11/5/18

Hay una Catalunya representada por los independentistas. Otra representada por Ciudadanos. Y, en medio, otra Catalunya que parece pequeña pero es la mayor... la Cataluña de los trabajadores, de izquierdas, la catalanista… Es una amplia mayoría de la opinión pública y se ve cuando se hacen encuestas de opinión

"(...) Hay una Catalunya representada por los independentistas. Otra representada por Ciudadanos. Y, en medio, otra Catalunya que parece pequeña

La que es pequeña es la segunda, la de Ciudadanos. Tiene más de un millón de votos pero sociológicamente y culturalmente es pequeña. 

La mayor es la Catalunya huérfana, abandonada por sus padres y madres, la Cataluña de los trabajadores, de izquierdas, la catalanista… Es una amplia mayoría de la opinión pública y se ve cuando se hacen encuestas de opinión y le preguntan a la gente si prefiere una Catalunya independiente, una Catalunya dentro de una España centralizada o una Catalunya dentro de España y con más autogobierno. Esta última opción es siempre la mayoritaria. Incluso ahora.

Cuando hay elecciones no se nota

Porque no hay una buena representación política y sindical de esta Catalunya. Por razones complicadas. El Partido Socialista quedó medio muerto. Muchos de los comunes van a remolque de los independentistas. Los dirigentes sindicales quieren mantener la cohesión de sus sindicatos a toda costa y que no se rompan internamente o aparezcan sindicatos independentistas fuertes. 

Hay muchos elementos tácticos que hacen que esta mayoría no tenga una expresión política propia.

¿Siempre será así?

Eso tiene que acabar pero pasa como todo en la vida: ¿Quién será el portavoz, el representante de este proyecto? Hoy por hoy no lo vemos. Inevitablemente, unos de los que deberían hacer este papel son los comunes. También un Partido Socialista algo rehecho, reconstituido. Saldrán fuerzas políticas nuevas.

 ¿Los comerciantes catalanes están tranquilos y conforme con la situación actual? ¿A los industriales les gusta? No tienen nadie que hable por ellos. ¿Qué ha sido de los convergentes de toda la vida? Hay una mayoría social pero no hay núcleos políticos que la representen. 

¿Es un problema de proyectos o de personas?

Un poco de todo. La generación del antifranquismo se ha jubilado, está agotada. Ha habido un exceso de confianza en los últimos veinte o veinticinco años en los que no se han fomentado valores, cultura e ideología, mientras que el independentismo ha producido discurso, personalidad,… Hace falta un socio español sólido que ahora no existe. Hay una conjunción astral de factores negativos que explica que la mayoría social potencial esté políticamente encogida.

Hemos llegado donde estamos por algo más que una conjunción astral, imagino
Por muchos errores. Esta mayoría se quedó sin palabras, sin propuesta. Una parte de ella, el socialismo a escala española, se fía absolutamente de Rajoy. Esto significa renunciar a hablar con voz propia, que es lo peor que se puede hacer en política. 

Además, cuando esta mayoría llegó al poder, con el tripartito, no supo muy bien qué hacer, no tenía proyecto. Se vio muy claro, no tanto en los años Maragall como en los subsiguientes, donde el único proyecto que había era ir aguantando e ir tirando. Montilla fue clarividente cuando denunció la desafección que se estaba generando en Catalunya pero él y su entorno no supieron cómo hacerle frente.

Hay también un elemento de coyuntura. Se mezcla la crisis económica y social, el fracaso de la operación Estatuto de Autonomía a raíz de las maniobras del PP de recogida de firmas en contra y el recurso ante el Tribunal Constitucional y un horizonte político internacional sacudido a escala europea e internacional. 

Hay un conjunto de desequilibrios porque las piezas del viejo equilibrio se están reajustando. ¡Quién nos iba a decir que hoy el gran defensor del libre comercio mundial es China y el proteccionismo lo cultivan los americanos! Toda la sintaxis de cómo habíamos entendido la política en los años ochenta no vale y debe renovarse.

¿Sin los 23 años de Jordi Pujol como presidente de la Generalitat habríamos llegado hasta aquí?

No. A partir de los años noventa, Jordi Pujol comenzó a trabajar conscientemente para producir lo que está ocurriendo hoy en Catalunya. Nadie había hablado seriamente de independentismo. Lluís Companys, el 6 de octubre de 1934, proclamó el estado catalán dentro de la República Federal Ibérica.  (...)"                       (Entrevista a Joan Botella, presidente de Federalistes d`Esquerres, Siscu Baiges, CatlunyaPlural.cat, 16/04/18)

No hay comentarios: