de legislatura”, ha recordado esta diputada del PSC en el Parlament. Capdevila lamenta que en la Generalitat “no se pongan a trabajar para evitar el cierre de empresas hasta que no se da la alarma desde la oposición”. (El Confidencial, 17/10/2012)
"La portavoz de Empresa y Ocupación del PSC, Montserrat Capdevila, ha instado a la Generalitat a retener la sede del fabricante de productos de higiene íntima Arbora en Cataluña.
La multinacional Procter & Gamble (P&G), que se hizo recientemente con el 100% del capital, estudia llevarla a Madrid.
En declaraciones a El Confidencial, Montserrat Capdevila explica que esta situación se debe a “la falta de actuación, la ausencia de una política industrial y el fracaso de Artur Mas y del conseller de Empresa y Ocupación Francesc Xavier Mena”.
La polémica sobre la política industrial de la Generalitat se ha desatado en plena precampaña al trascender los planes de la multinacional P&G de trasladar la sede de Arbora de Barcelona a Madrid después de haber comprado el 50% del grupo al holding inversor catalán Agrolimen, que preside Artur Carulla, por 814 millones de euros.
“Empezaron con el anuncio del cierre de Yamaha y llevan así dos años de legislatura”, ha recordado esta diputada del PSC en el Parlament. Capdevila lamenta que en la Generalitat “no se pongan a trabajar para evitar el cierre de empresas hasta que no se da la alarma desde la oposición”. (El Confidencial, 17/10/2012)
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