"Es la vía trazada por Artur Mas, un presidente elegido con un programa
no independentista, sobre una sociedad donde el independentismo era
hasta hace poco una posición muy minoritaria —ahí están los tristes
resultados de ERC—, y que ha decidido borrar el pasado real, de
pluralidad política y de mayoría autonomista, por ese 51% alcanzado en
sondeos, que toma ya por opinión suya y unánime de Cataluña, lanzándose a
un discurso secesionista; quemando etapas no habrá riesgo de un
repliegue del entusiasmo alcanzado el 11-S.
Con razón canta Els segadors al regresar de su entrevista con Rajoy: bon cop de falç,
buen golpe de hoz. Óptima seña de decisionismo político; pésimo indicio
de un independentismo que se atenga a las reglas de juego
constitucionales. También por lo que concierne a algo que se está
olvidando: la mitad de los catalanes de hoy que no quieren la
independencia." (
Antonio Elorza El País, 21 SEP 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario