"Tras la intervención de Miguel Ángel Mayo, el coordinador en Cataluña
del Sindicato de Técnicos de Hacienda, en la comisión de investigación
parlamentaria del clan familiar Pujol-Ferrusola, se aprobó la
comparecencia de otras 43 personas. Entre ellas, las de los ex presidentes del Gobierno central Felipe González y José María Aznar.
¡Bien,
perfecto, mejor imposible! Eso sí, PSC y PP votaron en contra de llamar
a los ex presidentes. Como está mandado. Pero la abstención de CiU, que
supone un cambio respecto a la posición mantenida la semana pasada, ese
día se opuso, fue decisiva para que se aprobara la propuesta.
Rectificar es de sabios, felicidades. Gracias. (...9
Y no sólo eso. Entre las comparecencias aprobadas el lunes 1 de diciembre se incluye también la del consejero de Empresa y Empleo de la Generalitat, Felip Puig, así como la del ex consejero de Economía de CiU Macià Alavedra, la del ex secretario general de la Presidencia de la Generalitat Lluís Prenafeta y la de los saqueadores, confesos como es sabido, del Palau de la Música Fèlix Millet y Jordi Montull. (...)
Las comparecencias habían sido solicitadas por Esquerra, ICV, Ciutadans y la CUP.
Pero,
¿no hay algo raro en todos estos nombres? Sí, claro, la pregunta se
impone: ¿falta algo, falta alguien? Pues sí, parece que sí. Alguien que
fue muy amigo de Jordi Pujol Ferrusola, alguien muy reconocido por doña
Marta Ferrusola, alguien que estudió en el colegio de las élites
catalanas Aula, alguien que siempre ha reconocido que Jordi Pujol es
para él como un padre político, alguien que ayudó como nadie al
nombramiento del imputado Oriol Pujol como secretario general de CDC,
alguien que conoce muy bien los entresijos de la familia del ex molt
honorable, alguien que está donde está gracias al clan…
Efectivamente,
lo han adivinado, hablo de don Artur Mas el president neoliberal. ¿Y
entonces qué pasa?
Pues que Esquerra Republicana (¡Esquerra!
¡Republicana!) evitó que el presidente de la Generalitat tenga que
comparecer en la comisión que investiga el fraude fiscal, la corrupción
política y los negocios del clan P-F. ¿Y eso por qué?
El argumento del
portavoz “republicano”, Oriol Amorós: “por lo que representa la figura
del presidente”. ¿Por lo que representa? ¿Y qué representa para que no
puede acudir a una comisión a dar cuenta de sus relaciones, acaso
turbias, acaso también oscuras, con uno de los principales clanes del
país?
CiU se sumó, por supuesto, a la idea de evitar, de salvar al president de la comparecencia. (...)
Meritxell Borràs, la portavoz nacionalista, reclamó que la comisión
no se convierta en un circo mediático. Don Artur no es un cualquiera, no
es una simple atracción de la sociedad del espectáculo. Añadió un
chiste excelente que, de entrada, no formuló como tal: “No tenemos nada
que esconder, pero queremos un país limpio y no de justicieros”. ¿Se
rieron los parlamentarios asistentes? No puedo asegurarlo pero no me
negarán que había muchos motivos para ello.
Una pregunta del
millón queda pendiente. ¿La formulo? Es esta: ¿y por qué sigue David
Fernández presidiendo esta comisión de investigación? ¿No había
anunciado que dimitiría en el caso de que se vetaran algunas
comparecencias significativas? ¿No es el caso? ¿Entonces… (...)" (Salvador López Arnal , Rebelión, 06/12/2014)
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