"(...) El 2 de octubre caminaban cinco guardias civiles de paisano por la ciudad de Lérida. Pasaron por delante de dos mossos. Uno de estos dijo en voz alta:
-Ahí van los piolines.
Y empezaron a aplaudir con sarcasmo. Alguna otra
gente que pasaba empezó a aplaudir también. Entonces los guardias
desandaron el camino y se encararon con los dos mossos.
-¿Os parece normal esto?
Uno de los mossos les contestó que era lo normal por
haber pegado el día 1 a su abuela, a su madre, a sus hermanos y a sus
amigos.
Cada vez aplaudía más gente y los guardias se marcharon.
Estos microrreportajes, de los que nunca dio noticia
el periodismo catalán, me hicieron pasar ayer un mal rato en el juicio.
Creí que estaban describiendo en milimétrico formato bonsai dos ramas
del árbol podrido.
Por suerte, ayer mismo se conoció que la Audiencia de
Barcelona había absuelto a Téllez de desobediencia. Y también supe que
un juzgado local archivó hace meses las diligencias contra los mossos palmeros. Qué ansiolítico la Justicia." (Arcadi Espada, 03/04/19)
No hay comentarios:
Publicar un comentario