27/6/08

¡¡ Víctimas para Ibarretxe !! ¿Y si son de la Erxaintza? Pués también

El informe sobre víctimas de la policía y de los 'ultras' divide al Gobierno vasco. (…)

La directora de Víctimas del Terrorismo, Maixabel Lasa -viuda del gobernador civil de Guipúzcoa Juan Mari Jáuregui (PSE), asesinado por ETA- considera que el enfoque de Azkarraga es inadmisible, porque presenta la violencia en "términos de conflicto entre dos partes que se generan víctimas mutuamente", según fuentes de su equipo.” (El País, ed. Galicia, España, 26/06/2008, p. 14)

El tripartito cifra en 109 las víctimas de policías, ultras y GAL.

Una ley y una oficina de atención específicas, además de una ponencia parlamentaria, es lo que ayer propuso el Gobierno vasco ante la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara autonómica para los 109 muertos y 538 heridos en que cifró las víctimas de acciones policiales, parapoliciales o de grupos de extrema derecha en Euskadi. (…)

El informe recoge casos de fallecidos por torturas en comisaría o tras su paso por ella, en controles de carretera, en altercados de agentes policiales fuera de servicio y en manifestaciones reprimidas. Todo ello desde 1968 y sobre todo en los años 70 y 80. Atribuye 82 muertos y 344 heridos a las Fuerzas de Seguridad del Estado y 72 muertos y 273 heridos a grupos ultraderechistas y parapoliciales.

La directora de Víctimas del Terrorismo, Maixabel Lasa, cifró en 66 asesinados y 63 heridos las víctimas de 74 atentados de los GAL, Batallón Vasco Español, Triple A y otros.” (El País, ed. Galicia, España, 25/06/2008, p. 18)

El listado enumera un importante número de actuaciones protagonizadas, en su mayoría, por Policía Nacional y Guardia Civil. El departamento de Justicia no duda, sin embargo, en denunciar asimismo una veintena de actuaciones realizadas por la Ertzaintza y en cuestionar, en cierta medida, los métodos diseñados desde la consejería de Interior. El informe, desde ayer en manos de todos los grupos parlamentarios, incluida EHAK, reseña el nombre completo de un agente de la Policía autónoma acusado de propinar una paliza a un joven.

El Gobierno vasco entiende que deben contabilizarse como víctimas quienes hayan sufrido heridas tras cargas de fuerzas policiales de todo tipo o quienes sufrieron infartos tras estas movilizaciones, aunque no recibieran ninguna lesión directa. Es el caso de un joven que, al salir corriendo tras una marcha de protesta, cayó por un desnivel y falleció o el de un trabajador de los Astilleros Euskalduna que murió por un problema coronario durante las movilizaciones por el cierre de la empresa o, incluso, el de un profesor que se rompió un brazo cuando se manifestaba ante la sede de Lakua en Vitoria.

En el mismo bloque aparecen sucesos protagonizados por policías que exhibieron y hasta llegaron a emplear sus armas reglamentarias mientras estaban de paisano en discotecas o bares, en algunos casos borrachos. Tampoco faltan altercados antes o después de partidos de fútbol como los registrados tras un Athletic-Real de 1976 o el asesinato del socio txuriurdin Aitor Zabaleta cerca del estado del Atletico de Madrid.

En la relación, también se incluyen algunas denuncias de miembros de ETA. Figuran, entre otros, Igor Portu y Mattin Sarasola, cuyas supuestas torturas aún investiga la Justicia, y también José Luis Salegi, ex jefe de los Comandos Autónomos Anticapitalistas fallecido en México. Organizaciones del MLNV denunciaron que había sufrido abusos en el país centroamericano, pero un forense contratado por la familia dijo no apreciar signos de violencia. El juez archivó la causa.” (EL CORREO, 25/6/2008. Fuente: fundación para la Libertad)

Intento de “recrear la historia”. En los años 70, y primeros 80, en toda España, obreros y estudiantes morían a manos de una policía fascista. También en el País Vasco, claro (no los del PNV, PP, o CiU).

En España nunca hubo “impunidad social” para esos pistoleros o policías. Los demócratas siempre lucharon contra ellos. Pero en el País Vasco, esos mismos demócratas que lucharon y murieron contra el fascismo, siguen luchando y muriendo contra el residuo vasco del pistolerismo fascista. Los mismos.

Porque resultó muy cómodo “asesinar” españoles, pues si los guardias civiles eran españoles, todos los españoles eran guardias civiles.

La “impunidad” de la policía fascista duró hasta que Felipe González logró democratizarla (después del golpe de estado del 23-F). Pero siempre se les consideró unos asesinos (no así a los etarras de la primera época, un inmenso e inexplicable error).

Hoy la “impunidad” de los fascistas vascos se perpetúa en una sociedad que nunca salió del franquismo, y que necesita una ley que iguale víctimas democráticas y verdugos terroristas.

Para eso Ibarretxe necesita víctimas (nacionalistas) que oponer a los asesinados por ETA. Y se inventa las víctimas de la brutalidad policial. Quiénes ya tienen a los jueces para pedir reparaciones, y el castigo de los policías culpables. Los excesos de la policía democrática (española, o francesa, o vasca), sus malos tratos (a borracho, carteristas o terroristas) pueden ser denunciados.

Los torturados por la policía franquista (obreros en su mayoría, mujeres, estudiantes, incluso etarras) han visto reconocido su sufrimiento. Los amenazados de muerte en el País Vasco por ETA no tienen ayuda ni consuelo, no del PNV precisamente. A Ibarretxe le estorban. Y trata de neutralizar su ejemplo.

No hay comentarios: