El diputado autonómico del PP encargado de defender la posición de los populares, Rafael López, ha rechazado el texto por considerar que separa acogida e integración y porque fija la lengua catalana como “peaje” para acceder al permiso de residencia. “Es una ley para crear nacionalistas, no ciudadanos”, ha señalado López. El Consejo de Garantías Estatutarias dictaminó recientemente que esta norma, en el apartado lingüístico, no era contraria al Estatuto ni a la Constitución.
Por su parte, Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, ha defendido que los inmigrantes no deben tener competencias básicas “ni en catalán ni en castellano” para acceder a la residencia, y ha asegurado que la Ley de Acogida va a marcar un “patrón identitario único”. José Domingo, diputado autonómico del Grupo mixto, que también ha intervenido en el pleno parlamentario, ha asegurado que la norma es “exclusiva”, y ha anunciado que instará al Defensor del Pueblo a que presente un recurso de inconstitucionalidad de la norma. (...)
Así, los inmigrantes (empadronados: 1.189.279) obtendrán una certificación oficial tras cursar un itinerario formativo de primera acogida, que acreditará su integración para renovar las autorizaciones de residencia temporal, de acceso a la nacionalidad o al mercado de trabajo. La formación ineludible consiste en 135 horas de lengua catalana, 20 horas de conocimientos de la sociedad catalana y el marco jurídico catalán y 10 horas sobre inserción laboral." (lavozdebarcelona.com, 28/04/2010)
No hay comentarios:
Publicar un comentario