Enric Juliana Ricart @EnricJuliana
Traducido del catalán
¿Una chica en TikTok puede hacer perder los nervios de algunos dirigentes catalanes? La política se equivoca cuando se deja llevar por la ira mediática. Libertad de expresión significa escuchar cosas que no nos gustan. Algún manager chino (TikTok) estará haciendo un harto de risa.
Una noia a TikTok pot fer perdre els nervis d’alguns dirigents catalans? La politica s’equivoca quan es deixa emportar per la ira mediàtica. Llibertat d’expressió vol dir escoltar coses que no ens agraden. Algún manager xinès (TikTok) deu estar fent un fart de riure.
"La joven pide disculpas por si "alguien se ha podido sentir ofendido", pero se ve víctima de un "señalamiento nacionalista"" (La Vanguardia, 03/03/23)
11:54 a. m. · 3 mar. 2023
89 mil Reproducciones 71 Retweets 32 Tweets citados 380 Me gusta
"Voy a contarles una experiencia personal.
Hace años un hijo mío se rompió un dedo. Estando de vacaciones por la zona de Tarragona, en plena Semana Santa, le saltó el yeso de la mano. Fuimos al CAP.
Nos derivaron al hospital de Reus, el más cercano. Tras seis horas en la sala de espera nos atendió un médico. En apenas un periquete volvió a meter el yeso en su sitio.
Eso sí: Era alemán. No hablaba ni una gota ni de catalán ni de castellano. No me quejé.
Fue una de las primeras medidas que hizo Marina Geli tras ser nombrada consejera de Salud: despedir a médicos veteranos. Entonces tuvo que contratar, deprisa y corriendo, facultativos extranjeros.
En medicina la veteranía debería considerarse un grado. (...)
Un último detalle sobre la experiencia: en la sala mi hijo y yo éramos los únicos autóctonos en el sentido exacto del término. Los hay que elogian la sanidad pública -como la escuela- pero luego se van a la privada o a la concertada.
Viene todo esto a cuento por el caso de Begoña Suárez, la enfermera interina de Cádiz a la que le exigen para unas oposiciones, el puto C-1 de catalán en declaraciones suyas.
Desde luego ha hecho mal. Y además colgarlo en las redes.
Pero varias cosas:
1) No sé si algunos de los que vociferan tanto lo sacarían. Incluido el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, al que suspendieron tres veces en la carrera por faltas de ortografía.
Me lo contó un día una fuente tan fidedigna como su exprofesor, Salvador Oliva, el mejor especialista en Shakespeare que tenemos, motivo por el que tuvo que trasladar el expediente de Girona a la UAB. Aún así acabó dejando la carrrera.
Carles Puigdemont acusa a la enfermera en cuestión nada menos que de “linguicidio”, que suena a “homicidio” pero en materia lingüística. Como si la situación del catalán dependiera de ella. Espero que, en el futuro, no necesitemos a enfermeras -como les está pasando en Inglaterra o en Holanda- y las tengamos que importar sin el C-1.
Puigdemont, además, retuitea un fotógrafo que la acusa, entre otras cosas de “catalanofobia” y exige su despido inmediato. El mismo que le dijo en su día a un diputado de Ciudadanos -en este caso Jordi Cañas- “chuloputas”, “prepotente” y “maleducado”. Un parlamentario -sea de Ciudadanos o de la CUP, da igual- con la ley en la mano representa a la soberanía popular, no sólo a sus votantes.
La reacción del conseller de Salut, Manuel Balcells, ante la queja de
Puigdemont, ha sido también fulminante: declaraciones "intolerables”.
Balcells, por cierto, retuitea Rac1, no Catalunya Ràdio. (...)
Mientras que en TV3 y medios afines no han parado de echar leña al fuego por una chica que -vistas las apariencias está en la veintena. En el TN noche han asegurado que es un “vídeo contra el catalán”, no contra el certificado C-1 de catalán o contra el requisito de pedirlo para hacer unas oposiciones en Catalunya.
La presentadora del Planta Baixa, Agnès Marquès, ahora entiendo por qué la pusieron, ha dejado claro que el vídeo “hace mucho daño” a “una realidad que es la nuestra" mientras que una tertuliana, Magda Oranich, antaño defensora de causas feministas, ha dicho que la enfermera en cuestión “tiene una pinta de tonta”. Nadie en la mesa la ha replicado.
Es curiosa esa doble vara de medir en Catalunya porque ninguno de los citados dijo nada cuando las estrellas de TV3 -en las redes o en programas en directo- decían aquello de “Puta España”, se metían con los españoles o incluso hacían alusiones sexuales sobre la Reina o sobre alguna menor. Y me de igual que sea princesa o infanta. Ante todo era una menor.
Entonces, en efecto, no oí a Carles Puigdemont ni a Manuel Balcells ni a Jordi Borràs ni a Toni Cruanyes ni a Agnès Marquès ni Magada Oranich ni siquiera a la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, decir nada.
Un día le pregunté a esta última sobre el tema y contestó que no haría "valoraciones" sobre el tema. Parece que, desde los medios públicos, se puede ir insultando y no pasa nada.
Poco antes la consejera de Presidencia, Laura Vilagrà, había comparado el citado "Puta España" con hacer una "bromita" sobre esa tradición tan catalana de golpear un leñor por Navidad. Los medios han de "entretener", decía y ser "transversales".
Que la enfermera obró mal, sí. Que, además, lo colgó en las redes; también.
Pero se agarran al catalán porque es lo último que les queda acabado
un proceso que no nos ha llevado a ningún parte excepto a la mala leche y
el cabreo. Incluso reaparece Pujol para pedir una gran movilización,
que es también una manera de blanquearlo además de invitarlo a
calçotades. (...)" (Xavier Puig, director de e-notícies, 03/03/23)
"La enfermera denuncia amenazas. "Me da mucho miedo salir a la calle".
Begoña Suárez, la enfermera andaluza de 25 años que ha criticado tener
que obtener "el puto nivel C de catalán" para poder opositar, ha
manifestado en un mensaje a un amigo recogido por El Mundo, que "ahora mismo me da mucho miedo salir a la calle, por las consecuencias más allá del hospital".
"Hay
gente que está muy loca y puede venir a darme una paliza. He recibido
un montón de amenazas", añade. También afirma estar en estado de
"ansiedad" tanto por los mensajes recibidos en las redes como por la
reacción de la Generalitat.
"No voy a dejar el contrato, pero
estoy tramitando la baja por estrés", cuenta después esta gaditana que
lleva trabajando en el área de Pediatría del Hospital de Vall d'Hebron
desde el pasado mes de julio. También admite que está recibiendo "apoyo
psicológico".
El consejero de Sanidad, Manel Balcells, manifestó
que "declaraciones como estas son intolerables en una servidora
pública. Desde el centro hasta el Departamento de Salud llegaremos hasta
el fondo de la cuestión. Abrimos un expediente. El sistema sanitario
debe garantizar la atención en la lengua propia de Cataluña". (e-notícies, 03/03/23)
"Lluís Llach: "echémosla". El cantautor llama a expulsar a la enfermera.
El cantautor y ex diputado de Junts pel Sí, Lluís Llach, en un tuit en
twitter, se ha manifestado también en torno a la polémica por la
enfermera del Vall d'Hebron, de 25 años, que se quejó por tener que
obtener "el puto nivel C de catalán" para poder opositar a una plaza
fija.
"Ejerzamos los derechos que nos quedan y echémosla. Tan
sencillo como eso", ha comentado Llach al respecto. De este modo ha
contestado un tuit que se quejaba de "¿una trabajadora pública haciendo
videos de contenido catalanófobo insultando y menospreciando la lengua
en horas de trabajo?". (e-notícies, 03/03/23)
No hay comentarios:
Publicar un comentario